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El CICR confirma que el almacén afectado contenía alimentos y aceite para su respuesta humanitaria
MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
Los bomberos de Líbano han logrado extinguir a última hora de este jueves un aparatoso incendio declarado en uno de los almacenes del puerto de Beirut, que quedó prácticamente arrasado a raíz de las explosiones del pasado 4 de agosto, sin que por el momento haya informaciones sobre víctimas mortales.
Según informan los medios locales, el siniestro se ha producido en un almacén de neumáticos, que también contenía otros materiales, de la zona franca del puerto, el principal del país. Este martes, ya se había producido otro incendio entre los escombros del puerto, pero fue controlado con rapidez.
En declaraciones a la cadena LBCI, el director interino del puerto, Basem al Kaisi, ha indicado que el incendio ha comenzado en "unos bidones de aceite antes de propagarse a los neumáticos". "Todavía es demasiado pronto para saber si ha sido como resultado del calor o de un error", ha añadido.
Por su parte, el director regional del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Fabrizio Carboni, ha detallado a través de su cuenta en la red social Twitter que el almacén incendiado contenía "miles de paquetes de comida y 500.000 litros de aceite".
"La extensión de los daños aún no ha sido establecida", ha señalado Carboni en su mensaje, en el que ha advertido de que las operaciones humanitarias del CUCR "están en riesgo de verse gravemente afectadas" por las consecuencias de este incendio.
En respuesta al incendio, la ministra de Justicia en funciones, Marie-Claude Najm, y el fiscal general, Ghasán Ueidat, han ordenado la apertura de una investigación sobre el incidente.
El Ministerio de Justicia ha resaltado que ha pedido a Ueidat una "investigación instantánea y exhaustiva a la vista de lo delicado y grave del incidente", según ha recogido el portal libanés de noticias Naharnet.
El presidente del país, Michel Aoun, ha convocado además una reunión del Alto Consejo de Defensa para discutir la situación, según la agencia estatal libanesa de noticias, NNA. Tras la misma, no ha descartado que se haya tratado de un acto deliberado.
El mandatario ha indicado que el incendio "podría ser un acto de sabotaje o resultado de un error o una negligencia", por lo que ha pedido que las investigaciones aclaren lo sucedido. Por otra parte, ha tildado de "inadmisible" que se hubiera cometido un error que hubiera provocado el incendio, después de las explosiones del 4 de agosto en la zona.
El incendio tiene lugar en medio de las investigaciones en torno a las explosiones, que se saldaron con cerca de 200 muertos y más de 8.000 heridos. El suceso ha sido achacado inicialmente a la explosión de 2.750 toneladas de nitrato de amonio que había en un almacén sin medidas de seguridad.
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