Ifrán vuelve, lo ficharon lesionado pero al salir de su primera lesión se lesionó de nuevo y hasta primeros de marzo no debuto con los donostiarras.
Tras pasar un calvario de lesiones, el uruguayo parece que ha dejado atrás la mala fortuna y solo se centra en conseguir victorias con el conjunto realista. Ifrán debuto ante el Deportivo hace tres partidos. Fue sin duda un gran momento tanto para él como para los aficionados donostiarras. El uruguayo volvía a sentirse jugador tras 6 meses de inactividad, mientras los aficionados veían por primera vez en acción a uno de los fichajes de verano que hizo el club.
Desde entonces Ifrán ha sufrido dos lesiones que le han apartado de los terrenos de juegos. Pero desde que debutó en Riazor, parece que la suerte va de su lado. Todavía se ve que le falta el ritmo de los partidos pero ganas de demostrar su valía no le faltan. Primero en Riazor en media hora, luego ante el Málaga y finalmente en Santander ha demostrado su calidad. Ha dejado boquiabiertos a la mayoría de los aficionados donostiarras tanto por su calidad como por su valentía a la hora de conducir el balón.
Todavía le falta entenderse con sus compañeros sobre el césped pero eso lo demuestra a medida que van pasando los partidos. En Santander fue de los mejores del equipo y casi estuvo a punto de marcar su primer gol, de falta directa. Luego lo demostró en el amistoso que jugaron los donostiarras ante el Eibar, donde sí fue capaz de anotar el primer gol. Viendo sus actuaciones, es normal que estemos hablando del mejor fichaje invernal de la Real Sociedad, la recuperación de Ifrán. Además con la lesión de Llorente le viene bien a Lasarte un poco de variedad en las líneas ofensivas.