No es una semana fácil la que estamos viviendo en tierras charras. El ya por desgracia célebre infarto de Miguel García ha traído consigo el desánimo al vestuario, que intentará recuperarse y brindar al manchego la victoria el sábado.

Miguel García ya está en casa con los suyos (udsalamanca.net)

La vida continúa y por eso el equipo volvía el miércoles a los entrenamientos, aún traumatizado ante la idea de que Miguel no volverá a jugar. Un Miguel que ayer jueves era dado de alta, por lo que ya descansa en su domicilio junto a su mujer y su hija de tan sólo 3 años.

La principal preocupación que tiene ahora Óscar Cano y su equipo de ayudantes es devolver la normalidad lo más pronto posible a la plantilla, algo a lo que sin duda ayudará la enorme unidad que venía demostrando el grupo durante todo el año, y que salió a relucir en los minutos posteriores al incidente, cuando tras llorar en muchos casos por el susto, después hicieron sus mejores minutos del partido.

Es evidente que durante ésta semana se ha descuidado un poco lo deportivo, y la preparación del partido ante el Valladolid pasaba a un segundo plano en favor de un trabajo más psicológico, para que los jugadores recuperaran la alegría y la motivación por el fútbol. También hay que reseñar que en el club existe cierto malestar por la actitud de algún medio de comunicación, que ha intentado hablar con Miguel García por todos los medios, sobrepasando los límites de la ética.

El míster unionista se refería ayer en rueda de prensa al estado general de sus hombres. “estamos recuperando el ánimo, la sonrisa, hemos visitado a Miguel y nos ha dado fuerza, optimismo, no tenemos que relajarnos y dejar que nos pueda la tristeza”. “Cada avance suyo desde el domingo ha sido un estímulo para nosotros, es importante que ya esté en casita y con la gente que le quiere".

Y como las miras ahora están ya puestas en el derbi regional ante el Real Valladolid, así hablaba de los blanquivioletas: "Su entrenador se ha construido con Rafa Benítez, usa un 4-4-2 con las líneas muy juntas y son muy ordenados. Nosotros tenemos que estar juntos, cuando nos presionen hay que lograr sacar el balón de la zona, aparte de otros puntos débiles suyos de los que no vamos a hablar".

Por otro lado, el club aún no sabe qué va a hacer en materia de un posible fichaje para cubrir el hueco de Miguel García. El entrenador ha manifestado su confianza en los jugadores que le quedan en el mediocentro y no le parece una urgencia fichar. El Director Deportivo Balta reconocía que "ni siquiera me he parado a pensar sobre el tema. Han sido unos días muy difíciles y de mucho ajetreo. Cuando todo se normalice ya pensaré en el tema".