Importante victoria la conseguida por el Gescrap Bizkaia ante el Unicaja en un partido vibrante (85-70). Tras un choque muy igualado, los bilbaínos salieron como una apisonadora en el último cuarto en el que cosieron a triples a los malagueños. Los andaluces se veían incapaces de frenar a los locales y la falta de rotaciones empezaba a hacer mella en ellos. Con esta victoria los de Katsikaris, junto con la derrota del Real Madrid, se ponen segundos en la clasificación del grupo mientras que el Unicaja aún no conoce la victoria en el Top 16.

Arrancaba el encuentro con una canasta de Jackson, pero no tardaba en llegar la respuesta de los malagueños que con dos canastas de Fitch se adelantaban en el marcador. Le costaba al Gescrap Bizkaia meterse en el partido y el Unicaja aprovechaba la ocasión para ir sumando puntos. Garbajosa anotaba un triple y todo parecía indicar que los andaluces se iban a ir en el luminoso (6-11).

Pero la reacción de los locales no se hacía esperar, con un ritmo de juego más intenso a falta de dos minutos para terminar el cuarto una canasta de Vasileiadis ponía a los suyos por delante. Vasileiadis y Mumbrú tiraban del carro para llegar al final del cuarto cinco puntos arriba de los andaluces (22-17).

El segundo cuarto empezaba con bastantes imprecisiones en ataque por parte de los dos equipos. Flojos en defensa y sin ideas en ataque en 5 minutos del cuarto los equipos firmaban un pobre parcial de 5-6. Y entonces apareció Freeland. El pívot se echaba el equipo a la espalda y los malagueños lograban empatar el partido (34-34).

Tras un tiempo muerto de Chus Mateo, sus pupilos no eran capaces de aprovechar los últimos segundos y Jackson aparecía para anotar y romper las tablas del marcador. 36-34 en el luminoso que dejaba el partido muy igualado y totalmente abierto para la segunda mitad.

Tras la salida de vestuarios Mumbrú abría la lata con una bandeja, y poco más hacían los bilbaínos en los primeros compases de este cuarto. Reaccionaba el Unicaja, acertado en ataque de la mano de Freeland que campaba a sus anchas y los locales perdían concentración con una defensa descolocada. Freeland revolucionaba el juego y los andaluces le endosaban un parcial de 0-8 a los bilbaínos (38-42).

Pero los vascos también querían entrar en la guerra de los parciales y un triple de Mumbrú firmaba un parcial de 6-0 para los locales. Una controvertida antideportiva pitada a Vasileiadis ponía en pie a Miribilla y rompía el parcial de los bilbaínos. Empezaban entonces un toma y daca por parte de los dos equipos hasta que Mumbrú, muy acertado durante el partido, iba aumentando diferencias. Raúl López anotaba sus tiros libres en el último segundo y dejaba el luminoso 58-52, con todo por decidir para el último cuarto.

Los diez minutos finales arrancaban con un Bilbao Basket muy enchufado y con un Unicaja tocado por la falta de fuerzas y por las escasas rotaciones. Un triple de Mumbrú daba el pistoletazo de salida a un cuarto brillante para los de Katsikaris. Primero Raúl López y luego Hervelle firmaban otras dos canastas desde la línea de tres que hacían enloquecer a Miribilla. Intentaban pelear los de Chus Mateo pero las fuerzas no acompañaban y los locales continuaban con su recital de triples.

Raúl quería repetir y nuevo tiro de la línea de tres para los de Katsikaris que lograban una diferencia de 20 puntos en los cinco primeros minutos del cuarto (76-56). Los malagueños ponían toda su alma en la cancha para intentar parar la sangría pero las ganas no eran suficientes para frenar la racha anotadora de los locales. Fitch intentaba acortar distancias pero resultaba imposible la remontada que llegaba demasiado tarde.

Con todo decidió Katsikaris daba salida a Hampl, que recibía la ovación de Miribilla, para que se despidiera de la afición. Y el cuarto terminaba como empezaba, con un triple del Bilbao Basket, Vasileiadis ponía con un tiro desde la línea de tres el punto y final a un partido vibrante (85-70).