El Real Madrid ha demostrado esta tarde su condición de máximo favorito al título junto al Barcelona imponiéndose al Cajasol por veinte puntos de diferencia, en el encuentro inaugural del campeonato. El gran acierto en el tiro de los jugadores blancos y la desidia mostrada por los de Plaza en la primera mitad dejaron el partido sentenciado ya en el descanso

FICHA TÉCNICA 56- Cajasol: Calloway (7), Ellis (8), Kirksay (10), Asselin (1), Triguero (4) -cinco inicial- Cabanas, D. Lorbek (5), Satoransky, Sastre (1), Savanovic (7), Miso (7) y Xavi Rey (6). 76- Real Madridl: Prigioni (2), Bullock (10), Vidal (3), Garbajosa (5), Lavrinovic (13) -cinco inicial- Kaukenas (21), Velickovic (4), Hervelle (4), Dasic y Llull (14). Parciales: 11-26, 12-19, 8-14 y 25-17. Árbitros: Francisco de la Maza, Vicente Bultó y Miguel Ángel Pérez Niz (2). Incidencias: Partido disputado en el Palacio de los Deportes/Velódromo de Dos Hermanas (Sevilla). Unos ¾ largos de entrada. DATOS DESTACABLES El mejor: Kaukenas Casi sin hacer ruido, 6 de 6 en tiros de 2 y 3 de 6 en triples para 21 puntos en total. Lo peor: La desidia defensiva del Cajasol Pese a que Joan Plaza atribuyó el desastre de su equipo en los dos primeros cuartos al exceso de deseo, lo cierto es que durante ese tiempo se observó cierta dejadez en defensa que, en manos del Madrid, resultó mortal de necesidad. La clave: Además de la falta de intensidad local, el fuerte ritmo impuesto por el Madrid durante los primeros 20 minutos. “Made in Messina”. El dato: El Cajasol comenzó la segunda parte sin calentar. De tal magnitud debió ser la bronca de Joan Plaza en el descanso, que su equipo hizo acto de presencia en la pista cuando quedaban segundos para reanudarse el juego.

Víctor Díaz Sánchez / Diario Siglo XXI

Los jugadores madridistas empezaron a toda marcha ante un Cajasol al que la siesta se le estaba alargando más de lo debido. Ya en la primera jugada Bullock clavó un triple que no fue sino una muestra de lo que iba a suceder durante el desarrollo del partido. El manual de Messina, como todos ya sabemos, suele incluir como característica principal una fuerte defensa y rápidos contraataques cada vez que sus equipos tienen oportunidad para ello, y eso precisamente fue lo que impuso el Madrid durante los primeros minutos.

Con Prigioni asfixiantemente encima de Calloway, con Bullock ametrallando el aro cajista y con rápidos contraataques el Madrid rápidamente alcanzó una ventaja de 7-15 en el minuto siete, lo que obligó a Plaza a pedir su primer tiempo muerto para intentar frenar aquello. En vano. Su equipo no despertaba y el relevo de Bullock lo cogieron los dos mejores jugadores del partido, Llull y Kaukenas, que habían salido desde el banquillo. Cada canasta del Cajasol se la tenían que labrar los jugadores de Plaza a pico y pala, mientras que por parte visitante un canastón de Llull con tiro libre adicional hizo que al final del primer cuarto su equipo dejara prácticamente sentenciado el partido.

En el segundo cuarto la ventaja blanca llegó a la veintena -20 a 40 en el minuto 15-, después de que Llull, Garbajosa y Kaukenas continuaran machacando la canasta local a base de triples; mientras que la estrella del Cajasol, Asselin, logró su primer y único punto del partido en el minuto 18, todo un síntoma de lo que sucedía en la cancha. El pívot dominicano “se borró” del partido en el tercer cuarto, al cometer tres faltas personales consecutivas que le llevaron a ponerse con cuatro; y su pésimo partido fue otra de las claves para que su equipo se llevara una sonora derrota. Ni tan siquiera la entrada del internacional esloveno Domen Lorbek sirvió de revulsivo para los cajistas.

Al descanso la ventaja blanca era de 22 puntos -23 a 45-, y Joan Plaza debió explayarse bastante con sus pupilos, porque éstos no aparecieron sobre la cancha prácticamente hasta que los árbitros se disponían a dar por reanudado el choque. No era para menos, ya que hasta ese momento lo único bueno de su equipo estaban siendo sus “cheer leaders”.

Durante el tercer cuarto al menos el Cajasol consiguió frenar un poco la sangría de puntos en contra, aunque en ataque continuó tan mal como hasta entonces. El segundo tiempo sirvió para que el lituano Lavrinovic –Messina sorprendió con su inclusión en el quinteto inicial del partido, aunque solamente lo mantuvo en cancha de primeras tres minutos- fuera adquiriendo dosis de confianza de cara a próximos compromisos, y para que los locales mostraran un poco de orgullo, consiguiendo maquillar el marcador en los últimos diez minutos, con un Kirksay que fue el mejor de su equipo, y casi el único que dio la cara en un pésimo partido de un Cajasol que contaba con esta derrota, pero no de esta forma. Lo más destacado de los últimos minutos fue la lesión en un tobillo de Prigioni, que podría sumarse a la lista de bajas del Madrid, aunque en principio su torcedura no parece nada realmente grave.

SALA DE PRENSA

Ettore Messina (Técnico Real Madrid) ” Hemos defendido muy bien los bloqueos directos e indirectos, y en ataque hemos movido el balón muy bien aprovechando las penetraciones y pases al lado contrario, teniendo muy buen porcentaje de tiro. Estoy muy contento por nuestros aficionados, porque tras el partido contra Utah estaban un poco desanimados”.

Joan Plaza (Técnico Cajasol) “Es evidente que no hemos dado la imagen que nos hemos ido cultivando durante este mes y medio. Es posible que haya habido un exceso de deseo, de ganas, de competir contra un equipo que, teóricamente, va a pelear por ganarlo todo, y quizá nos hemos pasado de vueltas. De cada diez partidos contra ellos quizá debamos perder ocho y ganar sólo dos, uno por sorpresa y otro porque te lo merezcas, pero es evidente que la diferencia final no se corresponde con el tipo de trabajo hecho durante la pretemporada. Ellos han sido mejores, han sido más duros, han tenido una eficacia de tres que quiero que recordéis durante toda la temporada, y no tengo nada que apelar".