Parecía que el Sevilla FC había cogido un buen ritmo en las últimas jornadas de Liga, pero el partido del pasado domingo ante el Mallorca terminó con esa buena racha de resultados. Y es que en dicho encuentro, los sevillistas estuvieron muy por debajo de su nivel, sobre todo la realizada en la primera parte.
Con esta derrota, que por cierto, es la primera cosechada en el Sánchez Pizjuán en competición nacional, el equipo de Nervión no hace más que acrecentar las dudas sobre su juego, pues no encuentra la regularidad que necesita en estos momentos.
Cuando los de Manzano logran encadenar varios triunfos consecutivos (la pasada jornada tenían el récord, con dos victorias seguidas), acaba pinchando, y lo que es peor, acaba saliendo de los puestos europeos. Y eso es lo que ha ocurrido esta semana.
Con una victoria, los rojiblancos hubieran ascendido hasta la cuarta posición, situándose a un solo punto del tercero, el Villarreal; pero no sucedió así. Perdieron, merecidamente de hecho, lo que les hace descender al séptimo puesto en la clasificación, fuera hasta de la Europa League.
En este sentido, desde el plantel sevillista se llama a la “lógica y a la paciencia”, ya que creen que el conjunto sólo ha tenido un partido malo, de ahí que haya que “corregir errores y mirar hacia delante; los resultados volverán a llegar”, comentaba Gregorio Manzano hace unos días. Un Getafe en horas bajas les espera ahora… Puede ser el momento idóneo para comenzar, de nuevo, a tener esa ansiada regularidad.
Al menos, si los resultados no han acompañado esta semana, en el Sevilla pueden consolarse con la recuperación de algunos de sus lesionados. Es el caso de Andrés Palop, quien reapareció ante el Mallorca, siendo nuevamente, uno de los más destacados de la tarde. Asimismo, Federico Fazio trabaja ya al mismo nivel del grupo y podrá volver en breve.