Parece ser que algo se mueve en la política Andaluza, así la última encuesta del IESA ha marcado de nuevo una tendencia sumamente peligrosa para el pensamiento progresista en la región, la constante subida en la intención de voto del PP entre la ciudadanía andaluza ,frente a una abstención y desmovilización de los votantes socialistas ofrece de esta forma una foto fija en donde la derecha se abre paso en un bastión socialista que parecía inexpugnable.
De esta forma, y ante el continuo goteo de encuestas y sondeos que en Andalucía y en España marcan el avance del pensamiento neoconservador, pensamiento que espoleado por factores como una crisis económica mundial y el apoyo de los mercados a su política del “miedo” hacen posible que hoy Europa se encuentre a merced del mayor retroceso de derechos y libertades de los últimos cincuenta años. De esta forma ,hechos como los acontecidos en Inglaterra en donde el gobierno del conservador Cameron – icono de referencia para el PP – ha realizado un recorte total en los servicios públicos incluyendo el aumento de las tasas universitarias o la política migratoria de Sarkozy en Francia o Berlusconni en el recorte de gasto sanitario en Italia adelantan el futuro que a nuestro país parece esperarle ante la probable victoria del Partido Popular.
Pero independientemente de lo anteriormente señalado, algo ocurre en la izquierda, el distanciamiento de los tradicionales votantes progresistas y el alejamiento de la sociedad civil organizada de los partidos socialdemócratas parecen poner de manifiesto una ruptura entre cúpulas de poder de los partidos y las Bases de votantes de los mismos, provocando a su vez este hecho un efecto negativo para el pensamiento de izquierda con respecto a la intención de voto que las últimas encuestas a nivel nacional y regional parecen reflejar.
No obstante y frente a los excesos de triunfalismo de unos y los pesimismos de otros , debemos señalar una afirmación clara “ Las Encuestas no lo deciden todo”, si bien tal vez ha llegado el momento para que el seno de los partidos progresistas se lleven a cabo preguntas necesarias para lograr conclusiones que permitan llevar a cabo un plan de acción, tiempo ahí para ello antes de los próximos comicios electorales. Por un lado, analizar el porque se produce el distanciamiento de la militancia de base de sus propios partidos, respondiendo a varias preguntas ¿ es necesario llevar a cabo una renovación en la forma de estructurar la participación en el seno de los partidos políticos dotando a los militantes de un mayor peso en la tomas de decisiones y acciones? ¿ están los partidos políticos socialdemócratas en Europa y por ende en España abiertos a su militancia de base? ¿Existe una política desde los partidos políticos socialdemócratas de escucha activa y trabajo conjunto con la sociedad civil progresista y los movimientos sociales que dentro de la misma cada vez tienen mayor calado? ¿Están los partidos neoconservadores logrando copar espacios de la sociedad anteriormente en donde la izquierda tenía acomodo? ¿ Existe desde los partidos socialdemócratas una buena política de comunicación en relación a las políticas que desde los gobiernos progresistas se llevan a cabo? Son estas algunas de las respuesta que los partidos de izquierda tal vez deban responder, para de esta forma lograr conclusiones y acciones destinadas a frenar el avance del pensamiento neoconservador.
Por todo ello , el análisis claro, sin complejos y realista de la situación que el pensamiento socialdemócrata vive en Europa, España y Andalucía se presenta como un elemento imprescindible para avanzar en el camino de la victoria del pensamiento progresista ante los retos y desafíos que los próximos tiempos nos deparan, análisis por tanto del que no se debe rehuir para afrontar con visos de éxito los envites electorales que a la vuelta de al esquina esperan , la receta clara: Coherencia, Lealtad a los ideales, Compromiso ,Comunicación y Responsabilidad. Porque no olvidemos “ Las encuestas no lo deciden todo”.