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El empresario, cada vez más, tiene que contratar personas que quieran cumplir objetivos, más allá de cumplir un horario

Racionalización de horarios ¿Es la mejor solución?

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Me alegró mucho que ayer la Ministra de Empleo, Fátima Báñez, fuera noticia por haber hablado sobre la racionalización de horarios, un tema controvertido que da mucho que hablar, pero que sin duda parece que va siendo tendencia. Hoy me gustaría reflexionar contigo sobre este tema…Por si no lo escuchaste o leíste, aquí tienes la noticia.

Racionalización de horarios, ¿por fin?…
Lo que parece y es evidente es que la racionalización de horarios nos beneficia a todos, si se lleva a cabo correctamente, claro. Por un lado nos pareceremos más a la mayor parte de economías europeas que lo están haciendo bien en productividad y calidad de vida, y por el otro, todos los que trabajan por cuenta ajena, vivirán un poco mejor.

Lo cierto es que los horarios en España tienen mucho que cambiar si queremos productividad y calidad de vida. Hoy tenemos:

Horas de entrada demasiado tarde (Más de las 8:30 es tarde cuando quieres gestionar tu productividad)
Pausa del mediodía demasiado larga (más de 45 minutos es demasiado larga)
Hora de salida demasiado tarde (más de las 17:30 es demasiado tarde). Sumado a que pocas personas salen a su hora…

En nuestro pais solemos salir tarde por tres motivos:

No hemos acabado nuestro trabajo porque durante el resto del día no hemos sabido ser produtivos (mira todas estas causas)
Nuestro jefe no se ha ido y no queremos parecer el típico trabajador que se va a su hora y ser tachado/a de “irresponsable”.
Somos el jefe y no queremos irnos a nuestra hora porque todavía hay personas trabajando y queremos dar ejemplo (he visto esto decenas de veces).

En definitiva, es una pescadilla que se muerde la cola. Generalmente no salimos tarde por un exceso de trabajo (salvo momentos puntuales), sino porque no hemos sabido ser productivos en el tiempo que disponíamos. Conozco muchas empresas con esa cultura del presencialismo, en la que si sales a tu hora eres un irresponsable, pero si pierdes el tiempo durante el resto del día no pasa nada.

Como pequeño empresario me importa bien poco cuándo Mónica, Belén o yo mismo realicemos el trabajo. Eso es cosa de cada uno. Lo único que como empresa necesitamos es cumplir unos determinados objetivos, cada uno dentro de su área de responsabilidad.

Lo único que importa es que se cumplan unos objetivos. ¿Cuándo se trabaja? Eso es una cuestión de cada uno.

Es obvio que esto lo puede hacer fácilmente un microempresario y quizás no tanto una gran empresa con todos sus sindicatos, etc…

A favor de la racionalización
Te diré por qué estoy a favor de todas las medidas que el gobierno quiera implantar en este aspecto. Principalmente estoy a favor porque sé que tarde o temprano nos llevarán a obtener más productividad y calidad de vida. Aunque en el corto plazo no va a ser así.

Sé que funcionará a largo plazo porque algunos temas hay que forzarlos un poco para que la sociedad se dé cuenta. Incluso a golpe de Decreto Ley o con penas de cualquier tipo. No nos olvidemos que en España se ha dejado de beber al volante principalmente porque en un momento dado te podían quitar el carnet de conducir o meterte en la cárcel.

Existen determinadas cuestiones en las que algo de rigidez institucional funciona mejor que mil años de pedagogía. Aunque lo ideal es lo segundo, lo primero es más efectivo en determinadas cuestiones.

Permitidme que haga un poco de malo… yo incluso lo llevaría un poco más lejos… Monitorizaría los horarios de las empresas, bajas laborales y otros aspectos que tienen que ver con la salud de los empleados, y en base a estos indicadores gravaría a estas empresas con más o menos impuestos. Hay empresas que cuestan mucho dinero a la Seguridad Social y al conjunto de la sociedad. Conozco varias.

¿Racionalizar los horarios y ya está?
El problema de nuestra productividad no se solucionará acotando el tiempo en el que tenemos que trabajar, racionalizar los horarios es sólo la parte más logística de la solución. De hecho, quizás se agrave el problema de la productividad si tan sólo racionalizamos los horarios.

No nos olvidemos que una buena parte del trabajo importante que se realiza en las empresas se hace después de la hora de salida, más que nada porque durante el día de trabajo hemos tenido demasiadas/os:

Interrupciones innecesarias (más de 50 por día)
Tareas poco relevantes.
Falta de organización y priorización.
Cafés nada productivos.


Cuando trabajaba para otros, solía entrar a la oficina entre una y dos horas antes que el resto de la plantilla. Esto hacia que pudiera sacar adelante el trabajo que, durante el día, nuestra forma de funcionar habitual no me permitía realizar. A otras personas les ocurre lo contrario, acaban quedándose hasta tarde para acabar el trabajo que no han podido hacer durante el día.

Luego están los que entran y salen a su hora, y suele ser por dos motivos.

Son muy productivos y en su horario sacan adelante todo el trabajo.
Les importa bien poco si el trabajo sale adelante.
El problema de la productividad no está en la racionalización de horarios, está en que nuestra cultura del trabajo es poco productiva.

Los operarios de las líneas de producción de cualquier empresa industrial decente nos han dado muchas lecciones con los horarios y con sacar el trabajo a tiempo, métodos como Lean, JIT y otros hacen que no se pierda demasiado el tiempo en este aspecto. Pero esto es algo que todavía en entornos de oficinas no hemos sabido hacer…

Cuando lo sepamos hacer, entonces nuestro problema con los horarios estará resuelto.

Si tan sólo nos limitamos a racionalizar los horarios y no a mejorar la productividad con métodos efectivos de gestión del tiempo y con una cultura de eficiencia dentro de la empresa, trabajaremos menos horas y seremos menos productivos. Creo que no es lo que se pretende…

Es curioso, pero justo ayer por la tarde, después de la rueda de prensa de Fátima Báñez dos nuevas empresas contactaron con nosotros para que iniciáramos dentro de sus entornos de oficinas planes de mejora de la eficiencia ¿casualidad?

Medidas que puedes tomar si eres empresario/a
Cambia los horarios ya mismo. Una hora de entrada variable entre las 7:00 y las 9:00 y una hora de salida variable entre las 16 y las 18. Cada persona decide cuándo entrar y cuando salir entre esas horas de trabajo.
Reduce el tiempo de descanso. Con 30-45 minutos tenemos tiempo de sobra para comer (Lo ideal es que esta pausa sea a las 12:30h – 13:00h).
Apaga automáticamente las luces de la oficina y enciende la alarma a las 18:15h.
Crea una cultura de eficiencia: pocas interrupciones, poco ruido, centrarse en pequeños objetivos cada día, priorizar, trabajar por slots, pocas reuniones…
Pide objetivos, no tiempo en la silla. Reúnete con tu equipo a menudo y chequea que cada persona cumple con los objetivos marcados.

¿Qué opinas sobre la racionalización de horarios?

Que tengas un gran día.

Racionalización de horarios ¿Es la mejor solución?

El empresario, cada vez más, tiene que contratar personas que quieran cumplir objetivos, más allá de cumplir un horario
Redacción
miércoles, 14 de diciembre de 2016, 00:56 h (CET)
Me alegró mucho que ayer la Ministra de Empleo, Fátima Báñez, fuera noticia por haber hablado sobre la racionalización de horarios, un tema controvertido que da mucho que hablar, pero que sin duda parece que va siendo tendencia. Hoy me gustaría reflexionar contigo sobre este tema…Por si no lo escuchaste o leíste, aquí tienes la noticia.

Racionalización de horarios, ¿por fin?…
Lo que parece y es evidente es que la racionalización de horarios nos beneficia a todos, si se lleva a cabo correctamente, claro. Por un lado nos pareceremos más a la mayor parte de economías europeas que lo están haciendo bien en productividad y calidad de vida, y por el otro, todos los que trabajan por cuenta ajena, vivirán un poco mejor.

Lo cierto es que los horarios en España tienen mucho que cambiar si queremos productividad y calidad de vida. Hoy tenemos:

Horas de entrada demasiado tarde (Más de las 8:30 es tarde cuando quieres gestionar tu productividad)
Pausa del mediodía demasiado larga (más de 45 minutos es demasiado larga)
Hora de salida demasiado tarde (más de las 17:30 es demasiado tarde). Sumado a que pocas personas salen a su hora…

En nuestro pais solemos salir tarde por tres motivos:

No hemos acabado nuestro trabajo porque durante el resto del día no hemos sabido ser produtivos (mira todas estas causas)
Nuestro jefe no se ha ido y no queremos parecer el típico trabajador que se va a su hora y ser tachado/a de “irresponsable”.
Somos el jefe y no queremos irnos a nuestra hora porque todavía hay personas trabajando y queremos dar ejemplo (he visto esto decenas de veces).

En definitiva, es una pescadilla que se muerde la cola. Generalmente no salimos tarde por un exceso de trabajo (salvo momentos puntuales), sino porque no hemos sabido ser productivos en el tiempo que disponíamos. Conozco muchas empresas con esa cultura del presencialismo, en la que si sales a tu hora eres un irresponsable, pero si pierdes el tiempo durante el resto del día no pasa nada.

Como pequeño empresario me importa bien poco cuándo Mónica, Belén o yo mismo realicemos el trabajo. Eso es cosa de cada uno. Lo único que como empresa necesitamos es cumplir unos determinados objetivos, cada uno dentro de su área de responsabilidad.

Lo único que importa es que se cumplan unos objetivos. ¿Cuándo se trabaja? Eso es una cuestión de cada uno.

Es obvio que esto lo puede hacer fácilmente un microempresario y quizás no tanto una gran empresa con todos sus sindicatos, etc…

A favor de la racionalización
Te diré por qué estoy a favor de todas las medidas que el gobierno quiera implantar en este aspecto. Principalmente estoy a favor porque sé que tarde o temprano nos llevarán a obtener más productividad y calidad de vida. Aunque en el corto plazo no va a ser así.

Sé que funcionará a largo plazo porque algunos temas hay que forzarlos un poco para que la sociedad se dé cuenta. Incluso a golpe de Decreto Ley o con penas de cualquier tipo. No nos olvidemos que en España se ha dejado de beber al volante principalmente porque en un momento dado te podían quitar el carnet de conducir o meterte en la cárcel.

Existen determinadas cuestiones en las que algo de rigidez institucional funciona mejor que mil años de pedagogía. Aunque lo ideal es lo segundo, lo primero es más efectivo en determinadas cuestiones.

Permitidme que haga un poco de malo… yo incluso lo llevaría un poco más lejos… Monitorizaría los horarios de las empresas, bajas laborales y otros aspectos que tienen que ver con la salud de los empleados, y en base a estos indicadores gravaría a estas empresas con más o menos impuestos. Hay empresas que cuestan mucho dinero a la Seguridad Social y al conjunto de la sociedad. Conozco varias.

¿Racionalizar los horarios y ya está?
El problema de nuestra productividad no se solucionará acotando el tiempo en el que tenemos que trabajar, racionalizar los horarios es sólo la parte más logística de la solución. De hecho, quizás se agrave el problema de la productividad si tan sólo racionalizamos los horarios.

No nos olvidemos que una buena parte del trabajo importante que se realiza en las empresas se hace después de la hora de salida, más que nada porque durante el día de trabajo hemos tenido demasiadas/os:

Interrupciones innecesarias (más de 50 por día)
Tareas poco relevantes.
Falta de organización y priorización.
Cafés nada productivos.


Cuando trabajaba para otros, solía entrar a la oficina entre una y dos horas antes que el resto de la plantilla. Esto hacia que pudiera sacar adelante el trabajo que, durante el día, nuestra forma de funcionar habitual no me permitía realizar. A otras personas les ocurre lo contrario, acaban quedándose hasta tarde para acabar el trabajo que no han podido hacer durante el día.

Luego están los que entran y salen a su hora, y suele ser por dos motivos.

Son muy productivos y en su horario sacan adelante todo el trabajo.
Les importa bien poco si el trabajo sale adelante.
El problema de la productividad no está en la racionalización de horarios, está en que nuestra cultura del trabajo es poco productiva.

Los operarios de las líneas de producción de cualquier empresa industrial decente nos han dado muchas lecciones con los horarios y con sacar el trabajo a tiempo, métodos como Lean, JIT y otros hacen que no se pierda demasiado el tiempo en este aspecto. Pero esto es algo que todavía en entornos de oficinas no hemos sabido hacer…

Cuando lo sepamos hacer, entonces nuestro problema con los horarios estará resuelto.

Si tan sólo nos limitamos a racionalizar los horarios y no a mejorar la productividad con métodos efectivos de gestión del tiempo y con una cultura de eficiencia dentro de la empresa, trabajaremos menos horas y seremos menos productivos. Creo que no es lo que se pretende…

Es curioso, pero justo ayer por la tarde, después de la rueda de prensa de Fátima Báñez dos nuevas empresas contactaron con nosotros para que iniciáramos dentro de sus entornos de oficinas planes de mejora de la eficiencia ¿casualidad?

Medidas que puedes tomar si eres empresario/a
Cambia los horarios ya mismo. Una hora de entrada variable entre las 7:00 y las 9:00 y una hora de salida variable entre las 16 y las 18. Cada persona decide cuándo entrar y cuando salir entre esas horas de trabajo.
Reduce el tiempo de descanso. Con 30-45 minutos tenemos tiempo de sobra para comer (Lo ideal es que esta pausa sea a las 12:30h – 13:00h).
Apaga automáticamente las luces de la oficina y enciende la alarma a las 18:15h.
Crea una cultura de eficiencia: pocas interrupciones, poco ruido, centrarse en pequeños objetivos cada día, priorizar, trabajar por slots, pocas reuniones…
Pide objetivos, no tiempo en la silla. Reúnete con tu equipo a menudo y chequea que cada persona cumple con los objetivos marcados.

¿Qué opinas sobre la racionalización de horarios?

Que tengas un gran día.

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