Alonso ya ve más cerca a los Red Bull (Agencias)
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Sebastian Vettel continúa su monólogo con una nueva victoria que lo distancia aún más en la clasificación del Mundial. La lucha entre el Ferrari de Fernando y los Red Bull es la noticia de la jornada. A pesar de que todavía no están a la altura, la escudería italiana ha recortado terreno y amenaza con repetir una remontada similar a la de la temporada anterior.
Una decena de segundos. Un mundo en Fórmula 1, pero una llama a la esperanza para la escudería del Cavallino, que ha podido luchar por primera vez en lo que va de año con los todopoderosos Red Bull.
En un Gran Premio marcado por las paradas en el box (hasta cuatro para las primeras espadas), el F150º del asturiano batalló hasta la última vuelta con un monoplaza mejorado, capaz de marcar un ritmo más parejo a los gigantes austríacos.
Lo de Vettel ha sido el paseo habitual, con una mancha roja que nunca llegó a molestarle en demasía gracias a la cobertura acertada de su compañero de garaje. Webber volvió a ser ese piloto de grandes finales, y con las gomas duras la distancia entre coches volvió a parecerse más a lo visto en anteriores carreras. El podio de todas formas, estaba asegurado.
Ojo a Felipe Massa, fuera de los puntos, lo cual crea sospechas sobre si es el coche o las manos que lo llevan los autores de esta remontada en prestaciones. Mala carrera para el resto de representantes españoles. Jaime, decimosexto, no pudo superar una salida desastrosa. Los Hispania, a su ritmo, han conseguido terminar cerrando el pelotón.
Hamilton cava el primer agujero
La carrera comenzó a definirse desde los primeros metros. Istanbul Park no perdona errores con el semáforo apagado. La diferencia entre zona limpia y sucia es de las más grandes del campeonato, y cualquier patinazo a destiempo puede arruinar la clasificación del día anterior. Webber sucumbió de inmediato ante la potencia del Mercedes de Rosberg, y su mal inicio a punto estuvo de ser aprovechado también por el MP4-26 de Lewis Hamilton.
El inglés, impulsivo como pocos, se pasó de frenada y complicó su GP al ser adelantado por Massa y su propio compañero de equipo. Alonso aguantó el tipo y comenzó a labrar sus aspiraciones de podio con un F150º que demostró haber mejorado sus prestaciones.
La lucha entre los dos McLaren era de época, siempre decantada a favor de Lewis, y el DRS reafirmó su efectividad (¡por fin un remedio que funciona!) para desgracia de Nico, que fue adelantado sin piedad primero por Webber y un poco más tarde por Fernando.
El garaje cobra protagonismo
Hasta cuatro veces pasarían por el box los principales favoritos. El ‘Plan B’ se convirtió en la opción de todas las grandes marcas, y solo Jenson Button se resistía a la visita con sus mecánicos.
Tras el segundo parón, algo se notaba diferente en la tabla de resultados. El Ferrari de Alonso no perdía fuelle, al contrario, comenzaba a marcar tiempos cada vez mejores y alcanzaba el rebufo de un sorprendido Webber. Lo que teníamos asimilado como ilusión utópica, por fin se hacía realidad. El DRS volvió a hacer de las suyas y el español dejó al RB7 sin pegatinas para colocarse en segunda plaza.
Lucha desigual… todavía
Al mismo tiempo que Hamilton veía como una mala parada arruinaba cualquier acercamiento al podio, Alonso comenzó a sentir el aliento de Mark Webber cada vez más cercano. Con las gomas duras, el australiano volaba, y no tardó en superar al asturiano y coger un par de segundos de margen.
Los Red Bull siguen en lo alto. Pero no están solos. Las mejoras en Ferrari y McLaren para Barcelona prometen ser notables, y con la esperanza de que la perfección de Red Bull no pueda ser mejorable, el campeonato podría volver a disfrutar con la competición más reñida en su regreso a España. Barcelona espera ya al ‘Circo’.