El técnico del Racing Álvaro Cervera no podrá guiar a su equipo esta tarde en El Madrigal debido a una leve taquicardia que le obligó el viernes a ingresar en el hospital universitario Marqués de Valdecilla de Santander.

Pese a que no se ha encontrado nada excesivamente preocupante en su estado de salud, Cervera deberá aguardar internado en dicho hospital hasta el conocimiento de nuevas pruebas que le sarán realizadas durante el día de mañana. Fede Castaño, segundo de abordo, será el encargado de intentar sacar algo positivo en el incómodo duelo frente el Villarreal. No puede presumir de fortuna tampoco el equipo levantino en lo que a problemas físicos se refiere.

La tan esperada vuelta del estandarte del equipo Giuseppe Rossi, lamentablemente para el Villarreal pero mucho más en especial para el italoamericano, tendrá que posponerse como mínimo seis meses más después de su ya consabida recaída el viernes en la sesión preparatoria vespertina.

Estaba previsto que Rossi se estrenara en 2012 saltando al recio césped septentrional de Anoeta la contigua semana. Su recuperación hubiera sido para el Submarino el colofón precisado en una temporada fatídica, junto a la codiciada salvación por la que ha tenido que luchar ante todo pronóstico desde inicio de campaña. Fuertes en casa Una salvación que parece muchísimo más hacedera de tres días a esta parte después que todo “submarinista” rematara unánimemente el zurdazo que Hernán Pérez orientó rumbo a la permanencia en el último segundo de partido. ¡Bravo Villarreal! Pese a tu torcida campaña, ni Madrid, ni Barça, ni Valencia, ni Málaga han conseguido arrancar los tres puntos de tu acorazado feudo, que sólo te ha visto pinchar dos veces en competición doméstica. Miguel Ángel Lotina prefiere moverse con los pies pegados al suelo y ha asegurado que el partido contra el Racing se presenta como una nueva final, en la que Nilmar participará desde inicio como artillero después que Marco Ruben cause baja por lesión. Mario tampoco llega al envite, mientras que Ángel regresa tras cumplir uno de sanción y Joselu entra en la convocatoria en detrimento del malparado delantero argentino.

Otra semana más, De Guzman y Wakaso se quedan fuera por decisión técnica. Para olvidar Estas dos palabras son uno de los muchos calificativos con los que abreviar la temporada realizada por el Racing de Santander. Porque si se analiza por extensión, tendríamos que matizar una realidad que se asienta en 1 único punto de los últimos 7 encuentros (dicho así se suaviza la tragedia), encaja una media de 3 goles por partido, en 2 meses tan sólo ha conseguido anotar 2 tantos y lleva sin ganar la peor racha de la historia del club con 14 partidos consecutivos.

 Parece que sólo un milagro podría hacerse cargo de la dicha del Racing, anclado en la cola de clasificación a 10 puntos de la salvación con 6 jornadas por delante. Es la única teoría que sostiene una brizna de razón, puesto que no da la impresión de que esta situación pueda arreglarse humanamente como dan fe de ello sus últimas intervenciones. En la última jornada frente el Mallorca, iba por detrás en el marcador trascurridos 21 segundos, mientras que hace siete días frente el Málaga, al minuto y medio se encontraba en inferioridad numérica y con un penalti en contra. Tampoco están de su lado los antecedentes en El Madrigal. De las 11 veces que ha visitado el feudo amarillo, tan sólo en dos ha logrado llevarse los tres puntos de vuelta a la costa de El Sardinero.

Es difícil vaticinar el once inicial con el que el Racing buscará hacer sonar la campana frente el Villarreal, puesto que jornada tras jornada se trastocan como unos seis titulares, amén de la estrategia y la forma de juego. Junto a las ausencias de Toño y José picón, Aranda y Kenedy engordan la lista de bajas por lesión al sufrir ambos molestias en sus respectivas piernas derechas. La nota sonante la entonan Mario Fernández y Acosta, quien vuelve a una convocatoria después de atravesar un largo proceso de recuperación.