Abucheos, pitos, gritos de dimisión,… tónica constante en el Carpena en una temporada cuyo inicio fue el peor en la historia del club. Seis derrotas consecutivas que dejaron sin Copa del Rey a la afición malacitana y que han condicionado toda una temporada marcada por los altibajos y la buena recta final
Antonio Miguel García / SIGLO XXI
El único bote salvavidas que mantuvo al equipo a principio de temporada fue la Euroliga, en la que el Unicaja consiguió una holgada clasificación para el Top 16. Más tarde, otro fracaso tras quedar encuadrado en un grupo bastante asequible (CSKA Moscú, Partizan y Zalguiris) en el que tan solo pudo conseguir dos victorias.
Lógico, por tanto, que Aíto García Reneses se encontrará durante gran parte de la temporada al borde de la guillotina. A pesar de que consiguió remontar la situación, el equipo mostraba las mismas carencias y daba los mismos síntomas de un enfermo con fallo multiorgánico. Además, no le ayudaron mucho sus declaraciones sobre la no participación del equipo en la Copa del Rey en las que dijo que si no había posibilidades de ganarla no tenía importancia no ir.
Lesiones y fichajes
Dejando a un lado el escaso rendimiento de algunos fichajes o la mala dirección deportiva, las dos principales constantes en el Unicaja de esta temporada han sido las lesiones y la gran cantidad de fichajes realizados. Gomis, Saúl, Archibald, Printezis, Jiménez,... nadie se ha librado de pasar por la enfermería en una temporada aciaga que ha perjudicado y mucho la regularidad de un equipo falto de moral.
Pooh Jeter, Shammond Williams, Juan Dixon, Zabian Dowdell y Gary Neal. Ni más ni menos que cinco fichajes durante la temporada que por unas cuestiones u otras han terminado con únicamente los dos últimos en el equipo. Sin muchas opciones de que ninguno de los dos se quede para la próxima temporada el único que brilló con luz propia fue Juan Dixon, cuyo positivo por nandrolona lo alejo de la capital de la Costa del Sol en el que todavía algunos sueñan con volverlo a ver vestido de verde cuando acabe su sanción.
Próxima parada Valencia. Una eliminatoria de Play Off que se antoja emocionante e igualada en la que el club malagueño esta obligado a dar la sorpresa para maquillar una temporada desastrosa. La Euroliga está asegurada gracias a la Licencia A, lo que está en juego es el honra. Que no es poca cosa.