Italia se despide del Mundial tras una derrota sin precedentes. Dos goles de Vittek pusieron por delante a Eslovaquia, Di Natale redujo las diferencias y Kopunec marcó el tercero de los eslovacos. Quagliarella intentó recuperar el espíritu pero no fue suficiente. Pasaron a octavos Paraguay y Eslovaquia.
Eslovaquia mandó a casa a Italia, protagonizando una de las grandes sorpresas del Mundial (FIFA)
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| FICHA TÉCNICA | 3- Eslovaquia: Mucha (2), Pekarik (1), Skrtel (2), Durica (2), Zabavknik (2), Strba (2), Kucka (2), Hamsik (1), Vittek (3), Stoch (3), Jendrisek (1).
2- Italia: Marchetti (1), Zambrotta (1), Cannavaro (1), Chiellini (1), Criscito (1), Montolivo (1), De Rossi (1), Gattuso (2), Pepe (1), Iaquinta (1), Di Natale (2).
Cambios : Para Eslovaquia: Kopunek (2) por Strba (min. 86) y Sestak (2) por Vittek (min. 92). M. Petras (2) por Jendrisek (min. 93). Para Italia Maggio (2) por Criscito y Quagliarella (2) por Gattuso (min. 48). Pirlo (3) por Montolivo (min. 55).
Goles: 1- Vittek min. 26. 2-0 Vittek min. 73. 2-1 Di Natale min. 80. 3-1 Kopunek mi. 89. 3-2 Quagliarella min. 91
Árbitro: Howard Webb (colegio inglés) (2). Para Italia, sacó la amarilla para Cannavaro (min. 30), Chiellini (min. 68), Pepe (min. 75) y Quagliarella (min. 82). Para Eslovaquia sacó la amarilla para Strba (min.16), Vittek (min. 40) y Pekaril al minuto 49 .
Incidencias: Partido correspondiente a la tercera jornada del Grupo F. Estadio en buena condiciones.
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DATOS DESTACABLES | Lo mejor: Una Eslovaquia inesperada
Espectacular la selección eslovaca con un gran juego de ataque y que supo aprovechar cada ocasión que se propuso. Alcanzó una victoria que le garantizó el pase a octavos.
Lo peor: Falta de defensa
Los italianos hicieron un partido sin igual, cuya fragilidad defensiva fue la gran protagonista de esta selección.
El dato: Una derrota con historia
Por primera vez en cincuenta años, los italianos no lograron pasar a octavos. Volverán a casa con una derrota muy sangrienta. |
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Valentina Vannimartini/ SIGLO XXI
Italia está fuera del Mundial y vuelve a casa tras la derrota frente a Eslovaquia por 3-2. El resultado representó un partido rico en emociones y que aprueba con matrícula de honor a los eslovenos y suspende a los italianos por los múltiples errores. Los “azzurri” pierden frente a un adversario que antes del partido era último en la clasificación del grupo F, con tan solo un punto, dejándole un pase a octavos inesperado.
Nada salió como era debido. Los de Lippi empezaron con un ataque a tres protagonizado por Pepe, Iaquinta y Di Natale con ganas de luchar hasta el final y, lo demostró Di Natale justo al principio cuando irrumpió con un tiro desde lejos que no dio los resultados esperados. Pero, desde entonces Italia desapareció.
Eslovaquia ganó en posesiones de balón, tiros a puertas, acciones y goles. La defensa italiana fue tan mala que dejó entrar tres goles pésimos donde Marchetti no pudo hacer más que intentarlo. Se notó en los dos goles de Vittek que dejaron sin aliento a los italianos, demostrando la penosa defensa de los actuales campeones del mundo.
Los de Lippi destacaron por falta de coordinación, estrategia de juego y, sobre todo, por la ausencia de juego en equipo. Faltaba en particular un líder que dirigiera el ataque. El portero, de todas formas, tampoco hizo mucho. Apareció dudoso, con miedo, sin arriesgarse lo suficiente para salvar, como sea, cualquier balón demasiado cercano. Dos goles anulados para Italia no sirvieron ni para despertar el orgullo y tuvimos que esperar al minuto 80, y la entrada de Pirlo, para ver un poco de acción. Volvieron a intentarlo, pero lograron simplemente alcanzar los dos goles y volver a casa con el rabo entre las piernas.
Los protagonistas absolutos fueron ellos, los eslovacos lucharon convenciendo aunque es evidente que no esperaban en absoluto un resultado tan sorprendente. Aprovechando cada error cometido por la defensa italiana lograron un 3-2 que le sirve para pasar a octavos y demostrar los pequeños equipos pueden alcanzar grandes resultados.
El conjunto eslovaco no solo marcó un gol detrás de otro, sino que tuvo que enfrentarse también al juego físico de los “azzurri” que, no logrando resultados, se defendieron como pudieron. El peor partido de la historia de Italia que traerá consecuencias para todos: entrenador, jugadores y preparadores físicos ya se echan la culpa de la debacle sufrida.
Esquemas equivocados
La nueva formación italiana, tercera en tres partidos, se demostró peor que las anteriores. Cada jugador se equivocó en algo: nadie contraatacó, nadie luchó, nadie defendió. Lippi cambio las cartas en la segunda parte del partido, sustituiendo a Maggio por Criscito y Quagliarella por Gattuso. Además, lo intentó también con Pirlo, última oportunidad para lograr pasar a octavos. Entró él y algo cambió.
Por fin el orgullo italiano demostró existir, aparecieron los goles, el ataque y las ganas de luchar por la supervivencia. Pero fue demasiado tarde, y los campeones de Berlín 2006 no lograron ni empatar, llegando al 3-2 con mucho sacrificio. Volverán a casa con una derrota inolvidable, recordando, además, este Mundial 2010 como el primero sin victorias.