El negocio se impone a los deportistas. No es la primera vez ni será la última. El Mutua Madrid Open pasará a la historia en este 2012 como el primer torneo que se jugará sobre arcilla azul en lugar del tradicional color rojizo. La explicación es meramente televisiva: durante las retransmisiones de los encuentros, el amarillo de la pelota se diferenciaría mucho mejor con este nuevo color de la superficie. Los mal pensados esgrimen otro pensamiento: casualmente este color azul corresponde al mismo azul que identifica al patrocinador más importante del torneo. ¿Innovación o dinero?

De ser una pista de exposición a formar parte directa del espectáculo. La pista azul que servía de entrenamiento en la pasada edición ha ascendido de estatus, convirtiéndose en referente de este torneo de Madrid, muy dado a innovar, como ya sucedió hace unos años con la implantación de los modelos como recogepelotas. Entonces, se superaron todas las críticas de los estamentos feministas. Ahora, Tiriac, dueño del torneo, da un paso más allá: desafiar a los tenistas con estas pistas de arcilla azul -ya lo intentó implantar en 2009-, aunque parte con ventaja al contar con el apoyo de la ATP y WTA. Todo lo contrario que con los jugadores, donde hay más voces críticas que a favor de esta innovación. Pero Tiriac se muestra inflexible: “No tengo que hablar con ningún jugador aparte. Realmente no hay limitación de colores. Los campeones se van, el deporte se queda”. Y, de momento, así se hace.

Nadal, en contra de la arcilla azul
Nadal es uno de los más críticos. “La pista te da más opciones de jugar peor. Para los especialistas en tierra, los factores van un poquito en contra aquí. Para jugadores como Isner, Raonic o Federer, puede ir muy bien. Favorece y premia muchísimo, para ser una pista de tierra, el servicio y el primer golpe. Lo hace más de lo habitual. La bola viaja muy rápida y en lugar de saltar hacia arriba, salta un pelín hacia adelante”, valoró. “Luego, hay dos problemas y medio en la central. La valla de publicidad de atrás es baja y del mismo color de la pista. Marea. Se pierde mucho la pelota cuando el rival la golpea a esa altura. La pista resbala un poquito más de lo habitual, es escurridiza, y en algunos momentos está un pelín blanda, con botes irregulares”. Menos locuaces están Federer y Djokovic, aunque también son contrarios.

Otros, por el contrario, y aunque son minoría, están a favor de esta modificación. “Hay que acostumbrarse a ver la bola azul y la pista, pero las sensaciones del bote son las mismas. Y este torneo siempre ha sido rompedor, así que estoy a favor", aseguró Fernando Verdasco. “Es un poco diferente. Es la primera vez que juego en ella, pero creo que es única. Es obviamente lo que el torneo quiere. Se trata de que el torneo sea único y diferente. Creo que para el espectáculo y para el interés en el torneo es algo muy bueno”, resumió Sharapova. Como su compañera Jelena Jankovic: “Mis primeras impresiones son buenas. Es una buena pista, algo rápida, pero hasta ahora me gusta.

Nadal rechaza el azul

Y finalmente un tercer grupo, se caracterizan por sus declaraciones políticamente correctas. "No tengo nada en contra, pero creo que debería probarse antes en algún torneo más pequeño", dijo el tenista albaceteño Guillermo García-López. “Los jugadores preferimos jugar en 'arcilla' roja, pero al mismo tiempo, alguna vez, cuando he asistido a algunos partidos en Madrid resulta complicado ver la bola, así que entiendo los motivos de este cambio", apuntó Murray, baja a última hora por una lesión de espalda.

El tenis debe evolucionar
Ion Tiriac, padre de la idea, continúo: “El Mutua Madrid Open es un torneo del que, a pesar de llevarse ya 10 ediciones disputadas, bien podríamos decir que acabar de nacer. Es decir, se antoja como el marco propicio para abrir la puerta a posibles cambios. Al ser un torneo joven sigue en vías de crecimiento. Primero innovó en la selección de los recogepelotas y después se mudó de casa para comodidad de espectadores, jugadores y medios de comunicación. Sin embargo, no se ha conformado con eso”. Y, en este sentido, añadió: “El Mutua Madrid Open es un torneo que sigue labrando su propia personalidad, que busca afianzar su sello de identidad. El azul será su rasgo distintivo, su marca, pero no por eso dejará de ser un torneo del circuito de tierra, como lo son Roland Garros, Montecarlo, Roma…. Pertenecerá al mismo circuito que éstos porque la pista no será ni de hierba ni rápida, será de tierra”. Manolo Santana, director del Mutua Madrid Open tampoco tiene dudas: “Sólo estamos facilitando el seguimiento del juego a los espectadores y a los telespectadores. En un mundo en el que la competencia por la audiencia es feroz, el tenis también debe evolucionar. Debe proteger su cuota de pantalla y ampliarla utilizando los medios que tiene a su alcance sin ir en contra de su filosofía”.

De arcilla roja a arcilla azul
Pero, ¿cómo se hacen estas pistas de arcilla azul? El proceso de fabricación es semejante al de elaboración de la arcilla rojiza, con la diferencia de la fase del tintado en azul. La arcilla proviene básicamente de la trituración del ladrillo seleccionado y tamizado –con una granulometría de 1 a 1,5 mm.- y con los siguientes pasos: amasar una base de arcilla blanca, que se obtiene tras extraer el óxido férrico (color rojizo) de la misma; cocción a una temperatura de entre 900 y 950 grados; y trituración, molido y tamizado de ese ladrillo obtenido con la granulometría adecuada. El tintado se puede realizar de dos maneras: al amasar la tierra blanca se añadiría el tinte y se desarrollarían los pasos siguientes obteniendo la tierra batida azul; o bien después de completar todo el ciclo descrito anteriormente, se procede a la inmersión de la tierra blanca en el tinte durante 24 horas, pasando posteriormente a la fase de secado.

Finalmente, se preparan las pistas de los diferentes estadios de la Caja Mágica: sobre la base de la pista hay que poner dos tipos de tierra azul. La primera capa de tierra azul tiene que teñir esa base de la pista para evitar que cuando se disputen los partidos el deslizar de los jugadores por la misma deje señales blancas. La granulometría de esta primera capa es mucho más fina y es la que incrustamos sobre la base. Una vez finalizado este proceso se pondría ya la segunda capa de tierra azul, que es la que se ve, en la que se desliza el jugador. En todo el proceso el consumo de arena aproximado por pista sería de unas 3,5 toneladas.