Han pasado dos años para que Gonzalo Higuaín y Karin Benzema estén en plenitud de condiciones al mismo tiempo. Primero fue Benzema, al que muy pocos esperaban, y ahora el `Pipita´, recuperado de la lesión que le hizo perderse la mitad de la pasada temporada. Bendito problema para José Mourinho pensarán muchos. Dos de los mejores delanteros del mundo disponibles. Pero quizás haya que eliminar la palabra bendito, convirtiéndose en un problema real para el técnico portugués.
En una temporada tan larga siempre hay minutos para todos. Pero el caso del `9´ es complicado. El delantero necesita confianza para anotar goles, algo que se obtiene jugando, sintiéndote importante, siendo el primer espada del equipo. En un Real Madrid que juega únicamente con un delantero el debate está abierto: ¿Higuaín o Benzema?
Ahora Higuaín parece haber tomado la delantera con sus dos hat tricks consecutivos en Liga, tres si se suma el conseguido con Argentina, pero no hay que olvidar el gran papel del `Gato´ Benzema en este inicio de campaña, no solo como finalizador, que también, sino como un jugador de equipo que da juego a todo el frente de ataque del Madrid.
El problema lo tiene Mourinho. Él dice estar preparado para convivir con dos delanteros en forma, pero puede llegar un día en el que uno de ellos no acepte la suplencia. Y ese día puede no estar muy lejano. Por el bien del equipo ambos deben esperar su momento, y demostrar al entrenador que él debe ser el elegido. Ser profesionales, pero también compañeros, y alegrarse cuando el otro marca. Parece fácil decirlo, pero son innumerables las veces en que dos jugadores que pelean por un puesto, y si además son muy buenos, terminan como enemigos declarados. La batalla ha comenzado.
Pero claro, llegados hasta aquí, ¿quién debería ser el `9´ titular? Esta pregunta sería de fácil respuesta si se supiera a qué juega el Real Madrid. Pongamos dos situaciones bien claras: Si el conjunto blanco quiere jugar a la contra, el hombre debería ser Gonzalo Higuaín, por su capacidad para finalizar en contraataque, muy bueno con espacios y a un toque, y también porque es un tipo de juego que le viene mejor a sus condiciones técnicas, limitadas para crearse ocasiones en estático. Benzema sería la antítesis de Higuaín en este sentido; muy dotado técnicamente, capaz de generarse una ocasión de la nada, de hacer magia en una baldosa, de asociarse con sus compañeros y buscar el desmarque, y por qué no, para ver esa arrancada que recuerda tanto a la de Ronaldo Nazario. Juego propicio por si el Real Madrid se decide al fin a dominar los partidos con la pareja Xabi Alonso – Sahin en el mediocampo.
Los hándicap de cada uno también se vislumbran en el horizonte. Higuaín tiene que demostrar que es capaz de ser importante en los partidos importantes, viniéndonos a la cabeza la debacle en Champions contra el Olympique de Lyon. A Benzema le ha llegado la hora de no desaparecer, de dejar los destellos para convertirse en un jugador total. En definitiva, ambos, delanteros de primer nivel, están en su mejor momento pero solo puede jugar uno, salvo si… Si el Real Madrid se decantase por jugar con dos delanteros, algo muy poco habitual en el fútbol del siglo XXI.
La papeleta la tiene José Mourinho. Esto ya lo hizo con Eto´o en el Inter, al que echaba a una banda dejando a Milito en punto. En el Madrid parece más complicado porque tiene a Cristiano, a Di María, a Ozil y a Kaká, pero las probaturas en los partidos que se celebren en el Santiago Bernabéu no serían nada descabelladas para comprobar si estamos ante una asociación letal entre Higuaín y Benzema, los dos hombres que a día de hoy dividen a la afición madridista.