El Real Madrid conquistó la primera Supercopa de su historia tras imponerse al Barcelona Regal (84-95), en un encuentro en el que los de Pablo Laso hicieron valer su mejor forma física y el mayor acierto de sus hombres de perímetro ante un conjunto culé que mostró buenas maneras, pero al que le faltó oxígeno en los minutos finales.

El Real Madrid conquistó la primera Supercopa de su historia después de imponerse por físico y acierto exterior a un Barcelona (84-95) al que le faltó oxígeno especialmente en la segunda mitad, en un partido en el que destacó la aportación de Rudy Fernández, MVP del torneo, y autor de 22 puntos.

Rudy Fernández demostró que regresa a la competición española con la intención de convertirse en una referencia para los madridistas, tras presentar una estadística de 22 puntos y 5 rebotes que le sirvieron para convertirse en 'MVP' del torneo. Por parte de los azulgrana destacó el '5' australiano Nathan Jawai que evidenció un claro dominio en la 'pintura' firmando 20 tantos.

Rudy empezó muy 'enchufado' por los blancos con dos triples consecutivos, mientras que el Barcelona respondió utilizando su juego interior y provocando faltas en la zona madridista que obligaron a Pablo Laso a sustituir a Slaughter, su apuesta de salida, por la acumulación de faltas.

El Real Madrid consiguió una pequeña ventaja de seis puntos gracias a su línea exterior (9-15, min 7), pero no terminó de irse en el marcador por la efectividad de los pívots del conjunto azulgrana. El primer cuarto finalizó con una exhibición ofensiva de ambos equipos y un gran acierto del Real Madrid desde el triple (23-30).

El partido continuó discurriendo por un ritmo que favorecía a los blancos y a un Sergio Rodríguez que se encontraba muy cómodo. Jawai se convirtió en la mejor arma del Barcelona, haciendo gala de su impresionante físico. La fuerza del 'aussie' no intimidó al Real Madrid, que alcanzó su máxima ventaja mediado el segundo cuarto (29-40, min 15).

Un triple de Lorbek y tres canastas de Ingles volvieron a acercar al Barcelona, que intensificó en gran medida su defensa hasta llegar con un marcador apretado al descanso (43-44). Sin embargo, las sensaciones eran de color merengue.

La segunda parte se inició con un parcial de 10-0 para el Real Madrid que supo utilizar la velocidad que Rudy y Slaughter imprimieron a su juego (48-58, min 26). El marcador volvió a ajustarse gracias a la intensidad de los azulgrana y a un Jawai que seguía siendo una pesadilla para la pintura blanca.

Un oportuno robo de balón de Rudy Fernández que el balear convirtió en canasta volvió a dar nueve puntos de ventaja a los de Laso al finalizar el tercer parcial (56-65). El Real Madrid, capitaneado por Carroll y Rudy, consiguió su mayor ventaja del partido a seis minutos del final (62-81). En los últimos compases, el Barcelona acusó el cansancio y los blancos zanjaron el partido --y el único título que le faltaba-- con comodidad (84-95).