Buenas aguas corrían hasta este fin de semana por los caudales de Badalona: cuatro triunfos consecutivos, un Olímpic que sigue a día de hoy inexpugnable y un público que intenta olvidar el contexto económico de la escuadra parecían dar vida a la Penya. Pero la derrota de la semana pasada en Pisuerga dejó en evidencia ciertas carencias defensivas del equipo, del mismo modo que la vertiente ofensiva se vio duramente lastrada por un total de 25 balones extraviados por parte de los verdinegros. Para ahuyentar todo tipo de malas previsiones, la Penya tiene este fin de semana la posibilidad de brindarle a su afición una victoria ante el Real Madrid en uno de los duelos con más historia del baloncesto español.
Josep Franch, protagonista esta semana en una presentación de acuerdo de su equipo con una marca de ropa italiana, afirma estar cada vez más compenetrado con el equipo. El base verdinegro será una pieza clave en el partido que opondrá a los suyos frente a los de Ettore Messina, y es que el suplente de Russel Robinson está creciendo a pasos agigantados y supone una clara muestra de la fecundidad de la cantera badalonesa.
En ataque, la Penya sigue sustentada por el vigor de Mc Donald y la frescura del canadiense Carl English. El americano fue el único en superar los 30 minutos presenciales sobre el terreno de juego ante el Blancos de Rueda Valladolid y fue uno de los pocos en salvarse de la guillotina tras el mal partido de los suyos. Asimismo, Carl English parece haberse reencontrado con su “yo” interior. El escolta canadiense demostró hace dos semanas en Valencia que es capaz de llevarse el equipo a la espalda y empieza poco a poco a recordar a aquel gran Carl que conocimos en las filas del Gran Canaria. Ahora más que nunca, su experiencia y calidad deben de servir de estandarte para el equipo y especialmente, para los más jóvenes.