Semana perruna, que diría aquél. Si Noé levantara la cabeza, la volvería a echar ante todo lo que está ocurriendo en el atletismo español. Muy certero Mourinho estos días con su alocución sobre perros y gatos.

Y es que el entrenador portugués del Real Madrid ya no sabe en qué idioma decirles a sus jefes que necesita un delantero centro, un ‘killer’ vaya, como el comer, porque ya intuye que los estados de forma y las lesiones pueden hacer mucho daño a su equipo en los meses importantes de competición.

El caso es que si Íker es un pulpo, Ronaldo un gallo, Higuaín un perro y Benzemà un gato, está claro que falta un lobo para merendarse la puerta contraria. Algunos nombres han salido, pero Mourinho está al quite para que no lleguen bromas caras ni jugadores contrastados a un precio imposible.

El mercado no da para más. Al Barça le sobran estrellas y el resto ‘mendiga’ con lo que puede o le dejan. Por eso Mourinho empieza a hacer la transición con suplentes menos suplentes y con una cantera que no es La Massía, eso está claro, pero que tiene gente potable.

Vamos a ver si Mou se hace con los mandos ante la ‘fauna’ que ha pedido y también si la Operación Galgo arroja luz para que los presuntos culpables sean culpables y los presuntos inocentes, pues eso, inocentes, para acabar con las dañinas especulaciones.

Este tema, que es tan serio y grave, merece un profundo respeto y que no haya juicios paralelos de la opinión pública ni de los medios de comunicación. Por eso desde aquí pedimos cordura, que se deje trabajar a la Justicia, que no se prejuzgue a nadie y que no señalemos con el dedo a todo el deporte español. Nuestra historia y nuestros deportistas y técnicos, simplemente, no se lo merecen.