A veces quieres cambiar el mundo, te quejas de que pocas cosas salen o son como a ti te gustaría. Caminamos como almas en pena sintiéndonos poca cosa y, más que cambiar algo, entramos en un bucle de desesperación que poco nos ayuda…

Pero hoy puede ser el día, tu día…
Hoy puede ser el día en el que, antes que cambiar el mundo, decidas cambiar algo dentro de ti.
Hoy puede ser el día en el que, en lugar de quejarte, te muevas para cambiar el status quo.
Hoy puede ser el día en el que, en lugar de criticar el trabajo de alguien, le ayudes a mejorar.

Sí, quizás ese día puede ser hoy para ti, o a lo mejor de aquí a 10, 20, 30 años…¿quién sabe? Tus maestros lo ven todo desde una perspectiva en la que no existe el tiempo. Puedes cambiar algo de ti en esta vida o puedes morir con todo ese trabajo por hacer.

“Lo bonito y doloroso de esto, es que estás viviendo tu propia película y eres tú quien decide si protagonizarla o ser tan sólo un actor/actriz secundario/a”

Si te decides por el papel principal, tienes que saber que…

Nadie te sacará de tu miseria, sólo tú lo puedes hacer.
Nadie sonreirá por tí, sólo tú te sonríes a ti mismo/a cada mañana.
Nadie logrará que hagas algo o que te motives… La motivación externa no funciona tanto como tu propia fuerza interior.

Aprende a motivarte y a reir por ti mismo.

Hoy puede ser el día en el que dejes atrás muchos de tus miedos…
Hoy puede ser el día en el que creer que el vacío al que vas a saltar, tan sólo sea tu pista de despegue, el lugar en el que se desplegarán tus alas.
Hoy puede ser el día en el que decidas plantarle cara a esa situación, decir “¡Basta!, “Lo dejo”, o por el contrario decir “Te quiero”, o besar directamente, sin decir nada…

Sí, hoy puede ser ese día…

Me pregunto si estás preparado/a para asumir el papel para el que has nacido…. o si todavía vivirás escondido/a

Que tengas un gran día.