Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Sociedad | Ideología

De cómo se cambia la forma de pensar

|

Después de mi artículo de hace un par de semanas en el que la historieta de la rana hervida me servía para una reflexión sobre el proceso que padecemos de eliminación de nuestras raíces para ir aceptando cualquier cosa que quiera imponernos el gobierno de turno, he sabido que este proceso está estudiado perfectamente por el politólogo norteamericano Joseph Overton y funciona en una sociedad tolerante, sin ideales rigurosos y en la que la división entre el bien y el mal no esté claramente establecida.

Se trata de una secuencia de acciones concretas con el fin de conseguir el resultado deseado que puede ser más eficaz que un arma de destrucción masiva. Es la ventana de posibilidades con la que es posible legalizar desde la eutanasia al canibalismo.

Aquí ya viene funcionando hace tiempo por ejemplo con el aborto, en donde se pasó de su despenalización a convertirlo en un derecho o la sodomía y la homosexualidad que está plenamente legalizada, pues ha pasado de ser una práctica sexual aberrante a la consideración de matrimonio respetable.

Naturalmente que esto no ocurre de un día para otro. Hacer socialmente aceptable una práctica que durante siglos era rechazable se produce por etapas. La secuencia es pasar de lo impensable a lo radical, de lo radical a lo aceptable, de lo aceptable a lo sensato, de lo sensato a lo popular, de lo popular a lo político

En primer lugar hay que hacer desaparecer del lenguaje las palabras mismas que identificaban aquello que se quiere cambiar y desde estas nuevas palabras pasar a su defensa radical, a ir proponiendo su aceptación, a presentarlo como algo sensato, como algo popular y por último que los políticos lo conviertan en medidas coercitivas..

La defensa de la salud sexual y reproductiva de las mujeres o la defensa de la planificación familiar, exige métodos y medidas que desplazan la cuestión del aborto a la interrupción voluntaria del embarazo en las mejores condiciones sanitarias posibles. Se pasa de lo rechazable a lo socialmente aceptable. Si alguien esgrime el derecho a la vida del concebido se le ignora sin más.

Hablar de sodomía está feo, pues se cambia por orientación sexual, que resulta más científico y se defiende el derecho de cada cual a decidir la forma de ejercer su propia sexualidad, incluso a elegir si quiere aceptar su sexo biológico o cambiarlo. Si alguien invoca que la sexualidad está al servicio de la procreación también se le ignora o se le ridiculiza.

La eutanasia está en pleno proceso de legalización y como es natural se le llama derecho a una muerte digna, se busca el apoyo científico, se publicita en los medios y se convierte en un derecho que la sociedad termina considerando aceptable y sensato a un paso de su aprobación por los legisladores.

Todo empezó con la tolerancia. Hace ya bastante tiempo que fuimos convencidos de que hay que ser tolerantes con todo lo que se nos presente como progresista aunque el resultado ha sido la aparición de una radical intolerancia hacia quienes se opongan a la presión que padecemos. Por eso pienso que se combate siempre a la religión como el baluarte que puede oponerse a la manipulación educativa en la que lo bueno y lo malo lo terminan decidiendo los parlamentos.

De cómo se cambia la forma de pensar

Francisco Rodríguez
miércoles, 9 de marzo de 2016, 08:36 h (CET)
Después de mi artículo de hace un par de semanas en el que la historieta de la rana hervida me servía para una reflexión sobre el proceso que padecemos de eliminación de nuestras raíces para ir aceptando cualquier cosa que quiera imponernos el gobierno de turno, he sabido que este proceso está estudiado perfectamente por el politólogo norteamericano Joseph Overton y funciona en una sociedad tolerante, sin ideales rigurosos y en la que la división entre el bien y el mal no esté claramente establecida.

Se trata de una secuencia de acciones concretas con el fin de conseguir el resultado deseado que puede ser más eficaz que un arma de destrucción masiva. Es la ventana de posibilidades con la que es posible legalizar desde la eutanasia al canibalismo.

Aquí ya viene funcionando hace tiempo por ejemplo con el aborto, en donde se pasó de su despenalización a convertirlo en un derecho o la sodomía y la homosexualidad que está plenamente legalizada, pues ha pasado de ser una práctica sexual aberrante a la consideración de matrimonio respetable.

Naturalmente que esto no ocurre de un día para otro. Hacer socialmente aceptable una práctica que durante siglos era rechazable se produce por etapas. La secuencia es pasar de lo impensable a lo radical, de lo radical a lo aceptable, de lo aceptable a lo sensato, de lo sensato a lo popular, de lo popular a lo político

En primer lugar hay que hacer desaparecer del lenguaje las palabras mismas que identificaban aquello que se quiere cambiar y desde estas nuevas palabras pasar a su defensa radical, a ir proponiendo su aceptación, a presentarlo como algo sensato, como algo popular y por último que los políticos lo conviertan en medidas coercitivas..

La defensa de la salud sexual y reproductiva de las mujeres o la defensa de la planificación familiar, exige métodos y medidas que desplazan la cuestión del aborto a la interrupción voluntaria del embarazo en las mejores condiciones sanitarias posibles. Se pasa de lo rechazable a lo socialmente aceptable. Si alguien esgrime el derecho a la vida del concebido se le ignora sin más.

Hablar de sodomía está feo, pues se cambia por orientación sexual, que resulta más científico y se defiende el derecho de cada cual a decidir la forma de ejercer su propia sexualidad, incluso a elegir si quiere aceptar su sexo biológico o cambiarlo. Si alguien invoca que la sexualidad está al servicio de la procreación también se le ignora o se le ridiculiza.

La eutanasia está en pleno proceso de legalización y como es natural se le llama derecho a una muerte digna, se busca el apoyo científico, se publicita en los medios y se convierte en un derecho que la sociedad termina considerando aceptable y sensato a un paso de su aprobación por los legisladores.

Todo empezó con la tolerancia. Hace ya bastante tiempo que fuimos convencidos de que hay que ser tolerantes con todo lo que se nos presente como progresista aunque el resultado ha sido la aparición de una radical intolerancia hacia quienes se opongan a la presión que padecemos. Por eso pienso que se combate siempre a la religión como el baluarte que puede oponerse a la manipulación educativa en la que lo bueno y lo malo lo terminan decidiendo los parlamentos.

Noticias relacionadas

La libertad de expresión es un derecho fundamental que abarca las libertades de opinión, información y prensa, es esencial para ejercer otros derechos humanos y participar activamente en una sociedad libre y democrática, pero lo mismo en España que toda Europa, este derecho se enfrenta a desafíos y tensiones debido a la censura y a las restricciones.

Tras conocer por la prensa que un juzgado ha abierto diligencias de investigación por una denuncia contra su esposa, el presidente del Gobierno ha publicado una carta abierta dirigida a la ciudadanía en el antiguo Twitter, en la que afirma que: "Vive con impotencia el fango que se esparce sobre su mujer", y se pregunta si debe continuar o renunciar, motivo por el cual cancela su agenda, y se da de plazo hasta el próximo lunes, para meditar su futuro.

Pedro Sánchez habría dado por amortizada la actual legislatura y, con un golpe de efecto, anunciará presumiblemente el 29 de abril el adelanto de las Elecciones Generales para el próximo otoño, con la esperanza de renacer cual Ave Fénix y obtener unos resultados que le permitan conformar un Gobierno en solitario tras fagocitar los restos del naufragio de la efímera candidatura unitaria de izquierdas Sumar y con apoyos externos de los grupos nacionalistas periféricos.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto