Adiós Gianluca.

No me voy a esconder. No hace falta. Gianluca Basile es uno de mis jugadores favoritos y mi visión no será la más objetiva posible. Pero lo cortés no quita lo valiente.

Se va uno de los ídolos del Palau Blaugrana. Y conseguir eso no es fácil. Sobre todo porque en sus dos primeros años las críticas superaron a los elogios. Pero el respetado culé supo ver en él algo más. Algo que otros jugadores no daban. Entrega, esfuerzo, lucha, instinto y no dejarse nada han sido la seña de identidad durante estos seis años (2005-2011) en que ha vestido la elástica azulgrana. Un jugador del que muchos creían que era un anotador nato. Pero nunca lo ha sido. Su definición más aproximada se podría acercar a: ‘jugador de rachas que te hace ganar un partido, pero que no te lo pierde'. Porque entraran o no los triples imposibles la defensa no se resentía. Al contrario. Si no entraban, la resignación en ataque se convertía en agresividad en defensa.

Basile se ha convertido en el jugador extranjero que más veces ha vestido la camiseta azulgrana. Un total de 206 veces. Superando a entrañables y grandes jugadores como Steve Trumbo, Norman Carmicheal, Bob Guyette y –aplausos- Audie Norris. En 2005, cuando aterrizó a Barcelona, Basile tenía un sueño. Ganar la Euroliga. Lo intentaba desde 1999 y no la consiguió hasta el 2010. Once años luchando por un sueño, conseguir el último gran título que se le resistía a nivel de clubes. Pero París le brindó la oportunidad. La misma ciudad de la luz que le dio el Eurobasket del 1999 con Italia. La capital francesa se cruzó de nuevo en su camino para bien. Nunca lo olvidará. Ahora, a sus 36 años, dice adiós a Barcelona. O quizás es un hasta luego. Tiene la intención de seguir jugando a su deporte amado en su país natal. Sabe que le quedan un par de años, pero no está seguro de si al máximo nivel después de pasar el último año en blanco por culpa de una doble fractura en el quinto metatarsiano del pie izquierdo.

"Me quedo con todo. No escogeré nada. También las cosas malas te hacen crecer. Seguro que la Euroliga y la primera ACB que ganamos las recordaré siempre, pero también las cosas malas te ayudan. Me quedo con todo, con cada segundo que llevo aquí", declaraba Basile en el sitio web del Barça. Y es que él solo necesitaba un segundo para dinamitar un partido, para asestar el golpe definitivo a un rival que no le esperaba. Como hizo hace dos temporadas en el Buesa Arena de Vitoria. Era el primer partido de la final y Basile anotó el triple decisivo a falta de dos segundos. El de la liberación. Sus únicos tres puntos del partido. El triple que a la postre valió una Liga.

El Barça le hará un homenaje. Se lo merece. No es para menos. 2 Ligas ACB, 3 Copas del Rey, 1 Euroliga como palmarés. Estar seis temporadas en un equipo de primer nivel no es fácil. Su mejor cualidad ha sido la adaptación al equipo. Talento y orden al servicio del entrenador y de sus compañeros. Para un servidor es un día triste. Para qué negarlo. Espero que tenga mucha allí donde vaya. Le seguiré. Le seguirá el público del Palau Blaugrana. Los aficionados, aunque no esté, seguirán cantando el “Perchè il Barça è forte, perchè il Barça è forte per te!”. Gracias, Gianluca. Ha sido un placer.