Qué decir, cómo empezar. El balance del 2009 fue inmejorable, con un sextete teóricamente irrepetible. Este año natural, sin embargo, no fue tan prolífico en cuanto a número de títulos se refiere, pero sí significó la consolidación de un estilo único y envidiable. Con un fútbol de toque y combinación, el juego de los pupilos de Pep Guardiola ha enamorado durante todo el curso al mundo entero.
Y todo ello, pese a que el año empezó con la peor noticia posible. El 'Pep Team' sucumbió ante el Sevilla en el Camp Nou en la ida de los octavos de final de la Copa del Rey. En la vuelta, días más tardey ya en territorio hispalense, los culés se estrellaron contra un muro llamado Palop, que tuvo su mejor día y evitó la reconquista del título copero.
Sin embargo, el Barça siguió imperando en la competición doméstica. El Real Madrid de Pellegrini apretaba desde la segunda posición con un CR que aún era 'nueve' por aquel entonces. Llegó el partido del Bernabéu y el conjunto barcelonista, con tantos de Messi y Pedro, dio el enésimo golpe encima de la mesa. Aún había quien dudaba del rodillo azulgrana.
Pero entonces llegó el Inter de Milán dirigido por el enemigo público número uno: José Mourinho. El técnico portugués, bien acompañado por su compatriota Benquerença, el colegiado que dirigió la ida de las semifinales de la Champions, borró a los catalanes en el Giussepe Meazza. La remontada en el feudo culé no llegó. Y se produjo la ya famosa escena de los aspersores.
Pese a todo, el Barça no se hundió y prosiguió con su monólogo futbolístico en el campeonato español. El final es por todos conocidos: la famosa Liga de los 99 puntos. Apenas quince puntos dejaron escapar los hombres de Pep Guardiola en todo el transcurso de la competición...
Un cambio convulso
Y llegaron las elecciones. Tal vez la mayor lacra del barcelonismo, muy dividido en diferentes sectores que se mostraron muy poco partidarios a gozar del momento que vivía y vive el club. Sandro Rosell, el candidato con más opciones y más apoyos, se aupó a la presidencia del Barça y cogió, presuntamente, un Barça arruinado económicamente. Se vendió a la carga de Zlatan Ibrahimovic, tras rajadas varias del sueco, y la nueva junta directiva encargó una auditoria para desenmascarar los números de Laporta y compañía.
Entretanto, en Sudáfrica el combinado nacional hacía olvidar a los españoles un año 2010 marcado por la crisis y el paro. Nada ni nadie podía frenar una Roja muy barcelonista. Y es que hasta ocho futbolistas culés tiñeron la elástica española de color azulgrana. Lamentándolo mucho, sin el sello de Can Barça, España no se hubiera llevado su primer entorchado Mundial.
Nueva temporada, ilusiones renovadas
Se venía remarcando, pero hasta el día del Clásico no se hizo efectivo: el mejor fichaje del club de la Ciudad Condal fue José Mourinho. Las provocaciones y la sola presencia del luso motivaban a unos futbolistas culés que no tienen límites. El primer tramo de temporada nos deja varias manitas para el recuerdo y un manotazo al eterno rival para la Historia.
En definitiva, el 'Pep Team' prosigue con su dominio total con el esférico, dando un auténtico recital a todos y cada uno de sus rivales y demostrando al mundo la filosofía made in La Masía. Y llegó la merecida recompensa. Y es que Iniesta, Xavi y Messi son los tres futbolistas que optan al Balón de Oro. El próximo día 10 de enero se dará a conocer el ganador, pero indiferentemente de quién se lleve el galardón, lo cierto es que el hecho de que los finalistas sean forjados en Can Barça ya es un gran reconocimiento.
Pero es que encima las nuevas generaciones pisan fuerte. Marc Bartra, Fontàs o Thiago Alcántara, entre otros, ya alternan el primer equipo con el filial y son auténticas joyas por pulir. Y no lo duden: Pep Guardiola sabrá tratarlos con humildad para que crezcan poco a poco, y así aprendan de los valores que transmiten chicos tan grandes pero a la vez tan cercanos como Andrés, Carles Puyol o Víctor Valdés.
Pero no se vayan aún. Tranquilos. No saben lo que queda por vivir, por sentir y por admirar. Este Barça promete seguir haciendo Historia y batir todos los registros habidos y por haber. Larga vida al mejor club del mundo y, probablemente, a un equipo que marcará una época futbolística. Que siga la fiesta en el 2011...