El Sonar se convierte en el mejor escaparate de rarezas para escuchar y bailar. No sólo por los asistentes, que también los hay de toda fauna y flora, sino porque por suerte, el festival se preocupa por traer una auténtica vanguardia de sonidos y experiencias para deleitar oídos ávidos de algo diferente o esnobismos baratos de hora del café.

El jueves 14 de junio empieza la 19º edición del Festival con algunos grupos más que interesantes. En el Sonar Village estará bien temprano Thundercat y un rato más tarde, Flying Lotus. Ambos grupos se conocen bien entre sí, hacen colaboraciones y pertenecen a la misma discográfica, Brainfeeder. En el mismo escenario, una de las revelaciones del año, Totally Enormous Extinct Dinosaurs. No puedo aventurarme a decir de qué ira vestido en esta ocasión Orlando Higginbottom o si no se disfrazará de nada para alejarse de la tradición, pero sí puedo decir que su genuina música ha congregado a muchos incondicionales y por ello debemos verlo en directo, a ver cómo se mueve.

También estaré el interesante espectáculo que trae desde Los Ángeles el rey del Monome, Daedelus, con su espectáculo Daedelus Archimedes Show. Una de las primeras coincidencias del festival y un dilema moral: ¿espectáculo musical- visual o una buena ración de jazz bailable difícil de encontrar? Lo que no se solapa con nada y me tiene encantada, con el nombre y su sonido, es Eltron John. Los polacos saben como moverme la glotis con su electrónica elegante y bailable.

Y como la vida es bailar, el viernes continuaremos haciéndolo. Si no has visto aún a John Talabot, la gran revelación española del momento, lo puedes hacer en el Sonar de día en el Sonar Hall para terminar la tarde o empezar la noche. Porque lo que sigue en el Sonar nocturno es para no parar hasta conectar con seres del más allá: Richie Hawtin, Squarepusher, James Blake DJ, Friendly Fires, Fatboy Slim, Nicolas Jaar y Simian Mobile Disco. Eso sí, ni en ese orden ni en el mismo escenario. Vuelven las coincidencias fatídicas y las decisiones corrosivas. También será la noche de Lana del Rey, que aunque coincida con Nicolas Jaar, muchos lo tendrán claro y no querrán perderse al proclamado mejor producto del año.

El sábado le toca el turno a otros de los más deseados. New Order llegará al Sonar Club para mostrarnos que aún saben hacerlo y Die Antwoord vuelve este año para petarlo de nuevo. El año pasado molaron tanto, que el festival no ha dudado en volverlos a traer con su nuevo disco para que la vuelvan a liar. Deadmau5, The Roots, Hot Chip y Laurent Garnier serán otros de los grandes imprescindibles del sábado por la noche. Pero mis indispensables vienen de la mano del sello Hyperdub con su showcase. Steve Goodman, creador del sello y de Kode9, trae el dubstep más letal y ácido para darle cierre al festival en el Sonar Lab a las 4:00 y dejarnos saciados hasta el año que viene.