Gianluca Basile vivirá la cuarta Final Four de su carrera, la tercera con el Barça. El escolta italiano, de 35 años, está ante una de sus últimas posibilidades de conseguir el título y tiene claro que si no realizan un gran partido y están concentrados no podrán ganar. En 2004, con la Fortitudo Bolonia, perdió en la final ante el Maccabi de Tel Aviv. En 2006 y 2009, con el Regal Barça, se quedó en semifinales sucumbiendo ante el mismo rival, el Cska de Moscú. En 2010 espera que sea diferente.

ACB PHOTO

David Jover / SIGLO XXI

“Ganar es siempre difícil, nunca se sabe. Lo que tenemos que hacer es jugar al máximo, sin pensar qué puede pasar, si será la última Final Four o no. Tenemos que estar concentrados”, comenta. El rival que tienen en frente es muy complicado. En las dos últimas Final Four el CSKA Moscú ha sido el equipo que les ha vencido en semifinales y ahora se vuelven a ser las caras.

El jugador con más triples anotados en la historia de la Euroliga ve bien a sus compañeros e incluso entiende que les pongan el cartel de favoritos. “Veo muy bien al equipo, somos más fuertes que el año pasado. Puede que seamos favoritos porque llevamos haciéndolo bien siete meses y la gente ha podido ver que tenemos posibilidades de ganar”. Pese a ello, el italiano afirma lo que todos piensan: “Aún así es complicado, es a un solo partido y no se sabe que puede pasar. Si pierdes estás fuera”.

El año pasado el Regal Barça controló muy bien el partido durante 35 minutos pero después lo dejó escapar por culpa de la sensacional actuación que realizó Siskauskas en el último cuarto. Para Basile, una de las claves es estar muy metido en el partido. “El año pasado lo hicimos muy bien, pero sólo hasta el minuto treinta y cinco. Si no estamos concentrados los 40 minutos es complicado que se pueda ganar. Aquí no hay vuelta atrás, si pierdes el viernes estás fuera, no hay margen de error”.Una de las cosas que hay que tener claras es que no será un camino de rosas, y que si empieza mal no se puede tirar la toalla de primeras. “Hay que estar con la cabeza fría aunque estemos por debajo en el marcador, puede pasar y debemos saber jugar con eso”, afirma contundente.

Sobre la lesión, una rotura fibrilar, que le tuvo apartado diez días de las canchas, Basile cree que cuando hay una competición de este calibre se juega con o sin molestias. ”Estoy bien, aunque todavía lo noto. Cada día que pasa estoy mejor, pero lo que está claro es que cuando hay una Final Four nadie puede estar de baja, juegas al máximo”, sentencia.

Respecto a la otra semifinal, Olympiakos-Partizan, ve igualdad pero cree que los serbios pueden crear más problemas de los esperados a los griegos. “Se dice que ellos ya han hecho mucho llegando ahí, y que sólo van a disfrutar. No me lo creo mucho, han ganado en el campo del Panathinaikos y Maccabi durante la temporada y serán muy difíciles de batir”.

De lo que no hay duda es que él y sus compañeros se dejarán la piel para poderse traer la segunda Euroliga de la historia a Barcelona. Los demás equipos le ven como el favorito, la afición también. ¿Lograrán volver de París como campeones de Europa?