Hoy podría ponerme a comentar un montón de temas que están de actualidad. La situación extra deportiva del Rayo Vallecano, la salida del Messina del Real Madrid Baloncesto, la peor jornada de la Liga en cuanto a lesiones se refiere, el Racing y sus ilustres mandatarios: de Piterman a Ahsan Ali Syed, la mala baba de Mourinho, etc. Pero hoy queridos lectores y queridas lectores, tengo que hablar del deporte en FEMENINO.

Hoy es el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. En este día se conmemora la lucha de la mujer por su participación, en pie de igualdad con el hombre, en la sociedad y en su desarrollo integro como persona.

A mi no es que me haga mucha “ilusión” este día, y todo el mundo que me conoce lo sabe. Valoro y estoy de acuerdo en su contenido, pero no en el fondo con él que el paso de los años se hace de este día. Las mujeres queremos igualdad en todos los derechos, pero no creo que sacando a relucir en un día lo maravillosas que somos se vaya a conseguir algo. Porque mañana ya es otro día y ya no estamos en todos los medios de comunicación.

Sí, todo esto viene a colación por la feria chabacana que se montó Sandro Rosell, el sábado en el palco del Camp Nou. Todo el mundo valoró este hecho como algo positivo, emotivo y un gran gesto del presidente del club azulgrana.

Para mi fue otro gesto más para salir en la foto. Estas cosas tienen su verdadera razón y sentido cuando se hacen porque sí, sin tener que esperar al día de turno para mostrar cuan solidario es uno. Cuando sea el Día del Orgullo Gay va a montar un desfile en el placo? (hombre no hay Liga cuando esto, pero seguro que me entienden)

Además, seguramente que si hubieran sorteado entre todas las socias y aficionadas del Barça, el poder sentarse en el palco para poder ver el encuentro podría hasta llegar a estar mínimamente conforme. Aunque las autoridades, por muy mujeres que sean, se sienten en el palco no es algo que sea para aplaudir, ya que las que allí estaban lo tienen más fácil que otras, para ocupar ese sitio.

El papel de la mujer en los estamentos directivos de los clubes ya no tendría que sorprendernos. Desde Teresa Rivera a Ana Urquijo, que llevaron y llevan el peso de la presidencia de clubes -sin entrar a valorar el trabajo realizado- a secretarias, tesoreras, vicepresidentas...la mujer está presente en los altos cargos de los estamentos deportivos, sea cual sea el deporte.

Lo guapo de esto es ver normal y no asombrase que dentro de unos años haya una mujer presidiendo, ojeando jugadores, entrenando o arbitrando. Hay que aprender y querer que esto sea así, sin días especiales ni chorradas por el estilo. Y para poder ver esto de una manera natural, es normalizándolo, que el día de mañana decir que una mujer esté al frente de la directivo de un club, sea de fútbol, baloncesto o natación no tenga más repercusión de la que tiene ahora con un hombre, ninguna.