Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Fútbol
Etiquetas | Análisis Celta de Vigo
Roberto Carrera

Desde Alcorcón al cielo

|

De nuevo ese runrún estomacal alegrando las tardes de domingo. Después de tantos cortes de digestión, por fin los nervios se aliaban con el éxito para el primer asalto celtiña al trono de la Liga Adelante. Qué bien sienta retornar a los viejos placeres, y aunque no se pudo pasar del empate en Córdoba, la jornada ha sido redonda para los gallegos.

Aunque el Granada sigue enseñando la patita, esto es hoy cosa de tres. Las derrotas de Rayo y Betis han recubierto al punto de El Arcángel de un sabor especialmente dulce. Ha pasado una jornada más, el club sigue en ascenso directo, y se ha dado un pasito más que los máximos rivales. Un fin de semana magnífico.

Del partido en sí no hay grandes reflexiones posibles. Además de que en el sur llueve poco, pero cuando se pone, lo hace con gusto, podría llegarse a la conclusión que la pareja Álex López – Michu ha sido un remiendo poco duradero. Por mucho que le cueste, Herrera va a tener que seguir dejando en el banquillo a uno de los dos medios, y todo apunta al asturiano como favorito al indeseable descanso.

Porque para la siguiente jornada, si las meigas no se rebelan, Quique de Lucas volverá a dirigir la nave viguesa. Decir que se le echa en falta es una provocación infame. Decir que el club necesita de su inspiración se queda abismalmente lejano. Para que nos entendamos todos: sin De Lucas, no hay ascenso.




Es de Perogrullo. Sin el líder sobre el campo, no hay liderato (Agencias)

En un campeonato tan competido, los rivales son como la tradicional chica en bikini de todos los veranos. Uno no puede dejar de echarle un vistazo fugaz ni aunque te encuentres de la mano de tu propio partido. La derrota del Rayo nos habla de la presión por pisar cumbre en el resurgir de un grande como el Tenerife. Pero los cuatro fiascos consecutivos del Betis me obligan a repetir un suspiro de alivio infinito.

El año pasado, ustedes recordarán, el Celta copaba primeras páginas tras un partido memorable frente al Atlético de Madrid en cuartos de la Copa del Rey. La misma temporada en la que el equipo sudó sangre una vez más para mantenerse en la categoría de plata. Esta campaña, el Betis tampoco ha sabido asimilar el éxito temporal del torneo del KO. Seguirán en la lucha, pero de momento ya se han escapado doce puntos. El gol de Quini en segunda ronda, allá por el mes de octubre, fue un duro varapalo para un Celta en construcción. Ahora, cinco meses después, todo se ve más claro. Gracias Alcorcón.

Desde Alcorcón al cielo

Roberto Carrera
Roberto Carrera Hernández
lunes, 14 de febrero de 2011, 00:55 h (CET)
De nuevo ese runrún estomacal alegrando las tardes de domingo. Después de tantos cortes de digestión, por fin los nervios se aliaban con el éxito para el primer asalto celtiña al trono de la Liga Adelante. Qué bien sienta retornar a los viejos placeres, y aunque no se pudo pasar del empate en Córdoba, la jornada ha sido redonda para los gallegos.

Aunque el Granada sigue enseñando la patita, esto es hoy cosa de tres. Las derrotas de Rayo y Betis han recubierto al punto de El Arcángel de un sabor especialmente dulce. Ha pasado una jornada más, el club sigue en ascenso directo, y se ha dado un pasito más que los máximos rivales. Un fin de semana magnífico.

Del partido en sí no hay grandes reflexiones posibles. Además de que en el sur llueve poco, pero cuando se pone, lo hace con gusto, podría llegarse a la conclusión que la pareja Álex López – Michu ha sido un remiendo poco duradero. Por mucho que le cueste, Herrera va a tener que seguir dejando en el banquillo a uno de los dos medios, y todo apunta al asturiano como favorito al indeseable descanso.

Porque para la siguiente jornada, si las meigas no se rebelan, Quique de Lucas volverá a dirigir la nave viguesa. Decir que se le echa en falta es una provocación infame. Decir que el club necesita de su inspiración se queda abismalmente lejano. Para que nos entendamos todos: sin De Lucas, no hay ascenso.




Es de Perogrullo. Sin el líder sobre el campo, no hay liderato (Agencias)

En un campeonato tan competido, los rivales son como la tradicional chica en bikini de todos los veranos. Uno no puede dejar de echarle un vistazo fugaz ni aunque te encuentres de la mano de tu propio partido. La derrota del Rayo nos habla de la presión por pisar cumbre en el resurgir de un grande como el Tenerife. Pero los cuatro fiascos consecutivos del Betis me obligan a repetir un suspiro de alivio infinito.

El año pasado, ustedes recordarán, el Celta copaba primeras páginas tras un partido memorable frente al Atlético de Madrid en cuartos de la Copa del Rey. La misma temporada en la que el equipo sudó sangre una vez más para mantenerse en la categoría de plata. Esta campaña, el Betis tampoco ha sabido asimilar el éxito temporal del torneo del KO. Seguirán en la lucha, pero de momento ya se han escapado doce puntos. El gol de Quini en segunda ronda, allá por el mes de octubre, fue un duro varapalo para un Celta en construcción. Ahora, cinco meses después, todo se ve más claro. Gracias Alcorcón.

Noticias relacionadas

La gabarra "Athletic" está feliz, puesto que por fin verá finalizada su inactividad de tanto tiempo. Todo ello porque los bilbaínos pusieron fin a su maldición de cuarenta años sin ser campeones de la Copa del Rey, con seis finales perdidas, cinco en los últimos 15 años. El equipo de Valverde debió esperar a la tanda de penaltis para vencer a un combativo Mallorca y alcanzar la gloria, pero esta Copa, "su" Copa más deseada, por fin podrá lucirla ante su gente por la ría de Bilbao.

Una Copa para el Madrid, la 20ª de su historia; una Copa para Rodrygo Goes, MVP y autor de los dos goles que vuelven a dar el título copero a los blancos, nueve años después de aquel recordado triunfo en Mestalla frente al Barça. Y, a la vez, un subcampeonato, el segundo de su historia, con honores de campeón para Osasuna.

El Real Betis Balompié es el campeón de la Copa del Rey. El equipo verdiblanco, en su ciudad, delante de su gente que lo sigue sin rechistar, ha salido victorioso por tercera vez después de una nueva final épica, como todas las que disputa, y en la que un rival tan sumamente digno como el Valencia y que ha merecido la Copa tanto como él solo ha claudicado en la cruel tanda de penaltis.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto