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Etiquetas | Fútbol / Primera División
El Espanyol empuja y empuja hasta conseguir la victoria en un precioso partido de fútbol ante el Athletic.

Espanyol - Athletic: Derroche de casta y orgullo para aferrarse al clavo ardiendo europeo (2-1)

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¿Quien decía que en España ya no se hablaba del balón y de todo lo que conlleva? Que se lo digan a las 23000 almas que disfrutaron de un espectáculo digno de una noche de las estrellas -indigno para un lunes-. Fútbol por doquier con tensión, polémica, brillantez y goles, sobre todo goles. Osvaldo adelantó a los suyos pero Iraola le empató. Alonso completó la machada tocando al final de la segunda parte.

Ficha técnica
2- RCD Espanyol: Kameni (1); Galán (3), Rodríguez (2), Amat (2), Chica (3); J.Márquez (2), Verdú (1); Alonso (3); Callejón (2), Luis García (1); Osvaldo (3).

1– Athletic de Bilbao: Iraizoz (1); Iraola(1), Ekiza (2), Amorebieta (1), Castillo (); J.Martínez (), Gurpegui (2), Muniain (1), Susaeta (3), Iturraspe (2); Toquero (1).

Cambios: En el Espanyol Luis García (1) por Isaías (min.75), Márquez (2) por Rui Fonte (min.76) y Verdú (1) por D.López (min.90), en el Athletic, Iturraspe (2) por Llorente (min.45), Toquero (1) por Orbaiz (min.57) y Muniain (1) por Ustaritz (min.65).

Goles:1-0 Osvaldo (min.34), 1-1 Susaeta (min.43), 2-1 Alonso (min.76).

Árbitro: Teixeira Vitienes (colegio cántabro) (2) En los locales amonestó con tarjeta amarilla a Verdú (41'), Callejón (45'), Rui Fonte (78'), . Mientras que en los visitantes amonestó a Iraola (52'), J.Martínez (85').

Incidencias: 23023 espectadores en el estadio Cornellá-El Prat. Terreno de juego en buenas condiciones.

Datos destacables
Lo mejor: Agarrarse al clavo ardiendo
Todo parecía perdido tras la debacle de la segunda vuelta. A cuatro puntos del Athletic, en mala racha contínua y sin una esperanza de depósito de fe real, el Espanyol se plantó en su estadio a aferrarse al clavo ardiendo de Europa. De momento, el clavo no se ha quemado. Veremos que pasa en el Camp Nou.

Lo peor: Nada
Nada fue malo ni sobró. un poquito de allí y unn poquito de allá, quizá un Athletic faltón y demasiado cauto, pero nada que reprochar a un partidazo en mayúsculas.

El dato: Desde la 97.
La playstation 1 hacía estragos entre la juventud cuando el Athletic ganó a domicilio al Espanyol, y hablamos ya desde 97-98.
Franc Mendiola / Barcelona

Dos bajas significativísimas en el once inicial vasco. Los pilares Orbaiz y Llorente, ambos por molestias, permanecerían en el banquillo, dando paso a Iturraspe y Gurpegui acompañando a Javi Martínez en la medular y secundando al todoterreno Toquero, ese delantero fondista que lleva el dos en la espalda. El Espanyol, por su parte, demostraba el talante real de su recién renovado entrenador dando el centro del campo a Márquez y Verdú. Garantía de toque, ofensividad y sobre todo valentía, algo de lo que adolece últimamente el fútbol por algunos lares.

Más entero y maduro entró el conjunto que dirige con buen tino Joaquín Caparrós, para la sorpresa del personal local. Obstinados en el pelotazo y el melón en largo para Alonso o Osvaldo, sólo una contra por banda derecha que Iraizoz le sacó magistralmente a Iván impidió que los blanquiazules se estrenasen e hicieran valer la supuesta injusticia futbolística vista sobre el tapete en el electrónico.

El desacierto mútuo prosiguió con su arduaa tarea de aborrecer a la mitad del feudo Cornellá congregado en un día santo para Satanás: los lunes de fútbol. Pero, como viene siendo habitual, alguien tenía que decir basta. Seguramente el mejor jugador tanto de unos como de otros. Osvaldo, pretendido hasta por la luna, recogió un intento de pase o despeje a metro pasado de la frontal para, zurdeado, enviar un disparo imposible y colocado en la arista de la base del palo izquierdo de Iraizoz. Fallo defensivo grave y los pericos que recobraban, a un cuarto de hora del descanso, una dosis de oxígeno considerable para lo visto hasta entonces.

Sin embargo, la recompensa era altísima para la apuesta ofrecida. Al poco del golito de Osvaldo, llegaría la réplica. Digo golito porque Susaeta, en comparación, la coló por toda la escuadra de falta directa, en contorno y a su palo opuesto al ser diestro. El empate, cien por cien justo por entonces, tendría que haberse visto desequilibrado por la última acción de la primera parte. Balón en profundidad para Alonso, que no llega pero a Gorka se le escapa, llegan a línea de fondo y el ex guardameta de la entidad barcelonesa comete claro penalti sobre el uruguayo. Claro aquí, en Madrid y en Sri Lanka. Quizá por el empuje de presión desmesurado del público, quizá por el linier, quien sabe si por su falta de vista o atención, pero se lo comió. Tremenda primera parte de emociones para un fútbol de ajustes desajustados y de errores no forzados.

Las descorazonadoras decisiones arbitrales, que no fueron tantas ni tan malas si obviamos el penalti, alumbraron el camino periquito en los instantes iniciales de la segunda mitad. Volcados al portal de un indeciso Gorka, las acometidas no cesaban en su empeño, aunque para encontrar un fruto jugoso se precisaba más paciencia de tres cuartos hacia arriba. Aun así, apareció. Tras el enésimo centro al área, Amat se encontró con una de esas que ni el mejor Ronaldo en sus mozos tiempos. Solo, con tres o cuatro segundos para pensar, actuar y marcar, osea, el transcurso lógico de las cosas. La paró, tomó fotografías a cámara lenta, se la recolocó a su pierna de palo y cuando quiso darse cuenta ya no había regalo, puesto que el arquero leonés se cubrió de gloria parándole el entuerto a bocajarro. Ante el vendaval de los de Pochettino, Caparrós decidió tapiar la cueva con el tercer central, Ustaritz, sacando del campo a un inadvertido Muniain.

Así hasta el minuto mágico. El 75. Buen año, por cierto. Un doble cambio previo a un saque de esquina enfervorizó, más para mal que para bien, a la ansiosa parroquia blanquiazul, que se veía al mismo tiempo capaz que incapaz de la victoria. Con dos juveniles de acné más en el césped, Isaías y Rui Fonte, la diosa fortuna, esa que no frecuenta el establecimiento blanquiazul, se apareció con el gol de Alonso en ese preciso instante, en ese precioso minuto, e hizo estallar de júbilo el acorazado Cornellá.

El partidazo de fútbol al que estábamos asistiendo se convirtió en un quiero y no puedo para el conjunto bilbaíno, en el que la solitaria estampa de Llorente no fue suficiente para llevar a buen puerto los balonazos de su defensa. Pobre imagen de los vascos y rebelión de adrenalina blanquiazul de cara a la hazaña en un estadio fácil: el Camp Nou.


Sala de prensa
Mauricio Pochettino (Entrenador del Espanyol)
”Este equipo siempre ha querido estar donde estamos, pero por circunstancias no hemos podido. Vamos a luchar y a dejarnos todo para intentar conseguir una plaza europea. Me siento orgullosos de todos mis jugadores, independientemente de tu edad. El partido ante el Barça será vibrante, apasionado, intenso, como todos, pasional. Siempre digo lo mismo, hay que agradecerle a la afición todo lo que hace.”
Caparrós (Entrenador del Athletic)

”Aquí no vale si el resultado es justo o no. Cuando más metidos estábamos, nos han metido tanto el primero como el segundo. Pero realmente no hemos estado a gusto. Si el Espanyol está ahí es por algo, y me ha parecido que tiene una línea muy buena, nadie les ha regalado nada. El resultado sólo influirá al final, cuando acabe el campeonato se verá si influye o no. Hemos tenido varios problemillas con Iker y Fernando".


Espanyol - Athletic: Derroche de casta y orgullo para aferrarse al clavo ardiendo europeo (2-1)

El Espanyol empuja y empuja hasta conseguir la victoria en un precioso partido de fútbol ante el Athletic.
Franc Mendiola
lunes, 2 de mayo de 2011, 20:52 h (CET)
¿Quien decía que en España ya no se hablaba del balón y de todo lo que conlleva? Que se lo digan a las 23000 almas que disfrutaron de un espectáculo digno de una noche de las estrellas -indigno para un lunes-. Fútbol por doquier con tensión, polémica, brillantez y goles, sobre todo goles. Osvaldo adelantó a los suyos pero Iraola le empató. Alonso completó la machada tocando al final de la segunda parte.

Ficha técnica
2- RCD Espanyol: Kameni (1); Galán (3), Rodríguez (2), Amat (2), Chica (3); J.Márquez (2), Verdú (1); Alonso (3); Callejón (2), Luis García (1); Osvaldo (3).

1– Athletic de Bilbao: Iraizoz (1); Iraola(1), Ekiza (2), Amorebieta (1), Castillo (); J.Martínez (), Gurpegui (2), Muniain (1), Susaeta (3), Iturraspe (2); Toquero (1).

Cambios: En el Espanyol Luis García (1) por Isaías (min.75), Márquez (2) por Rui Fonte (min.76) y Verdú (1) por D.López (min.90), en el Athletic, Iturraspe (2) por Llorente (min.45), Toquero (1) por Orbaiz (min.57) y Muniain (1) por Ustaritz (min.65).

Goles:1-0 Osvaldo (min.34), 1-1 Susaeta (min.43), 2-1 Alonso (min.76).

Árbitro: Teixeira Vitienes (colegio cántabro) (2) En los locales amonestó con tarjeta amarilla a Verdú (41'), Callejón (45'), Rui Fonte (78'), . Mientras que en los visitantes amonestó a Iraola (52'), J.Martínez (85').

Incidencias: 23023 espectadores en el estadio Cornellá-El Prat. Terreno de juego en buenas condiciones.

Datos destacables
Lo mejor: Agarrarse al clavo ardiendo
Todo parecía perdido tras la debacle de la segunda vuelta. A cuatro puntos del Athletic, en mala racha contínua y sin una esperanza de depósito de fe real, el Espanyol se plantó en su estadio a aferrarse al clavo ardiendo de Europa. De momento, el clavo no se ha quemado. Veremos que pasa en el Camp Nou.

Lo peor: Nada
Nada fue malo ni sobró. un poquito de allí y unn poquito de allá, quizá un Athletic faltón y demasiado cauto, pero nada que reprochar a un partidazo en mayúsculas.

El dato: Desde la 97.
La playstation 1 hacía estragos entre la juventud cuando el Athletic ganó a domicilio al Espanyol, y hablamos ya desde 97-98.
Franc Mendiola / Barcelona

Dos bajas significativísimas en el once inicial vasco. Los pilares Orbaiz y Llorente, ambos por molestias, permanecerían en el banquillo, dando paso a Iturraspe y Gurpegui acompañando a Javi Martínez en la medular y secundando al todoterreno Toquero, ese delantero fondista que lleva el dos en la espalda. El Espanyol, por su parte, demostraba el talante real de su recién renovado entrenador dando el centro del campo a Márquez y Verdú. Garantía de toque, ofensividad y sobre todo valentía, algo de lo que adolece últimamente el fútbol por algunos lares.

Más entero y maduro entró el conjunto que dirige con buen tino Joaquín Caparrós, para la sorpresa del personal local. Obstinados en el pelotazo y el melón en largo para Alonso o Osvaldo, sólo una contra por banda derecha que Iraizoz le sacó magistralmente a Iván impidió que los blanquiazules se estrenasen e hicieran valer la supuesta injusticia futbolística vista sobre el tapete en el electrónico.

El desacierto mútuo prosiguió con su arduaa tarea de aborrecer a la mitad del feudo Cornellá congregado en un día santo para Satanás: los lunes de fútbol. Pero, como viene siendo habitual, alguien tenía que decir basta. Seguramente el mejor jugador tanto de unos como de otros. Osvaldo, pretendido hasta por la luna, recogió un intento de pase o despeje a metro pasado de la frontal para, zurdeado, enviar un disparo imposible y colocado en la arista de la base del palo izquierdo de Iraizoz. Fallo defensivo grave y los pericos que recobraban, a un cuarto de hora del descanso, una dosis de oxígeno considerable para lo visto hasta entonces.

Sin embargo, la recompensa era altísima para la apuesta ofrecida. Al poco del golito de Osvaldo, llegaría la réplica. Digo golito porque Susaeta, en comparación, la coló por toda la escuadra de falta directa, en contorno y a su palo opuesto al ser diestro. El empate, cien por cien justo por entonces, tendría que haberse visto desequilibrado por la última acción de la primera parte. Balón en profundidad para Alonso, que no llega pero a Gorka se le escapa, llegan a línea de fondo y el ex guardameta de la entidad barcelonesa comete claro penalti sobre el uruguayo. Claro aquí, en Madrid y en Sri Lanka. Quizá por el empuje de presión desmesurado del público, quizá por el linier, quien sabe si por su falta de vista o atención, pero se lo comió. Tremenda primera parte de emociones para un fútbol de ajustes desajustados y de errores no forzados.

Las descorazonadoras decisiones arbitrales, que no fueron tantas ni tan malas si obviamos el penalti, alumbraron el camino periquito en los instantes iniciales de la segunda mitad. Volcados al portal de un indeciso Gorka, las acometidas no cesaban en su empeño, aunque para encontrar un fruto jugoso se precisaba más paciencia de tres cuartos hacia arriba. Aun así, apareció. Tras el enésimo centro al área, Amat se encontró con una de esas que ni el mejor Ronaldo en sus mozos tiempos. Solo, con tres o cuatro segundos para pensar, actuar y marcar, osea, el transcurso lógico de las cosas. La paró, tomó fotografías a cámara lenta, se la recolocó a su pierna de palo y cuando quiso darse cuenta ya no había regalo, puesto que el arquero leonés se cubrió de gloria parándole el entuerto a bocajarro. Ante el vendaval de los de Pochettino, Caparrós decidió tapiar la cueva con el tercer central, Ustaritz, sacando del campo a un inadvertido Muniain.

Así hasta el minuto mágico. El 75. Buen año, por cierto. Un doble cambio previo a un saque de esquina enfervorizó, más para mal que para bien, a la ansiosa parroquia blanquiazul, que se veía al mismo tiempo capaz que incapaz de la victoria. Con dos juveniles de acné más en el césped, Isaías y Rui Fonte, la diosa fortuna, esa que no frecuenta el establecimiento blanquiazul, se apareció con el gol de Alonso en ese preciso instante, en ese precioso minuto, e hizo estallar de júbilo el acorazado Cornellá.

El partidazo de fútbol al que estábamos asistiendo se convirtió en un quiero y no puedo para el conjunto bilbaíno, en el que la solitaria estampa de Llorente no fue suficiente para llevar a buen puerto los balonazos de su defensa. Pobre imagen de los vascos y rebelión de adrenalina blanquiazul de cara a la hazaña en un estadio fácil: el Camp Nou.


Sala de prensa
Mauricio Pochettino (Entrenador del Espanyol)
”Este equipo siempre ha querido estar donde estamos, pero por circunstancias no hemos podido. Vamos a luchar y a dejarnos todo para intentar conseguir una plaza europea. Me siento orgullosos de todos mis jugadores, independientemente de tu edad. El partido ante el Barça será vibrante, apasionado, intenso, como todos, pasional. Siempre digo lo mismo, hay que agradecerle a la afición todo lo que hace.”
Caparrós (Entrenador del Athletic)

”Aquí no vale si el resultado es justo o no. Cuando más metidos estábamos, nos han metido tanto el primero como el segundo. Pero realmente no hemos estado a gusto. Si el Espanyol está ahí es por algo, y me ha parecido que tiene una línea muy buena, nadie les ha regalado nada. El resultado sólo influirá al final, cuando acabe el campeonato se verá si influye o no. Hemos tenido varios problemillas con Iker y Fernando".


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