Los últimos resultados han alejado al Numancia de los puestos nobles de la clasificación, y lo han relegado a una posición intermedia donde si sitúa a cuatro puntos de los Play Off y a cuatro puntos del decenso.
Hasta ahora el Numancia había sido de los mejores conjuntos como local. Gracias a ello consiguió equilibrar su media de puntos en la liga, puesto que es de los peores como visitante.
Los de Unzué han rozado en varias jornadas las posiciones de privilegio que permiten disputar el Play Off, pero todavía no han conseguido afianzarse. Esta situación se ha repetido jornada tras jornada cuando el equipo conseguía ganar y jugar bien en casa, pero fuera no conseguía más que derrotas y empates.
Esta última jornada en casa contra el Betis la balanza se rompió y el equipo a pesar de hacer un enorme esfuerzo y un gran partido no pudo con los béticos. Si a ello le sumamos la derrota por la mínima la anterior jornada en Huelva, nos encotnramos al Numancia undécimo en la tabla con necesidad de conseguir puntos para soñar.
Valladolid y Albacete la solución
El próximo sábado con las cámaras de Marca Tv en el José Zorrilla, el Numancia visitará al Real Valladolid, que tampoco pasa por sus mejores momentos. Los rojillos pueden y deben de aprovechar esta situación para traerse a Soria los tres puntos del derbi regional, y aunque en esa jornada no se alcancen los puestos nobles matemáticamente en la siguiente recibe al Albacete.
El conjunto castellano-manchego tampoco atraviesa sus mejores momentos dado que está en las posiciones más bajas de la clasificación. Si añadimos que el Numancia a pesar de su derrota contra el Betis sigue siendo uno de los mejores en casa, la consecución de éstos tres puntos más los de Valladolid harían terminar al conjunto rojillo con excelentes números para pelear por la sexta posición.
Pero si pasa todo lo contrario, los sorianos no consiguiesen su primera victoria fuera este fin de semana y la siguiente jornada pierden contra el Albacete, los de Unzué se comerían los turrones y mazapanes bastante intranquilos y con la obligación de mejorar los resultados.