Cuando uno se sumerge en Internet ya sabe que va a encontrar todo tipo de materias excrementicias mezcladas con sublimes verdades marginales (la verdad jamás se reflejará en los mass-media), delirios de todo tipo de iluminados y hasta desinformación a manos llenas. No hay otro remedio que hacerlo, sin embargo, porque las televisiones y los diarios de gran tirada pertenecen íntegramente a los dueños del sistema, los especuladores y las sectas secretas o discretas que sirven al señor de este mundo, por lo que se le hace imprescindible al buscador de información veraz tener una alta capacidad de separar la paja del trigo y lo que es malo de lo que no lo es. Una tarea tan ardua como complicada, y tanto más sabiendo que aquellos poderosos que controlan la in-formación no van a permitir que ciertas verdades lleguen al dominio público, subvertiéndoles los planes.

Tal es el caso de la información que llena incontables páginas en estos días sobre un inminente golpe de Estado en España. Por una parte, a modo de filtración se han colado algunas in-formaciones acerca de una afirmación o confidencia que le hace Durao Barroso a un pretendido hombre de confianza, en el que le asegura que, si se consolidan y masifican las protestas contra las reformas impuestas por el NO en España, Portugal y Grecia, está prevista la ejecución de sendos golpes de Estado que sometan a las poblaciones a la debida obediencia. Por otra parte, se especula que el gobierno está urdiendo una maniobra de falsa bandera del tipo 23F, usando a la Guardia Civil y a la Policía, un poco al modo y manera de aquel ya famoso golpe de Primo de Rivera que fue reverdecido hasta en las comas en el 81 por Tejero y otros que mordieron el anzuelo. La cuestión pertinente, claro, es si esto es posible que se verifique o si es una artimaña de in-formación (palabra que significa, para quien no lo sabe, des-información) para meter el canguelo en el cuerpo del personal protestón, especialmente por cuanto este rumor se dispara después de que se ha sabido que algunos estamentos estatales recibieron órdenes de confeccionar listas negras, filmar a los protestones e indignados más relevantes (presumiblemente para hacer una oportuna limpieza, llegado el caso) y que se están preparando a ciertas unidades de Ejército para contener protestas populares masivas que pudieran hacer ingobernable el país.

Analizando la in-formación, que apesta por sí misma, bien pudiera encerrar alguna parte de verdad en incierta proporción. Los Cuerpos mencionados, como avisan sus propios sindicatos, están infiltrados por confidentes del gobierno, por lo que sería posible que hábilmente empujados les condujeran a un despropósito semejante. Lo de la intervención europea en plan golpista, en fin, ya hemos visto que por lo de Italia y Grecia no es algo descabellado, por más que ambos casos les hayan investido a los gobernos títere de cierta legalidad al ser respaldados por los respectivos parlamentos, cosa que en realidad no tiene valor, toda vez que quienes ocupan los parlamentos son los mismos servidores del sistema, y que queda de manifiesto, por el desarrollo de los acontecimientos en toda Europa, que democracia es el nombre contemporáneo que se le da a la dictadura. Por último, hay que considerar que el papel de freno y contención que han tenido hasta el presente los partidos políticos y sindicatos españoles ha perdido toda su vigencia, y que ya incluso al más lego de los ciudadanos no les pasa desapercibido que todo esto es un teatro en el que los actores son actores y nada más, y, por lo tanto, intérpretes de la obra que se representan. Así, son indistinguibles por sus actos –repito, actos y no palabras- partidos como PP, PSOE e CiU –todos quieren lo mismo y abogan por lo mismo, consiguiendo idénticos resultados: pérdida de derechos y sometimiento contributivo de la población de base, mientras favorecen la corrupción, el derroche y la pérdida de soberanía-, entretanto los sindicatos arengan con amenazas sin chicha ni limoná prometiendo manifestaciones de mucho cartelito americanoide para septiembre u octubre, no han dicho de qué año, fechas en las que las tales manifestaciones no tendrán ningún sentido y, naturalmente, después de haber salvado la temporada de turismo tanto para el gobierno como para los empresarios de mucha mordida.

Recortes y atracos legales –muy sensibles, eso sí, según berrea el infame PP- como los que se están sucediendo sin colmo ni tasa que, unidos a las aseveraciones de juristas y tribunales de que las promesas electorales no suponen un contrato de los partidos con los electores –o, lo que vale lo mismo, que pueden estafar y mentir a destajo, que hay barra libre y se pueden convertir gratis en dictadores durante cuatro añitos-, han supuesto la exacerbación de los ánimos del pueblo en general representado en sus clases medias y bajas, a los que no son ajenos ni insensibles los Cuerpos de Seguridad del Estado –ciudadanos de clases medias y bajas, al fin y al cabo-, con la excepción de los antidisturbios, e incluso de los sindicatos militares. Una situación ésta, técnicamente de golpe de Estado por cuanto están cediendo soberanía nacional a potencias extranjeras –no cesan de repetirlo todos los parlamentarios- que muy bien pudieran suponer la necesidad de la aplicación del Art. 8 de la Constitución, pudiéndosele pedir al Ejército que garantice la soberanía nacional conforme al mandato que tiene asignado. Sin embargo, y pese a todo lo positivo que pudiera tener esto, no olvidemos que se trata de un Ejército Profesional, y que, por lo tanto, no tienen el arraigo popular que pudieran tener la milicias, las cuales previsiblemente jamás se movilizarían en masa contra el pueblo, como bien patente quedó en el 23F. Este Ejército, operando bajo la bandera de España, no es tan seguro, al menos de partida, especialmente por cuanto se le dio esta configuración después de aquel evento en el que muchos oficiales, suboficiales y tropas llegaron a encastillarse en sus acuartelamientos para evitar oprimir al pueblo. No es que dude de él a priori, sino que hay que tomar ciertas cautelas, por si acaso, que en esto está por demostrar de qué lado está, si del de los ciudadanos o si del de quienes les pagan. El más allá de la ideología y el más acá de la pasta, en fin. Además, en las últimas guerras ajenas a los intereses españoles en que han combatido por esos mundos de Dios, han tenido ocasión de prepararse para confrontaciones urbanas o de rebeldía popular. En conclusión, que un poquitín de prevención –que me sepan disculpar los fieles a los principios que se les infiere-, no viene nada mal.

¿Es posible pues un golpe de Estado o una maniobra que lo parezca para calmar los ánimos y dejar bien patente que es mejor una cosa mala que otra muchísimo peor?... Bueno, descabellado no lo es, desde luego, y tanto más sabiendo la clase política y banquero-especulativa, además de todo el chorizamen de corruptos en general, que esto no se va a detener así como así hasta que no se les siente en los banquillos de los acusados a todos y paguen por los daños que han hecho, restituyendo hasta el último céntimo de lo robado. Así las cosas, y poniéndose ustedes en su lugar y sabiendo que tienen el poder de tomar medidas semejantes, ¿qué harían?...

Los hay que creen que esta crisis es real (nadie dijo nunca de forma creíble producida por qué), y están en su perfecto derecho de creer que los pájaros maman y las vacas vuelan, faltaría más. Pero deberían considerar que pueda ser que no, que todo esto sea una movida organizada y planificada para establecer un NO, como lo evidencia ese video que circula por Internet en que el propio Presidente Medvéded (¡¡en 2009!!) presentaba a los periodistas tras la reunión el G8 de L´Aquila (Italia) la nueva moneda mundial, la cual ostentaba la leyenda “Unidos en la diversidad”, misma que decidieron como distintivo los miembros del Club de Roma en los años 50´ cuando configuraron el embrión de lo que con el tiempo sería la UE. O pueden considerar los videos que se están difundiendo sobre las afirmaciones que hacen algunos analistas en cadenas tan poco sospechosas de antisistema como CNN o FOX, en los que afirman: “Cuando decían algunos conspiranoicos que todo esto de la crisis estaba planificado, les llamamos locos; pero lo cierto es que todo ello se está cumpliendo tal y como lo advirtieron.” Saque sus propias conclusiones usted mismo, y, en base a esto, considere si eventualidades como las algaradas sociales que producirían las medidas y recortes que implantan los gobiernos para justificar el gobierno mundial y la unificación financiera estarían contempladas o no en esos planes y qué contramedidas aplicarían cuando éstas llegaran. Echen un vistazo a “Sangre Azul (El Club)” en mi web -es gratis-, y si no quieren leerse la novela entera, echen un vistazo a la Introducción y al Primer Capítulo que publico en esa misma web por separado (http://www.angelruizcediel.es), porque cuando menos es ilustrativo; descabellado, sí, pero ilustrativo.