Una de las razones por las que me encanta la televisión estadounidense es por la importancia que le dan a la música en directo y, en especial, al rock. Otro motivo es porque se toman el humor muy en serio. Cuando encima mezclan ambos elementos, el resultado final suele ser divertidísimo. Concretamente, me han llamado la atención las últimas parodias musicales que se han llevado a cabo en el programa “Late Night with Jimmy Fallon”, de NBC, las cuales han llegado a rozar la genialidad.
El mes pasado, Bruce Springsteen acudió al show para presentar la caja “The Promise: The Darkness on the Edge of Town Story”, que recoge toda la historia del mítico álbum de 1978 en tres CDs y tres DVDs. El Boss no sólo ofreció la entrevista de rigor e interpretó algunas canciones en vivo con su banda, sino que además demostró un enorme sentido del humor y se prestó a una descacharrante parodia: se disfrazó de sí mismo de joven (gorra, gafas de sol y barba) para interpretar junto al cómico y presentador Jimmy Fallon, que a su vez imitaba a la perfección a Neil Young, una versión de “Whip My Hair” de Willow Smith (la hija de 10 años de Will Smith). Increíble. Lo alucinante de esa actuación es que puedes ver como ambos se lo toman totalmente en serio, como si estuvieran interpretando un solemne y grandilocuente tema de folk.
Esta pasada semana, otro de los grandes, Paul McCartney, fue para hablar de la reedición de su álbum “Band on the Run”. Durante la entrevista se hizo referencia al hecho de que “Yesterday”, en su etapa primigenia de gestación, fue bautizada por Paul como “Scrambled Eggs” y tenía una letra absurda. Fallon le pidió al exbeatle que interpretara esa versión original por primera vez, y este accedió encantado. Evidentemente, de dicha versión sólo se respetaron los primeros versos (“Scrambled eggs, oh, my baby, how i love your legs…”), el resto de la divertida y surrealista letra se creó para la ocasión. Ambos, presentador e invitado, ejecutaron el tema a dos voces con toda la seriedad de la que fueron capaces (alguna risilla se escapó) y en una harmonía vocal casi perfecta. Tanto en el caso anterior como en este, Jimmy Fallon demostró unas envidiables dotes para la música y el canto, de manera que no es el típico comicastro dispuesto a desafinar para hacer la gracieta de turno.
Así que ahí los tenéis: dos figuras legendarias de la música haciendo gala de su buen humor en televisión ¿Os imagináis algo parecido con nuestras estrellas de rock más importantes (Bunbury, Loquillo, Fito, etc.)? ¿Creéis que serían tan graciosos y que guardarían la compostura de esa forma? No sé, yo tengo mis serias dudas, no creo que fueran a entrar al trapo con la misma facilidad. Además, de darse situaciones de ese tipo, en este país se tiende a tirar por un humor más digerible y facilón, en vez de algo más elaborado e inteligente. Es por ello (y por un montón de razones más) que la televisión de EEUU, eterno modelo a seguir, siempre estará muy por encima de lo que hacemos aquí. Aparte de que, claro, no ayuda demasiado el hecho de que buena parte de nuestra oferta televisiva esté compuesta por tele-basura y programas del corazón.