La primera etapa de la Vuelta a Asturias, que discurría entre Oviedo y Llanes, se decidió como estaba esperado al sprint. En esta llegada Pablo Urtasun impuso su punta de velocidad sobre Ángel Vicioso y Joaquín Sobrino.
Ricardo Alonso-Bartol / SIGLO XXI
Muy disputada ha sido la primera etapa de la Vuelta a Asturias, rodando a un ritmo muy alto. En la primera hora se recorrieron 48 kilómetros, impidiendo el gran grupo que ningún ciclista escapara de su control, pues hasta los 80 kilómetros no se conformó la fuga del día.
Esta escapada estuvo formada por Marco Corti (Footon-Servetto) y Mikel Landa (Orbea), y llegó a tener opciones de llegar a meta con ventaja manteniendo una renta de 3 minutos a 18 kilómetros de Llanes. Sin embargo, el trabajo de la Selección Española a favor de Joaquín Sobrino y del Andalucía-CajaSur para Ángel Vicioso acabó dando sus frutos.
Los dos ciclistas fueron atrapados a 8 kilómetros de meta, momento en el que comenzó a tirar el Euskaltel, que hasta entonces se había reservado sabiendo que por delante estaba uno de los ciclistas de su filial, el Orbea. En esta ocasión su trabajo si tuvo recompensa gracias a Pablo Urtasun, que superó en los últimos metros a Ángel Vicioso, mientras que el asturiano Joaquín Sobrino finalizó tercero.
En cuanto a la general, Urtasun se convierte lógicamente en el primer líder, con seis segundos de ventaja sobre Vicioso gracias a las bonificaciones, ocho sobre Sobrino y nueve sobre Rabuñal. Esta es la primera victoria de Urtasun en su trayectoria como ciclista del Euskaltel, dos años después de alzar los brazos por última vez en esta misma carrera, enrolado en las filas del Liberty portugués.