El Real Zaragoza es colista en la tabla, tras su última derrota liguera frente al Sevilla por un gol a dos. Pero, pese a ser de nuevo el farolillo rojo de la tabla, no está todo perdido. Son tres los puntos que le separan de la salvación, pero muchas las incógnitas que giran en torno a un posible cambio de entrenador.
El presidente del Real Zaragoza, Agapito Iglesias quiso aclarar la situación tras el pitido final sobre el dilema que la continuidad de José Aurelio Gay suscitó tras ver un resultado no favorable en el casillero. El máximo mandatario declaró que el entrenador se sentará en el banquillo zaragocista durante el próximo partido de Liga frente al Getafe, sin ningún margen de duda. Pidió, además, paciencia.
De estas declaraciones se derivan dos lecturas. Y, para desarrollar una de ellas, es preciso echar la vista atrás cuando, hace poco más de un mes, algunos sectores de la prensa hicieron públicas unas intenciones por parte de la directiva de prescindir de los servicios de Gay de forma inmediata. Fue el propio Agapito Iglesias quien expresó, en una rueda de prensa convocada a efecto de comentar dicha información, que el técnico continuaría en el Zaragoza hasta el mes de enero.
Sin embargo, y de aquí se vierte la segunda lectura, determinados medios de comunicación están dando a conocer estos días contactos mantenidos por el presidente del club con ánimo de calibrar la predisposición de algunos técnicos para venir a la capital del Ebro a ocupar el citado puesto. Para ello, ya se barajan nombres como el del mexicano Javier Aguirre; hombre conocido muy de cerca por la afición española por su trabajo en el Atlético de Madrid y en el Osasuna.
¿Será Gay el entrenador del Zaragoza hasta enero o hasta que el club encuentre un candidato dispuesto a coger el toro por los cuernos? No obstante, habrá que estar pendiente de otro importante capítulo, el de los fichajes. Todavía es una incógnita si el equipo sabrá, y podrá, reforzarse adecuadamente para dar un giro decisivo.