No voy a negar que incluso yo, fiel seguidor del trabajo que realiza el Villarreal CF con su cantera y todos sus filiales, daba por perdido el encuentro frente el líder de Segunda, equipo “semi” verdugo del Barça y que tan sólo había encajado dos únicas derrotas el lo que llevamos de campeonato.
Por lo que me permitirán la osadía de sorprenderme ante tal hazaña realizada por el filial amarillo la tarde-noche del sábado. Tan sólo se necesito de 3 minutos –y un poco de ayuda visitante- para encarrilar la victoria en el encuentro más difícil que ha tenido que lidiar esta temporada.
Y probablemente el más importante. Porque tras perder en Huelva, la necesidad de no dejar de sumar puntos se hacía imperante para conservar el actual puesto en la tabla, ya que una nueva derrota podría haber supuesto un acentuado descenso clasificatorio puesto que los de detrás vienen pisando fuerte.
Pero ante todo pronóstico, el Betis no pudo escapar de Villarreal con punto alguno en su posesión. Ahora, ¿por qué el conjunto de Javi Gracia no pudo superar a un Recreativo en zona de descenso y en cambio se mostró superior ante el líder de la categoría? La respuesta la encontramos en ambas bandas en la estrategia del equipo.
En su viaje a Huelva, Javi Gracia tenía que lamentar cinco bajas dentro de la plantilla, de las cuales dos de ellas de gran importancia. Los problemas en los isquiotibiales de Jaume Costa y la gripe de Hernán Pérez dejaron mermados los dos carriles y tanto Iago Falqué en el extremo izquierdo como Mano en el lateral derecho no encontraron en Héctor ni en Castellani un aliado de la competencia a la que están acostumbrados.
Con el regreso del lateral valenciano y el atacante paraguayo al once inicial, el grupo encontró de nuevo la compatibilidad entre las bandas y la vanguardia, amén de la gran pegada y el desequilibrio que produce sobre el rival Hernán Pérez, quien provocó el penalti que le brindó los últimos tres puntos al filial amarillo.
Esto no hace más que corroborar la importancia que tienen los titulares asiduos en la alineación. Incluso la presencia de un sancionado Nicki Bille en el lugar de Castellani acompañando en la punta de ataque al deslumbrante Bordás podría haber aportado esa brizna más de peligrosidad que hubiera ampliado el marcador.
Pero tras la motivadora victoria frente el Betis ahora hay que seguir pensando en ir sumando hasta conseguir los 50 puntos que te aseguran la continuidad en la categoría un año más. De momento, el conjunto de Javi Gracia lleva unos bien logrados 31 puntos al finalizar la primera vuelta, no obstante no ha superado su particular récord, puesto que la temporada pasada consiguió 33 con Garrido a la cabeza del equipo.