 |
|
MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
Los sindicatos CC.OO, UGT y USO han pedido al Gobierno que comience a negociar un pacto de Estado industrial a largo plazo, de al menos ocho legislaturas, para que España deje de ser un país de servicios.
"Antes de hablar de las emisiones en 2050 hay que preguntarse qué país queremos y cómo queremos cambiarlo", ha manifestado el secretario general de la Federación de Industria de CCOO, Agustín Martín, que ha participado en la 1ª Jornada Anual de Buenas Prácticas en Automoción, celebrada este miércoles, a la que también han asistido el secretario sectorial de la Industria Automovilística de UGT, Jordi Carmona, y el secretario general de la federación de industria estatal de USO, Pedro Ayllón.
Así, Martín ha pedido un plan hasta 2050, o de ocho legislaturas completas, para que se analicen y se busquen soluciones a algunos de los problemas a los que la industria se enfrenta en nuestro país, como puede ser el modelo energético.
"Esto no es una pelea entre industrialistas y ambientalistas, lo que estamos es eligiendo entre un país que viva del turismo y la especulación inmobiliaria o con industria que crea riqueza", ha manifestado, el secretario de CCOO, que ha instado a establecer un modelo productivo en España y a realizar "pedagogía industrial" para vender a la población las bondades del sector.
Asimismo, refiriéndose al sector automovilístico en particular, ha lamentado que ya no exista ningún fabricante español que no esté integrado en una matriz extranjera, algo que hará más difícil negociar para traer nuevos modelos eléctricos e híbridos a España, como ya se tuvo que "ceder a las presiones" de grupos empresariales extranjeros recortando derechos laborales.
Estas presiones, ha explicado Martín, se deben también a los "monocultivos industriales" de España en los que una empresa acapara buena parte del empleo de una región, como es el caso de Opel en Zaragoza o Navantia en la bahía de Cádiz.
MENOS MANO DE OBRA Y MENOS COCHES
Por otro lado, el representante de Comisiones se ha mostrado escéptico con la idea de que el cambio a la movilidad eléctrica creará más empleos de los que destruye, y ha explicado que cada coche actual cuenta con 2.500 componentes, mientras que un coche eléctrico tiene menos de 400. "Habrá exceso de capacidad productiva", ha afirmado.
En la misma línea se ha mostrado su compañero de USO, que ha abogado por no "criminalizar" el diesel en un país que es el primer productor de vehículos industriales (el 80% lleva este tipo de motores) del mundo, y ha asegurado que si en España la contaminación en las ciudades supera los mínimos exigidos por Europa es por la antigüedad del parque automovilístico.
Algo similar a lo que ha defendido el representante de UGT, que ha instado a que no se pierda la perspectiva del empleo y ha criticado los objetivos de emisiones de dióxido de carbono (CO2) para los próximos años, que ha calificado de "barbaridad". Por esto, ha pedido al Ministerio de Industria que "sean comedidos porque podrían tener mucho efecto en España".
Además, ha añadido al problema de la reducción de la necesidad de mano de obra del vehículo eléctrico el de la progresiva digitalización y robotización, así como el del uso de vehículos compartidos y las restricciones en las ciudades. "Son menos coches y menos mano de obra por coche, por lo que el problema al final va a ser de empleo", ha lamentado.
Para solucionar esto, ha abogado por buscar medidas "antes del impacto", formando a los trabajadores en las tecnologías del futuro para que estén preparados para unirse al mundo laboral en los nuevos empleos que se generen en la nueva industria del coche eléctrico
|
