Como he ido comentando en diversos foros y momentos desde que las elecciones generales que acabamos de pasar fueron convocadas, me parecía que esta campaña electoral era una oportunidad interesantísima para continuar con el proceso de evolución de la sociedad que se catalizó el 15 de Mayo. La idea era aprovechar la receptividad de todos los electores (35.7 millones) a mensajes de que hacer con respecto a quien iba a formar el gobierno durante los siguientes 4 años, y proponerles que se aproximaran a las urnas con un planteamiento crítico. Hacia los partidos y también hacia los políticos. Y por supuesto también hacia el sistema electoral.

Los mensajes fueron variados, incluso contradictorios, pero lo que se podrían resumir las distintas propuestas en lo siguiente:

    * Rechaza el bipartidismo: vota a partidos pequeños, que puedan sacar representación parlamentaria
    * No te abstengas o votes  blanco: vota nulo.
    * No creas al sistema, no sirve: abstente

Los antecedentes que teníamos para medir los resultados, eran dos: Las municipales 2011 y las Generales 2008. Las municipales porque eran las primeras que había habidos después del estallido del clamor social de rechazo, y las generales anteriores porque en España cada tipo de elección suele tener una actitud muy distinta por parte del elector.

En la siguiente tabla se ve la variación con respecto al 2008:

Si sumamos la variación en los aspectos críticos propuestos a los electores, nos encontramos con que 3.749.585 de ellos han seguido alguna de las propuestas, lo que representa casi un 11% del electorado.
Por tanto podemos considerar que esta campaña electoral ha servido para dar un paso adelante desde un punto de vista de la movilización de la conciencia de los ciudadanos para un cambio profundo en nuestra sociedad y en la política.

Puesto que ese cambio social se ha de hacer día a día, generando un rumor creciente para que la sociedad y la política inclusivas, respetuosas y responsables sean un clamor mayoritario, se puede concluir que estamos en el buen camino, y a una velocidad de crucero muy alta. Los ciudadanos se han sumado por millones a esa actitud que empezó siendo minoritaria, y han pasado a usar cada oportunidad de decisión que tiene para demostrarlo. El 20N solo ha silo la última oportunidad que hemos visto, pero la lucha sigue.

Otros artículos que comentan los resultados 'a contrapelo' del gran titular que supone la mayoría absoluta del PP:

    * Análisis breve de los datos de hoy (los reales)
    * Elecciones 20N: Así quedaría el Parlamento si todos los votos valieran lo mismo
    * No es un cheque en blanco