Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Violencia Género | Mujeres | Machismo
Que en un par de días haya cuatro asesinatos por violencia machista indica que se debe proteger más a las mujeres y a los menores

Más medidas contra la violencia de género

|

Cuarenta muertos por violencia de género en lo que va de 2018 es una cifra aterradora. Ante una denuncia por maltrato o violencia se debería actuar sin contemplaciones y dar protección a la persona afectada. Y, si es necesario, ofrecer toda la ayuda precisa de psicólogos para que, por miedo o temor, las víctimas no dejen de declarar la verdad acerca de lo que están pasando.


De este modo, se garantizaría una más eficaz protección para evitar esta sangría continua de vidas humanas inocentes. Mayor cantidad de pulseras electrónicas de aviso y de móviles con sistemas de auxilio o botón de pánico y otra serie de medidas similares ante una denuncia que responda a la realidad sería lo adecuado. Me parece que bajaría el número de mujeres y menores asesinados con armas blancas o de fuego.


Por lo que se observa, a pesar de las campañas televisivas de lucha contra la violencia y el maltrato, está claro que los violentos siguen siéndolo y haciendo de las suyas.


Igual sería positivo que aumentara el número de policías o de Guardias Civiles que se dedicaran a la tarea de evitar la violencia contra las mujeres, si esto fuera posible. En cualquier caso, existe la posibilidad abierta de incrementar mucho las medidas de control y de protección ante la petición argumentada y razonada de mujeres que han sido maltratadas, por ejemplo, tras un divorcio o ruptura de relación sentimental. Porque suele ser una de las situaciones o procesos desencadenantes de las conductas violentas contra la integridad de las personas. No se pueden consentir las amenazas de ningún tipo y tampoco las agresiones físicas o verbales. Son actos denunciables ante las fuerzas de seguridad o la justicia.


Parece ser que las órdenes de alejamiento o medidas similares pueden ser efectivas en muchos casos, pero pueden ser complementadas con otros procedimientos de vigilancia o protección más sofisticados.


Igual antes de casarse puede ser adecuado que los contrayentes realizaran un test de personalidad o una prueba psicotécnica que detecte actitudes violentas o un machismo que puede conducir a agresiones en el futuro de la vida de la pareja. Puede parecer muy exagerado y descabellado, pero igual se evitaban asesinatos machistas.


También es cierto que en la educación se está insistiendo en el respeto a todos y en los valores éticos de la paz, la tolerancia y la bondad, pero parece que no da mucho resultado en un cierto número de personas. Y las mujeres parece que están indefensas ante maridos o parejas violentas. No es así, porque la ley las ampara, pero para las que mueren asesinadas es evidente que la protección no ha sido suficiente.


Indudablemente, la seguridad absoluta no es posible, pero se pueden poner más medios humanos y mayor cantidad de dispositivos electrónicos que avisen para que haya más protección y la policía pueda reaccionar antes para evitar asesinatos de mujeres o niños.


Considero que una de las claves para proteger más a las mujeres que lo necesiten es que ante el primer indicio o prueba clara de violencia, maltrato o abuso actuar de inmediato y apoyar psicológicamente a las víctimas. Se pueden crear protocolos de actuación renovados y que sean más eficaces que los actualmente existentes.


Existe también el ensayo y error. Por un exceso de seguridad o de medidas de protección no se producen consecuencias desastrosas o muy negativas. En cambio, sin medidas o tardías e insuficientes, el resultado puede ser irremediable, por desgracia. Y esto sin culpabilizar a nadie, pero creo que es la realidad.


Puedo pensar y creer que se hace lo que se puede, pero es necesario hacer mucho más para proteger a las mujeres que lo precisan y son, quizás, muchas más de lo que parece, porque por miedo no se denuncia en numerosas situaciones.


También la sociedad debe colaborar más para denunciar a los violentos, si observa su conducta agresiva. Está muy bien lamentar los asesinatos de mujeres, pero se necesitan nuevas medidas normativas y policiales. También los voluntarios de diversas organizaciones no gubernamentales podrían, tal vez, realizar una labor de protección y asistencia y en contra del machismo y de la violencia.


Más medidas contra la violencia de género

Que en un par de días haya cuatro asesinatos por violencia machista indica que se debe proteger más a las mujeres y a los menores
José Manuel López García
miércoles, 26 de septiembre de 2018, 08:37 h (CET)

Cuarenta muertos por violencia de género en lo que va de 2018 es una cifra aterradora. Ante una denuncia por maltrato o violencia se debería actuar sin contemplaciones y dar protección a la persona afectada. Y, si es necesario, ofrecer toda la ayuda precisa de psicólogos para que, por miedo o temor, las víctimas no dejen de declarar la verdad acerca de lo que están pasando.


De este modo, se garantizaría una más eficaz protección para evitar esta sangría continua de vidas humanas inocentes. Mayor cantidad de pulseras electrónicas de aviso y de móviles con sistemas de auxilio o botón de pánico y otra serie de medidas similares ante una denuncia que responda a la realidad sería lo adecuado. Me parece que bajaría el número de mujeres y menores asesinados con armas blancas o de fuego.


Por lo que se observa, a pesar de las campañas televisivas de lucha contra la violencia y el maltrato, está claro que los violentos siguen siéndolo y haciendo de las suyas.


Igual sería positivo que aumentara el número de policías o de Guardias Civiles que se dedicaran a la tarea de evitar la violencia contra las mujeres, si esto fuera posible. En cualquier caso, existe la posibilidad abierta de incrementar mucho las medidas de control y de protección ante la petición argumentada y razonada de mujeres que han sido maltratadas, por ejemplo, tras un divorcio o ruptura de relación sentimental. Porque suele ser una de las situaciones o procesos desencadenantes de las conductas violentas contra la integridad de las personas. No se pueden consentir las amenazas de ningún tipo y tampoco las agresiones físicas o verbales. Son actos denunciables ante las fuerzas de seguridad o la justicia.


Parece ser que las órdenes de alejamiento o medidas similares pueden ser efectivas en muchos casos, pero pueden ser complementadas con otros procedimientos de vigilancia o protección más sofisticados.


Igual antes de casarse puede ser adecuado que los contrayentes realizaran un test de personalidad o una prueba psicotécnica que detecte actitudes violentas o un machismo que puede conducir a agresiones en el futuro de la vida de la pareja. Puede parecer muy exagerado y descabellado, pero igual se evitaban asesinatos machistas.


También es cierto que en la educación se está insistiendo en el respeto a todos y en los valores éticos de la paz, la tolerancia y la bondad, pero parece que no da mucho resultado en un cierto número de personas. Y las mujeres parece que están indefensas ante maridos o parejas violentas. No es así, porque la ley las ampara, pero para las que mueren asesinadas es evidente que la protección no ha sido suficiente.


Indudablemente, la seguridad absoluta no es posible, pero se pueden poner más medios humanos y mayor cantidad de dispositivos electrónicos que avisen para que haya más protección y la policía pueda reaccionar antes para evitar asesinatos de mujeres o niños.


Considero que una de las claves para proteger más a las mujeres que lo necesiten es que ante el primer indicio o prueba clara de violencia, maltrato o abuso actuar de inmediato y apoyar psicológicamente a las víctimas. Se pueden crear protocolos de actuación renovados y que sean más eficaces que los actualmente existentes.


Existe también el ensayo y error. Por un exceso de seguridad o de medidas de protección no se producen consecuencias desastrosas o muy negativas. En cambio, sin medidas o tardías e insuficientes, el resultado puede ser irremediable, por desgracia. Y esto sin culpabilizar a nadie, pero creo que es la realidad.


Puedo pensar y creer que se hace lo que se puede, pero es necesario hacer mucho más para proteger a las mujeres que lo precisan y son, quizás, muchas más de lo que parece, porque por miedo no se denuncia en numerosas situaciones.


También la sociedad debe colaborar más para denunciar a los violentos, si observa su conducta agresiva. Está muy bien lamentar los asesinatos de mujeres, pero se necesitan nuevas medidas normativas y policiales. También los voluntarios de diversas organizaciones no gubernamentales podrían, tal vez, realizar una labor de protección y asistencia y en contra del machismo y de la violencia.


Noticias relacionadas

Los poderes fácticos de todo tipo, políticos, académicos y de cualquier otra índole no cejan en su continuo martilleo para amedrantar a los ciudadanos con los perniciosos males que padecerá la Humanidad por el destrozo de la Naturaleza que continuamente llevamos a cabo por lo que nos sobrevendrán infinitas calamidades sin cuento.

Alberga la voz protocolo acepciones varias. La cuarta de ellas, siguiendo al DRAE, define esta palabra como ”secuencia detallada de un proceso de actuación científica, técnica, médica, etc.”. Al parecer, todo protocolo supone una garantía para evitar decisiones improvisadas en los distintos ámbitos y tranquilizar, de paso, a los destinatarios de la actuación, que pueden ser los miembros de un colectivo concreto o, en algunos casos, toda la población.

Si algo nos va quedando claro, es la enorme complicación de la cual formamos parte activa. El cielo nos plantea retos de altura si queremos ser consecuentes y la materia resulta muy superficial, la mayor parte es indetectable en el Universo como materia oscura. Las energías y las condensaciones nos traen de cabeza, hasta el punto de que avanzamos sin avanzar, de ver sin ver, o muchas situaciones similares.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto