MADRID, 03 (SERVIMEDIA)
La presidenta de la World Compliance Association (WCA), Alba Lema, reclamó medidas contra la corrupción y destacó que en el actual escenario "resulta preocupante el retraso en la constitución efectiva y puesta en marcha de la Autoridad Independiente de Protección del Informante en España, pieza clave para dar cumplimiento a lo dispuesto en la ley 2/2023 de lucha contra la corrupción y proteger de manera real a quienes, desde dentro de las organizaciones, se atreven a alzar la voz".
También considera igual de alarmante la reciente eliminación del Consejo de Participación Ciudadana de la Agencia Valenciana Antifraude, un órgano consultivo y plural del que la World Compliance Association forma parte. "Este espacio de diálogo entre instituciones y sociedad civil había sido, hasta ahora, un referente nacional e internacional en materia de transparencia, integridad y prevención de la corrupción en el ámbito autonómico", asegura.
En un momento en el que cada mañana nos despertamos con nuevos titulares que revelan casos de corrupción, malas prácticas o uso indebido de recursos públicos, "el mensaje para los profesionales del cumplimiento es tan claro como urgente: no podemos bajar la guardia. La integridad no puede ser una palabra vacía y mucho menos puede convertirse en un eslogan decorativo mientras las estructuras que deberían protegerla se debilitan", indica.
En este contexto, desde la World Compliance Association reiteran su compromiso y dar ejemplo. "Debemos actuar como un faro ético, ofreciendo herramientas, formación y acompañamiento a profesionales, instituciones y organizaciones del sector público y privado, al tiempo que lideramos un discurso claro e independiente sobre la importancia de mantener –y reforzar– las garantías institucionales que protegen el cumplimiento y los derechos fundamentales", concluye.
Y concluye: "De cara a nuestro próximo Encuentro de Asociados, quiero compartir con todas las personas que conforman la WCA un mensaje de reconocimiento y aliento. Gracias por vuestra labor incansable, por no rendiros ante el escepticismo, y por seguir demostrando que el cumplimiento puede –y debe– marcar la diferencia. La ética no puede esperar. Tampoco el compliance".
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