La importancia de las semanas que se le avecinan al Almería no es moco de pavo. Se trata de que, ni más ni menos, el Almería solventará su permanencia o no en la máxima categoría durante el próximo mes y medio. Ahí es nada.
Este angustioso y decisivo periodo se concentra en tan pocas fechas merced al capricho del calendario. Por mor de éste, los rojiblancos se enfrentarán a todos sus máximos rivales para la permanencia, con los que lleva media temporada luchando a brazo partido, uno por uno. Así que durante seis jornadas de altísima tensión, el equipo de Oltra jugará contar el Levante en Valencia, Depor en casa, contra el Málaga en la capital de la Costa del Sol, Racing en casa, Hércules en alicante y, tras una breve “descanso” contra el Atlético de Madrid en casa, terminar este infernal periplo contra el Soprting en Gijón.
Debido a ello, a mediados de Marzo el futuro de los rojiblancos estará ya bastante dilucidado. Es llamativo, pero si el Almería ha solventado con bien la mayoría de estos partidos, tendrá pie y medio en primera, pero si los urcitanos no han sabido imponerse en la mayoría de ellos, el aficionado almeriensista deberá ir pensando en ver a su equipo en segunda la temporada que viene.
Así que con este tenso panorama guarda el Almería armas esta semana, con la mirada puesta en esta auténtica maratón que le va a obligar a hacer un esfuerzo sobrehumano, un esfuerzo largo y duro, debido a lo mal que hizo las cosas en la primera parte del campeonato. Mimbres hay, ilusión, ganas y esfuerzo también, pero hasta que punto las lesiones respeten al equipo y la mala suerte no se cebe en el conjunto rojiblanco durante las próximas pocas semanas, será la clave para que el año que viene el equipo siga en primera.