MADRID, 17 (SERVIMEDIA)
La mesa constituida entre el Govern de les Illes Balears, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, el Consell de Mallorca, el Ayuntamiento de Alcúdia, Red Eléctrica y la plataforma de Vecinos de Alcúdia Afectados por el Cable (VAAC), ha culminado sus trabajos con la concreción de un nuevo trazado terrestre de consenso para el segundo enlace entre la península y las Illes Balears.
Según informó Red Eléctrica, su característica principal es que reduce significativamente el paso por zonas residenciales al haberse habilitado el uso de carreteras y viales públicos por las administraciones involucradas.
Los trabajos de la mesa se han centrado en la definición de un trazado terrestre alternativo para la interconexión, ya que se partía de un consenso previo sobre la ubicación de la estación conversora en el polígono de Na Lloreta y también respecto del punto de aterraje del enlace por Sa Ferradura, entre las bahías de Alcudia y Pollença. Este punto de aterraje, el lugar de entrada del cable al mar es el de menor impacto ambiental, tras el análisis de hasta 13 alternativas de entre las propuestas por Red Eléctrica y las diferentes administraciones autonómicas y locales.
Partiendo del punto de aterraje en la zona de Sa Ferradura -identificado como la opción con menor impacto sobre el Hábitat de Interés Comunitario Europeo Posidonia oceánica-, el trazado terrestre alternativo avanza hacia el camí de Salou, enlaza con la carretera MA-3460, continúa por la pista forestal existente del Puig de Sant Martí y finaliza en el polígono de Na Lloreta, donde se ubicará la estación conversora. Este emplazamiento se sitúa en una zona industrial y muy próxima a la subestación existente de Sant Martí.
Además, gracias al nuevo trazado, se reduce en un 67 % el paso por zonas residenciales, al aprovechar al máximo caminos públicos y carreteras ya existentes. Así mismo, tanto el punto de aterraje como el trazado terrestre se compatibilizan con la futura interconexión eléctrica entre Mallorca y Menorca.
El futuro segundo enlace entre la Península y las Illes Balears unirá la estación conversora de Fadrell, en Castellón, con la nueva estación conversora de Sant Martí. Constará de un enlace submarino de 400 kilómetros, de los cuales 390 son submarinos y el resto soterrados.
La segunda interconexión es un proyecto estratégico para el sistema eléctrico balear en su conjunto, ya que todas sus islas están actualmente interconectadas entre sí, y supondrá un importantísimo refuerzo para la calidad y garantía de seguridad del suministro, el avance en los objetivos de transición ecológica y un menor uso de combustibles fósiles en el sistema de generación eléctrica en el archipiélago.
Los beneficios de la primera interconexión, en servicio desde 2012, se verán más que duplicados con el segundo enlace. Ambos enlaces podrán suministrar el 65% de la demanda de Baleares, lo que supondrá una reducción de más de 900 mil toneladas anuales de emisiones de CO2 y un ahorro de costes del sistema eléctrico del entorno de los 150 millones de euros al año.
|