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El FC Barcelona ha confirmado que el delantero asturiano David Villa sufre una fractura en la tibia de su pierna izquierda fruto de un mal apoyo en una ocasión del encuentro que los blaugranas juegan este jueves ante el Al Sadd, correspondiente a la semifinal del Mundial de Clubes.
Villa ha sido trasladado al hospital para ser sometido a más pruebas y ver el alcance de la lesión, pues la fractura podría ser total o parcial y de ello dependerá el tiempo de baja. No obstante, todo apunta a que el "Guaje" estará mucho tiempo fuera de los terrenos de juego.
En el momento de la lesión, él mismo hizo un gesto de dolor y rabia y pidió el cambio, confirmado por el doctor Pruna nada más llegar al asturiano, tendido en el suelo.
La gabarra "Athletic" está feliz, puesto que por fin verá finalizada su inactividad de tanto tiempo. Todo ello porque los bilbaínos pusieron fin a su maldición de cuarenta años sin ser campeones de la Copa del Rey, con seis finales perdidas, cinco en los últimos 15 años. El equipo de Valverde debió esperar a la tanda de penaltis para vencer a un combativo Mallorca y alcanzar la gloria, pero esta Copa, "su" Copa más deseada, por fin podrá lucirla ante su gente por la ría de Bilbao.
Una Copa para el Madrid, la 20ª de su historia; una Copa para Rodrygo Goes, MVP y autor de los dos goles que vuelven a dar el título copero a los blancos, nueve años después de aquel recordado triunfo en Mestalla frente al Barça. Y, a la vez, un subcampeonato, el segundo de su historia, con honores de campeón para Osasuna.
El Real Betis Balompié es el campeón de la Copa del Rey. El equipo verdiblanco, en su ciudad, delante de su gente que lo sigue sin rechistar, ha salido victorioso por tercera vez después de una nueva final épica, como todas las que disputa, y en la que un rival tan sumamente digno como el Valencia y que ha merecido la Copa tanto como él solo ha claudicado en la cruel tanda de penaltis.
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