Como cada diez de octubre se desarrollan y planifican acciones de sensibilización para así conmemorar el día mundial de la Salud Mental, esta iniciativa que parte de la Federación Mundial de la Salud Mental, reúne a más de 100 países bajo un mismo objetivo, dar a conocer los diferentes inconvenientes por los que atraviesan las personas que padecen un problema de salud mental.

Cuando hablamos de salud mental nos encontramos datos tan escalofriantes como que una de cada cuatro personas en el mundo padece un problema de salud mental. En nuestro país aproximadamente una de cada diez personas padece un problema relacionado con la salud mental.

Este año se pretende visibilizar la situación por la que atraviesan las personas que atraviesan por esta situación, así como la repercusión que acarrea en sus familias, por esa razón el lema de la campaña nos plantea: Soy como tú aunque aún no lo sepas.

Cada año se pretende conseguir que la población conozca las realidades tan complejas por las que todavía pasan estas personas, que entran en el campo del descredito personal o incluso del tabú. Debido a la repercusión social de carácter negativa con la que se identifica en determinados sectores. Sin ir más allá, la enfermedades laborales relacionadas con la salud mental siguen teniendo una connotación negativa, muy relacionadas con el engaño o la propia holgazanería. Lo que hace que la persona que atraviesa por esta situación se sienta poco acompañada e incluso en algunos casos sienta que está siendo poco considerado con los compañeros de trabajo.

Eso hace que muchas personas y familias escondan dicha información evitando hablar abiertamente sobre salud mental y los problemas que esta acarrea. Esta falta de empatía social repercute en que las personas acudan en búsqueda de ayuda, e incluso la sociedad, las organizaciones y empresas aúnen fuerzas para desarrollar acciones destinadas a potenciar la prevención, promocionando la salud mental positiva.

Sin lugar a dudas debemos de sensibilizar para evitar la falta de información que activa estereotipos, prejuicios y leyendas urbanas acerca de la salud mental y las personas que padecen sus consecuencias. Esos mitos que ha generado la población son frenos que impiden la normalización de los problemas de salud mental, que impiden que las personas hablen abiertamente de sus problemas e incluso que acudan a los servicios para poner remedio a los mismos. Pero vamos aún más allá, esa empatía social facilitaría a las familias que acudieran a asociaciones o incluso luchar por que se generaran recursos que tengan como finalidad el acompañar a las personas con dificultadas y problemas de salud mental.

Haciendo referencia al título de un libro del neurocientífico Francisco Mora: ¿Enferman las mariposas del alma? Estas mariposas que en ocasiones revolotean a su antojo, no pueden estigmatizar y marcar a las personas, cada persona con un trastorno mental, con un problema de salud mental es como tú, aunque tú no lo sepas.