Sergio Gabriel Martínez nació un 21 de febrero en Avellaneda, provincia de Buenos Aires, (Argentina). Siendo el mediano de tres hermanos, Hugo Alberto, su padre, se dedicaba a la metalurgia viéndose muy pronto obligado a trasladarse junto a su esposa Susana Griselda y sus hijos, a lo largo de las ciudades en las que conseguía encontrar trabajo para poder alimentar a su humilde familia.

Quilmes, Buenos Aires Capital, Mar del Plata y finalmente de vuelta a Quilmes, son lugares que vieron vivir a la familia Martínez durante su peregrinar.

Sergio Gabriel, realizó sus estudios primarios continuados con cursos de inglés y secretariado comercial, hasta que se vio obligado a abandonarlos para colaborar con su padre trabajando de la mañana a la noche.

Desde muy joven se destacó en tantos deportes como participaba, fundamentalmente en el fútbol en el equipo de su barrio, Claypole, como goleador en el mismo, peleando codo con codo junto a jugadores que ahora triunfan en el profesionalismo estando a punto de fichar a los 20 años de edad por el equipo de Los Andes.

Debido a la tradición familiar, Sergio se inicia como púgil a los 21 años, entrenando junto a su tío Rubén Paniagua, siendo su progresión tan fulgurante, que cinco semanas más tarde debutaba como amateur con victoria frente a José Pisani.

Durante esta época, ya entonces a las órdenes de sus otros dos tíos, Raúl y Carlos Paniagua, su particular estilo fascina a aficionados y periodistas de tal manera que Luis Blanco, le pone el apelativo de "Maravilla", apodo que le acompañaría durante el resto de su carrera boxística.

En sus primeros combates se proclamó dos veces campeón argentino, campeón intercontinental y su progresión le lleva a participar con la selección albiceleste en el mundial de Hungría del año 1997 con sus compañeros Omar Narváez, Jorge Álvarez, Fabricio Nieva, Guillermo Saputo y Santiago Nieva, siendo derrotado en cuartos de final por el rumano Adrián Diaconu, medalla mundialista en 1997 y 1999.

La derrota le lleva a convertirse en profesional, debutando con victoria ante Cristian Marcelo Vivas.

Obtiene distintos premios como el Firpo 99 al boxeador revelación de Argentina y el premio Clarín Revelaciones 98.

El 19 de febrero de 2000, con un record de 16-0-1 le llega su gran oportunidad en Las Vegas. El Mandalay Bay Resort ve la primera derrota como profesional de Sergio ante el mexicano de Tijuana, Antonio Margarito, por KOT en el séptimo asalto. La inexperiencia y la mala planificación de su manager, no le permiten triunfar por la vía rápida, volviendo a Argentina con más sombras que luces en su cabeza.

Con la mano destrozada, y abandonado de la mano de su promotor, "Maravilla" trata de iniciar la remontada, logrando el Cinturón Latino de la OMB frente a Adrián Walter Daneff.

Pero su mano izquierda no da más de si, sus nudillos dañados se ven obligados a pasar por quirófano, teniéndolo en dique seco prácticamente durante un año.

Paradójicamente, este es el periodo más importante en su carrera en lo que a técnica se refiere, ya que se vio obligado a cambiar sus maneras pugilísticas, llegando a boxear sólo con la diestra y adquiriendo la velocidad que actualmente lo acompaña en la misma.

A su vuelta, logra el cinturón de campeón argentino, y tras defenderlo, decide probar suerte en Europa marchándose con una maleta y una lista de teléfonos, en billete de ida a Roma. Tras cuatro días de viajes en tren, llega a Madrid y sumido en la desesperación y tras serle sustraídas las maletas y por tanto su agenda, logra ponerse en contacto con el también argentino Pablo Sarmiento, en ese momento Campeón del Mundo IBO.

Sergio se instala en la ciudad de Guadalajara, entrenando a las órdenes de Gabriel Eduardo Sarmiento (hermano y también entrenador de Pablo), pasando a formar posteriormente parte del equipo de Ricardo Sánchez Atocha.

Es su periodo en España, llegan los momentos más felices de su carrera boxística, obteniendo en 2003 el título de Campeón del Mundo IBO, en el peso súper welter, disputado en Manchester (Inglaterra) frente al inglés Richard Williams (17-1-1 en ese momento) por decisión unánime y sorprendiendo a propios y extraños con su particular estilo.

Realiza dos defensas del título en territorio "enemigo", frente a Adrián Stone (33-4-2) y la revancha frente a Richard Williams, con dos fantásticas victorias antes del límite.

Ya en 2005, Sergio deja vacante su título, al ser incompatible, para pelear por un nuevo cinturón, el cetro Latino del Consejo Mundial de Boxeo, ante el georgiano Albert Airapetian, derribado por K.O. en el undécimo asalto en la que se convirtiera en una polémica velada debido a los hechos acontecidos tras el combate.

Desde 2005 a la fecha disputó varias veces el cinturón WBC del peso medio (Tanto Interino como Latino), viéndose las caras con boxeadores de la talla de; Álvaro Moreno Gamboa (Convención Mundial CMB) La Línea de la Concepción, Andalucía, a quién ganó por KO en el 2º round reteniendo el título WBC Latino, Tamaz Tskrialashvili, Presente Brito, Vasile Surcica (retuvo el título WBC Latino) a quién demostró una técnica arrolladora, Oliver Tchinda, Saúl Román (WBC Eliminatoria), Pavel Florín Madalin, Russell Jordan, David Toribio, Archak TerMeliksetian , Alex Bunema (WBC Título Interino) a quién propinó una brutal paliza cerrándole los ojos y Kermit Cintron quedando el resultado en empate.

El 5 de diciembre de 2009 llegaría la que fue una de las peleas más importantes del pasado año, Martínez vs. Williams. Una contienda que dejó muchas dudas en la afición con un resultado muy discutido al que se tituló en muchos periódicos como “el robo del año”. Esta sería la segunda y última derrota hasta el momento de Sergio Martínez.

El 17 de Abril del presente año subiría de nuevo al ring para verse las caras con Kelly Pavlik, al que venció por decisión unánime adjudicándose los títulos de campeón del mundo versión CMB y WBO de los pesos medios.

El pasado mes de nNviembre, concretamente el día 20 llegó la hora de la revancha para “Maravilla” Martínez, el cual se enfrentaría de nuevo a Paul Williams, al que nokearía en el segundo asalto, pasando a la historia como el KO del año 2010 y proclamándose de nuevo campeón del mundo CMB de los pesos medios.

Esta espina ya fue quitada, pero aún le queda a Sergio la que tiene clavada con Antonio Margarito. Esta pelea pienso que debería darse y pronto. La afición la espera y ambos boxeadores la necesitan. Sergio quiere limpiar su palmarés y a Margarito le haría un hombre el poder vérselas de nuevo con el Argentino y mucho más aún ahora, que anda derrotado desde que perdiese con Manny Pacquiao y anteriormente tuviese problemas con Mosley y los famosos vendajes.

Por otro lado, pienso que debería de hacerse la pelea Martínez vs Pacquiao. Martínez está en la élite boxística mundial al igual que el filipino. Es un rival más que digno, que al igual que Juan Manuel Márquez puede darle una sorpresa al Pac Man. Estoy seguro que sería una pelea para la historia.

El problema es el de siempre, los despachos. ¿Qué pensará Bob Arum y el bueno de Roach sobre esta pelea?... No dudo que el filipino quiera enfrentarse a Maravilla, pero donde hay patrón no manda marinero.