Se ha dicho y escrito tanto del aborto que parecía haberse tocado techo en la reprobación de tan aborrecible crimen, por más que leyes injustas lo admitan.

Hasta hoy, no había leído ni oído nada parecido a lo que un médico barcelonés, el Dr.José María Simón Castellví, presidente de la Federación Internacional de las Asociaciones de Médicos Católicos (FIAMC) afirma según publica la revista Ave María nº791, en una entrevista concedida a ACI Prensa. El Dr. Simón calificó “el aborto como misa del diablo”.Copio literalmente su explicación:

“Hay un paralelismo entre una Misa católica y una misa negra ordinaria, que sería el aborto, porque hay un oferente que es el médico colegiado abortista, hay una víctima que es el niño, hay otra víctima que es la inocencia de la madre y hay un altar que sería la mesa del quirófano…En esta misa no se eleva a la víctima, como nosotros elevamos al Señor. En el aborto, el producto de la concepción se tira a la basura y no se quiere mirar. El dinero que se adquiere de este aborto correspondería al estiércol del diablo”.

Cada año en el mundo el aborto quirúrgico acaba con la vida de más de 45 millones de personas, una cifra que equivaldría a toda la población española. El Dr. Simón deploró la muerte de estos niños y señaló sin ambages que son “víctimas que el diablo gana”. Además denunció que el aborto quirúrgico es una práctica despiadada y muy cruenta” que consiste en abrir con una especie de abrelatas el vientre de la madre, inyectar un liquido amniótico para quemar al niño y triturar sus huesos, incluida la cabeza para que salga más fácilmente del útero de la mujer. “Es crudo oírlo, pero es así” lamentó. Sin comentario.