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Etiquetas | Análisis Celta de Vigo / Resumen 2010
Roberto Carrera

Los científicos mienten. A los cuatro años, empieza lo bueno

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Parejas estables del mundo, ¡no sufráis en vano! Sabemos que las dopaminas y testosteronas del bueno de Punset os han chafado el cuarto San Valentín de vuestra historia conjunta, pero ya no hay nada que temer. En las Rías Baixas, el mito de los cuatro años ha caído con apenas diecisiete jornadas de investigación. Resultado demoledor. Lejos de extinguirse, es ahora cuando el amor surge con más fuerza.

Fue en la temporada 2007/2008 cuando al Celta de Vigo le abandonó sin remordimientos la Primera División, iniciando de inmediato otra relación con una Liga Adelante que no conseguía hacer olvidar experiencias pasadas. De hecho, cada año juntos la pesadilla parecía aumentar exponencialmente. A estas alturas de la temporada, el equipo celeste se encontraba en la octava posición al primer intento, cayó a la decimoquinta en el segundo, y concluyó en una triste y alarmante decimoctava en su tercer capítulo.

Directiva, cuerpo técnico y jugadores parecían vivir en un constante tonteo adolescente que amenazaba con terminar en tragedia a lo Shakespeare. El 'ser o no ser' se hizo literal con la llegada de la ley concursal, y ni con las heces del Prestige la ciudad gallega lo vio más negro.

No parecía existir nadie que pudiera levantara esto, y cuando más dudas había, el sildenafil llegó desde Barcelona. La contratación de Paco 'Cupido' Herrera (haga el lector un esfuerzo por imaginar al técnico catalán con alitas y un par de flechas), ha conseguido reorganizar las hormonas viguesas para afrontar con seriedad y compromiso una relación que, en contra de la creencia popular, atraviesa su mejor momento en su cuarto año de existencia.




La dirección de Paco Herrera ha sido fundamental a la hora de romper la dinámica catastrofista (Agencias)

ABAJO, ARRIBA, EN EL MEDIO Y ALTERNANDO
Así ha sido el 'Kamasutra' celtiña en lo que va de campaña. Se comenzó, para no variar la tradición, con una derrota desconcertante ante el filial blaugrana. ¿Otra vez lo mismo? Nada más lejos de la realidad. Las tornas cambiaron radicalmente, y el equipo demostró que este año tocaba Rianxeira con seis victorias consecutivas que devolvieron a Balaídos las grandes tardes de gloria.

El empacho de triunfos dio paso a una dura digestión de cuatro empates, para estabilizarse finalmente en una dinámica más comprensible de victorias en casa y 'equis' como visitante. Treinta y tres puntos, a uno de la segunda plaza de ascenso directo, y con un colchón de nueve sobre el último equipo con acceso a play-off. Se disparan los rumores de boda.

(NUEVOS+ VETERANOS)* HERRERA = ∞
Es lo que tiene hacer bien las cosas. No te asegura el éxito, pero al menos te regala alguna oportunidad. Los estrambóticos fichajes de última hora dieron paso a la confección racional de una plantilla equilibrada. Los resultados son espectaculares. David Rodríguez y Quique de Lucas se han reivindicado como una de las parejas más letales de la categoría, Álex López va camino de leyenda, y tanto Joan Tomás como Murillo han cumplido siempre que el equipo ha necesitado de su colaboración. Pocas veces cinco fichajes han tenido tal pleno de aciertos.

Los recién llegados han revitalizado a los de siempre. El capi Falcón está más seguro que nunca bajo palos, la defensa es una muralla infranqueable, el doble pivote (Garai - Bustos) se combina a la perfección y Trashorras se siente más liberado en ataque. Desde el banquillo, Abalo y Aspas son pólvora de lujo, y la pareja Michu - Papadopoulos (sin discusión alguna) sólo lucha por entrar en la convocatoria.

Herrera es un sabio, sabe de qué va la categoría y no se le cae anillo alguno por demostrarlo descaradamente. "Quizá mi gran error haya sido no echar al equipo atrás frente al Valladolid" No es un hombre que tropiece en la misma piedra. Sin remordimiento alguno, puso el autobús frente al Salamanca y permitió al equipo conseguir los últimos tres puntos de un año magnífico. Así se asciende en la Liga Adelante.




La explosión de Álex López ha sido la sorpresa del año. Su renovación no será sencilla (Agencias)

¡¡LLEGA LA MARABUNTA!!
El objetivo de situarse a final de año entre los seis primeros comienza a ponerse en entredicho. ¿No es este Celta merecedor de un hueco en los dos primeros escalones? La respuesta no se va a hacer esperar. Bien hará el doctor García Cota en recetar turrón con proteínas a los celestes, porque el calendario ha preparado un inicio de año brutal.

En los próximos cinco partidos, el club vigués debe enfrentarse a una tropa feroz de candidatos al ascenso. Una detrás de otro, y cuatro de ellos lejos de Balaídos. Tras el esperado choque en el Teresa Rivero, aparecen los nombres de Elche, Xerez, Cartagena y Barcelona B. Si ignoramos al todopoderoso Betis, estos son exactamente los mismos equipos que lideran la clasificación actualmente. Difícilmente mejorable.

Pero la perspectiva es halagüeña. Este será también el circuito con el que terminará la competición, en esa ocasión recibiendo a la mayoría en feudo propio. Si lo unimos a la sensación de estabilidad que ofrece este proyecto, sería estúpido no afrontar las campanadas de fin de año con el sueño de un ascenso cada semana menos utópico.

Los hechos, como podrá observar, son irrefutables. Abandone a su psicólogo y celébrelo con la parienta o el pariente como si todo volviera a comenzar. La ciencia ha sido vencida por la evidencia, así que relájese y abrace una vez más la pasión como si fuera el primer beso. Se lo dice Paco Herrera. A los cuatro años, empieza lo bueno.

Los científicos mienten. A los cuatro años, empieza lo bueno

Roberto Carrera
Roberto Carrera Hernández
miércoles, 22 de diciembre de 2010, 21:25 h (CET)
Parejas estables del mundo, ¡no sufráis en vano! Sabemos que las dopaminas y testosteronas del bueno de Punset os han chafado el cuarto San Valentín de vuestra historia conjunta, pero ya no hay nada que temer. En las Rías Baixas, el mito de los cuatro años ha caído con apenas diecisiete jornadas de investigación. Resultado demoledor. Lejos de extinguirse, es ahora cuando el amor surge con más fuerza.

Fue en la temporada 2007/2008 cuando al Celta de Vigo le abandonó sin remordimientos la Primera División, iniciando de inmediato otra relación con una Liga Adelante que no conseguía hacer olvidar experiencias pasadas. De hecho, cada año juntos la pesadilla parecía aumentar exponencialmente. A estas alturas de la temporada, el equipo celeste se encontraba en la octava posición al primer intento, cayó a la decimoquinta en el segundo, y concluyó en una triste y alarmante decimoctava en su tercer capítulo.

Directiva, cuerpo técnico y jugadores parecían vivir en un constante tonteo adolescente que amenazaba con terminar en tragedia a lo Shakespeare. El 'ser o no ser' se hizo literal con la llegada de la ley concursal, y ni con las heces del Prestige la ciudad gallega lo vio más negro.

No parecía existir nadie que pudiera levantara esto, y cuando más dudas había, el sildenafil llegó desde Barcelona. La contratación de Paco 'Cupido' Herrera (haga el lector un esfuerzo por imaginar al técnico catalán con alitas y un par de flechas), ha conseguido reorganizar las hormonas viguesas para afrontar con seriedad y compromiso una relación que, en contra de la creencia popular, atraviesa su mejor momento en su cuarto año de existencia.




La dirección de Paco Herrera ha sido fundamental a la hora de romper la dinámica catastrofista (Agencias)

ABAJO, ARRIBA, EN EL MEDIO Y ALTERNANDO
Así ha sido el 'Kamasutra' celtiña en lo que va de campaña. Se comenzó, para no variar la tradición, con una derrota desconcertante ante el filial blaugrana. ¿Otra vez lo mismo? Nada más lejos de la realidad. Las tornas cambiaron radicalmente, y el equipo demostró que este año tocaba Rianxeira con seis victorias consecutivas que devolvieron a Balaídos las grandes tardes de gloria.

El empacho de triunfos dio paso a una dura digestión de cuatro empates, para estabilizarse finalmente en una dinámica más comprensible de victorias en casa y 'equis' como visitante. Treinta y tres puntos, a uno de la segunda plaza de ascenso directo, y con un colchón de nueve sobre el último equipo con acceso a play-off. Se disparan los rumores de boda.

(NUEVOS+ VETERANOS)* HERRERA = ∞
Es lo que tiene hacer bien las cosas. No te asegura el éxito, pero al menos te regala alguna oportunidad. Los estrambóticos fichajes de última hora dieron paso a la confección racional de una plantilla equilibrada. Los resultados son espectaculares. David Rodríguez y Quique de Lucas se han reivindicado como una de las parejas más letales de la categoría, Álex López va camino de leyenda, y tanto Joan Tomás como Murillo han cumplido siempre que el equipo ha necesitado de su colaboración. Pocas veces cinco fichajes han tenido tal pleno de aciertos.

Los recién llegados han revitalizado a los de siempre. El capi Falcón está más seguro que nunca bajo palos, la defensa es una muralla infranqueable, el doble pivote (Garai - Bustos) se combina a la perfección y Trashorras se siente más liberado en ataque. Desde el banquillo, Abalo y Aspas son pólvora de lujo, y la pareja Michu - Papadopoulos (sin discusión alguna) sólo lucha por entrar en la convocatoria.

Herrera es un sabio, sabe de qué va la categoría y no se le cae anillo alguno por demostrarlo descaradamente. "Quizá mi gran error haya sido no echar al equipo atrás frente al Valladolid" No es un hombre que tropiece en la misma piedra. Sin remordimiento alguno, puso el autobús frente al Salamanca y permitió al equipo conseguir los últimos tres puntos de un año magnífico. Así se asciende en la Liga Adelante.




La explosión de Álex López ha sido la sorpresa del año. Su renovación no será sencilla (Agencias)

¡¡LLEGA LA MARABUNTA!!
El objetivo de situarse a final de año entre los seis primeros comienza a ponerse en entredicho. ¿No es este Celta merecedor de un hueco en los dos primeros escalones? La respuesta no se va a hacer esperar. Bien hará el doctor García Cota en recetar turrón con proteínas a los celestes, porque el calendario ha preparado un inicio de año brutal.

En los próximos cinco partidos, el club vigués debe enfrentarse a una tropa feroz de candidatos al ascenso. Una detrás de otro, y cuatro de ellos lejos de Balaídos. Tras el esperado choque en el Teresa Rivero, aparecen los nombres de Elche, Xerez, Cartagena y Barcelona B. Si ignoramos al todopoderoso Betis, estos son exactamente los mismos equipos que lideran la clasificación actualmente. Difícilmente mejorable.

Pero la perspectiva es halagüeña. Este será también el circuito con el que terminará la competición, en esa ocasión recibiendo a la mayoría en feudo propio. Si lo unimos a la sensación de estabilidad que ofrece este proyecto, sería estúpido no afrontar las campanadas de fin de año con el sueño de un ascenso cada semana menos utópico.

Los hechos, como podrá observar, son irrefutables. Abandone a su psicólogo y celébrelo con la parienta o el pariente como si todo volviera a comenzar. La ciencia ha sido vencida por la evidencia, así que relájese y abrace una vez más la pasión como si fuera el primer beso. Se lo dice Paco Herrera. A los cuatro años, empieza lo bueno.

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