En el partido más intenso en lo que va de campeonato, Alemania puso en evidencia la fragilidad británica con una goleada histórica. Cuatro goles que devuelven a la ‘Mannschaft’ al podio de grandes favoritos, con un estilo de juego atractivo y contundente. Inglaterra deja el torneo impotente frente al poderío germano y con el puesto de Capello en entredicho
Alemania dejó a Inglaterra fuera del Mundial con goleada incluida (FIFA)
|
| FICHA TÉCNICA | 4- Alemania: Neuer (1); Boateng (1), Friedrich (2), Mertesacker (2), Lahm (2); Schweinsteiger (2), Khedira (2); Podolski (2), Özil (1), Müller (3); Klose (2)
1- Inglaterra: James (1); Cole (1), Terry (0), Upson (1), Johnson (1); Milner (0), Barry (0), Lampard (1), Gerrard (2); Rooney (0), Defoe (1)
Cambios : En el equipo alemán salió Trochowski (1) por Müller (72’), Gomez (1) por Klose (72') y Kiebling (1) por Özil (83’). Por los británicos jugaron Joe Cole (1) por Milner (64’), Heskey (0) por Defoe (71').
Goles: 1-0, Klose min. 22; 2-0, Podolski min. 32; 2-1, Upson min 37; 3-1, Müller min. 67; 4-1, Müller min. 70
Árbitro: Jorge Larrionda (Uruguay) (0). En Alemania fue amonestado Friedrich (47'), Birsa (79') y Dedik (81'). Por los ingleses vio la tarjeta amarilla Johnson (81’).
Incidencias: Aproximadamente 48000 espectadores en el Free State Stadium. Terreno de juego en buenas condiciones.
|
DATOS DESTACABLES | Lo mejor: El juego
Las expectativas se vieron cumplidas.
Lo peor: El juez de línea
El gol de Lampard fue muy claro.
El dato: La mayor goleada
El resultado más abultado entre estos dos equipos
|
|
Roberto Carrera / SIGLO XXI
Bienvenidos al campeonato Mundial de fútbol. Todo lo que hayan podido ver hasta ahora no ha sido más que un entrenamiento inocuo, un simple calentamiento en la banda, ante la demostración ofrecida esta tarde en Bloemfontein por dos selecciones históricas.
Alemania resuelve a su favor el quinto enfrentamiento contra los ‘pross’, y de una manera que tardará mucho en olvidarse en las Islas. Superioridad en el marcador y en el juego, con un Thomas Müller brillante que supo cubrir la poca participación de Özil durante los noventa minutos.
A pesar del empuje del ‘equipo de la rosa’, dos goles casi consecutivos en el segundo tiempo obligaron a una rendición total y veinte minutos de frustrante espera para los británicos hasta el pitido final. Inglaterra intentó solventar con coraje lo que no había logrado con su juego, y aunque pudo hacer más daño en una primera mitad sobresaliente, termina uniéndose al cada día más numeroso club de campeonas del mundo en paro.
Cuarenta y cinco minutos de soberbia locura
Fue una corriente de aire fresco en medio del desierto. Tras una primera fase mediocre, uno de los partidos más esperados no defraudó y devolvió al fútbol a los altares del deporte mundial. El primer tiempo de este encuentro es otro capítulo de oro en la historia del balompié.
Salieron temerosos, con respeto y alguna brizna de miedo, pero la historia no les iba a permitir hoy más pausa de la imprescindible. La jugada que alimentó el motor del encuentro llegó de la forma más imprevista. Manuel Neuer saca de puerta, el Jabulani vuela hacia el área contraria y el resto es trabajo de auténtico maestro. Con Terry como espectador, Miroslav Klose se hace con un balón ante el abrazo reiterado de un Upson impotente. Golazo de un hombre que debería trabajar únicamente cada cuatro años.
El tanto alemán, en posible fuera de juego, aturdió a los de Fabio Capello y revitalizó el juego bávaro. Khedira se gustó en un taconazo hacia Müller, héroe del partido, que deja a Podolski para que éste cruce en el segundo tanto de la tricampeona. Dos goles en media hora que castigaban la falta de recursos inglesa.
Pero un clásico es un evento único, inigualable e impredecible. La escuadra de los tres leones sacó su casta ante los más de 15000 compatriotas que poblaban las gradas del Free Stadium, y Upson se resarció de su fallo rematando a la red un centro medido de Gerrard. Inglaterra explotó y el huracán se hizo imparable por minutos.
Lampard rescató el fantasma de Hurst batiendo al cancerbero alemán con un tiro lejano que botó medio metro más allá de la línea de gol, pero que los colegiados no dieron por legal. La final de 1966 venía a las mentes de los aficionados teutones, que a buen seguro taparon definitivamente una herida de 44 años.
Inglaterra lo intenta, Alemania lo consigue
Se esperaba una salida en tromba del conjunto británico, pero sea por falta de fuerza o control, ésta no llegó a producirse. El partido era un ida y vuelta donde los alemanes, con ventaja en el marcador, eran claros favoritos.
Dos fallos de Barry fueron suficientes para provocar sendas contras que dejaron muerto un partido frenético. Müller, por partida doble, dejó tocado de muerte a un rival que, sabedor de su inferioridad, ya sólo esperó el final del partido.
Alemania avanza a cuartos y espera rival esta noche. El primer gran partido del Mundial ha hecho honor a dos grandes selecciones. Y lo mejor para el aficionado, es que esto no ha hecho más que empezar.