El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha pedido este miércoles a los musulmanes que "no encierren a las mujeres", agregando que "la lógica que indica que las mujeres sólo deben estar en casa es errónea".

En una intervención durante una conferencia de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI) sobre el papel de la mujer, el mandatario turco ha manifestado que "una nación fuerte no puede construirse sobre esa lógica".

"Por eso no tenemos derecho a preguntar por qué Occidente está tan por delante de nosotros", ha dicho, resaltando que es "crucial" reconocer esto para lograr el desarrollo de los países, según ha informado el diario turco 'Hurriyet'.

"Si queremos que las mujeres contribuyan en los objetivos de desarrollo de nuestros países, debemos garantizar que tienen su parte de los beneficios y las oportunidades", ha defendido.

Así, ha indicado que "no es realista esperar que las mujeres contribuyan antes de estar totalmente incluidas en el empleo y los mecanismos de toma de decisiones".

Las declaraciones de Erdogan contrastan con algunas otras realizadas en los últimos meses sobre este tema, especialmente las centradas en la maternidad y la igualdad de género.

En junio, el mandatario afirmó que "una mujer que se abstiene de la maternidad diciendo que trabaja niega su feminidad", al tiempo que agregó que "una mujer que rechaza la maternidad y las labores de la casa se arriesga a perder su libertad".

Días antes había defendido que las familias musulmanas no deberían recurrir a la planificación familiar o el control de natalidad, en un nuevo llamamiento a los musulmanes píos a tener más hijos.

"Multiplicaremos nuestros descendientes. Hablan sobre planificación familiar, control de natalidad. Ninguna familia musulmana puede tener ese enfoque", sostuvo. "Nadie puede interferir en la obra de Dios. La primera obligación aquí corresponde a las madres", remachó.