Una de las preguntas más frecuentes que me hacen quienes conocen que me estoy dedicando a leer el sumario del caso Gürtel es el cómo se inició la investigación de lo que podría ser el mayor caso de corrupción del Partido Popular. Pues bien, es un oscuro ex concejal del PP en Majadahonda (Madrid) imputado en la causa, José Luis Peña, quien, como suele suceder en estos casos cuando le deja de llegar dinero, se presenta, acompañado como letrado por Ángel Galindo (líder de un partido independiente de Boadilla del Monte, enfrentado con Arturo González Panero; de NN.GG. de Boadilla bajo mandato de Ginés López a alcalde del municipio), ante la Justicia. Y lo hace con unas cintas en su poder que contienen casi 18 horas de grabaciones, 15 reuniones, con miembros de la trama. Grabaciones que se realizan entre octubre de 2006 y octubre de 2007. José Luis Peña venía cobrando hasta entonces una cantidad mensual por parte de Francisco Correa, quien le estaba ayudando a crear un partido político independiente en Majadahonda, feudo del controvertido Ricardo Romero de Tejada, quien fuera, por su amistad con Rodrigo Rato, Secretario General del PP de Madrid y cuyo nombre apareció vinculado a lo que la izquierda ha dado en llamar “tamayazo”. Romero de Tejada fue sustituido en su cargo en el partido por Francisco Granados, quien también aparece en el sumario vinculado a David Marjaliza, en su día, también bajo la presidencia de Ginés López, jefe de NN.GG. de Valdemoro y concejal por el PP, que abandona en 1995 para dedicarse “full time” a sus negocios inmobiliarios.

En el origen de la denuncia que presenta Peña aparece Guillermo Ortega, en los noventa secretario general de NN.GG. de Madrid bajo la presidencia de Fernando García Rubio, ex alcalde majariego y recogido inexplicable e inexplicadamente por Esperanza Aguirre, quien lo nombra Presidente del Mercado Puerta de Toledo, cargo que abandona en 2009 cuando se destapa la trama Gürtel. “Quien tenga cualquier duda sobre las contrataciones o adjudicaciones que se hayan realizado en este Ayuntamiento desde el año 2000, lo único que le pido es que salga en este mismo momento corriendo hacia el juzgado más cercano pero que no vaya con simples comentarios sino con todas las pruebas que tenga", afirmaba el hoy imputado el 4 de febrero de 2005, día en que abandonaba la alcaldía de Majadahonda por “motivos de salud”. Hoy Willy, como lo conocen en Génova, está en libertad sin fianza e imputado en la trama de corrupción del PP por los presuntos delitos de cohecho, fraude fiscal, tráfico de influencias y blanqueo de capitales. Adjudicó en su día más de un millón de euros a las empresas de Correa y, según se desprende del sumario, podría haber cobrado más de 166.000 euros de Correa. Guillermo Ortega tenía como jefe de gabinete a María del Carmen Rodríguez, esposa de Francisco Correa. Junto a ella, José Luis Peña, ascendido de administrativo del grupo popular a asesor técnico y después de unas elecciones municipales, a concejal.

Al parecer Guillermo, “la rata” para los presuntos corruptos del Gürtel, intentó salir del cascarón de Romero de Tejada y volar solo, lo que le costó el enfrentamiento con un sector del ayuntamiento, encabezado por el hoy alcalde, Narciso de Foxá, quien dimitió como concejal de urbanismo 15 días antes de que Ortega abandonara. O al menos esa es la versión que sostiene el denunciante que inició todo este escándalo.

Por su parte, la esposa de Guillermo Ortega, según avanzo en la lectura del sumario cada vez queda más claro que el PP de Madrid se ha convertido en el feudo en donde hacen y deshacen diversas familias, Gema Matamoros, concejal en el vecino municipio de Las Rozas e histórica secretaria general de NNGG de Majadahonda, también habría adjudicado en 2002 y 2003 contratos a las empresas de la trama. Eso sí, siguiendo la estrategia de los presuntos corruptos, troceando los contratos en importes de menos de 12.000 euros. Las protestas del interventor municipal de Las Rozas de poco sirvieron. Correa se llevó la pasta. Increíblemente Gema Matamoros sigue a día de hoy ocupando su puesto como concejal de Educación así como su tenencia de alcaldía en el municipio (hay ocho tenientes de alcalde; debe ser para que cobren más) sin que el PP de Madrid o el propio alcalde roceño intervengan en absoluto. Tampoco el PSOE de Las Rozas denunció ante la Justicia los hechos cuando los conoció hace ya más de un lustro.

A partir de ahí los nombres ya conocidos, que justifican la postura de dirigente del PP como Federico Trillo cuando pedían clausurar ese chiringuito de indocumentados y fábrica de políticos profesionales que es Nuevas Generaciones. Porque, como dice Francisco Correa, en la segunda legislatura de Aznar él hacía los negocios con “gente joven que eran de Nuevas Generaciones” (Tomo 18, p. 150). Y es que Gürtel, además de lo ya sabido, es la corrupción de Nuevas Generaciones del PP. Al menos en Madrid.

Otrosí. La respuesta a mi pregunta del viernes (¿quién firmaba los ADOK?) parece haber quedado respondida. González no sólo sabía, sino que firmaba. El PSM ha pedido su imputación junto a la de otros 44 altos cargos de la Comunidad de Madrid. Según afirma Tomás Gómez, líder de los socialistas madrileños, porque estos cargos “firmaron o elaboraron” contratos “troceados” que fueron adjudicados a empresas de Correa. Como los socialistas son unos chapuceros se han limitado a copiar y pegar los nombres de las personas. Así, han metido en la lista a una persona que falleció hace ya 3 años. Ese es el nivel de la oposición.