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Xabier López de Armentia

¿Por qué hay tantos partidos políticos en Euskadi?

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Cuando comparas Euskadi con España, Portugal o Francia, te das cuenta que el espectro político de Euskadi cuenta con muchos más partidos políticos que sus vecinos. La razón de fenómeno inusual en el seno de la vieja Europa mediterránea tiene su lógica: la cohabitación de dos discursos.

Si nos fijamos, en la actualidad, existen 7 partidos políticos con representación en el Parlamento Vasco (PNV, PSOE, PP, Aralar, EA, Ezker Batua (IU), y UPyD), a los que tendríamos que sumar la presencia de un octavo, Batasuna, ilegalizado por el momento. Si al actual marco de representación consolidada que existe, unimos la escisión surgida del seno de Ezker Batua hace un par de meses, “Alternativa Eraikitzen”, y la reciente escisión de EA, formada bajo el nombre de “Alkarbide”, nos encontramos con un espectro político repleto de formaciones políticas, muchas de ellas pivotando sobre idénticos planteamientos ideológicos. Por si fueran pocos partidos políticos, al igual que pocos los matices, se rumorea que Aralar puede sufrir una escisión en los próximos meses.

Desde el plano ideológico nos encontramos hasta con 6 formaciones que ocupan prácticamente el mismo espacio en el tablero. “Alkarbide”, la escisión de EA aspira a ser un partido meramente institucional, tecnócrata a la izquierda del PNV, que no de izquierdas, además de ser su principal socio en coaliciones electorales futuras.

A su lado, se encuentra “Alternativa Eraikitzen”: un movimiento surgido por la inconformidad de un sector dentro de Ezker Batua, con la gestión y el rumbo del partido en los últimos años, (pactos con los nacionalistas vascos), aunque curiosamente se autodefinen como soberanistas vascos de izquierdas. Una de dos, o estamos ante un nuevo ejercicio de hipocresía barata, o sencillamente están buscando pescar votos en un estanco que no les correspondería.

A la izquierda de estas dos formaciones nos encontramos con EA, un partido, parece ser por fin saneado por dentro y con rumbo fijo hacia la construcción de un polo soberanista y las políticas de izquierdas en clave nacional vasca.

A su lado, pero con mejor coeficiente electoral, se encuentra Aralar. Un partido joven, que goza de un buen momento político, aunque parece ser que con problemas internos, que pueden hacer que la subida vertiginosa de Aralar se convierta en una simple burbuja que el paso de los meses termine desinflando. Se rumorea, que existe una gran desconexión entre Patxi Zabaleta y las bases del partido. Una desconexión originada a partir del, al parecer, deseo manifiesto de Zabaleta de encontrar acomodo en un futurible Gobierno Vasco encabezado por el PNV. Esto supondría renunciar a parte de sus objetivos, aunque no necesariamente dialécticamente hablando.

Si al final, se confirman los rumores de ruptura dentro de Aralar, la situación del mapa político en Euskadi cambiaria sustancialmente, al encontrar un partido más, muy cercano al PNV, tal y como va a ser “Alkarbide”, y su escisión de este (Aralar) mucho más alejada de ese eje y centrada en la independencia del pueblo vasco bajo un régimen político de izquierdas.

A ambos lados de todo este embrollo de siglas y partidos se encuentran expectantes como no, el PNV y Batasuna. Los dos partidos políticos que cierran el espacio abertzale.

A este “coto” abertzale debemos sumar los partidos PSOE, PP, Ezker Batua, y UPyD, para completar el tablero político de Euskadi en lo que a partidos políticos se refiere.

He empezado el artículo lanzando una pregunta. ¿Por qué en Euskadi existen tantos partidos políticos? La respuesta es sencilla, aunque estoy seguro que a más de uno, debido a sus convicciones ideológicos, le costará entenderla, o por lo menos respetarla como argumento válido.

En Euskadi existe un fenómeno bipolar en cuanto a la política se refiere. Simplificando el fenómeno, y llevándolo al terreno coloquial es como un liga de fútbol, mejor dicho, son dos ligas de fútbol completamente diferentes, cuyos resultados no tienen nada que ver la una con la otra.

En una liga, en clave estatal y españolista, juegan 3 partidos políticos, El PSOE, el PP y el PNV (también es necesario meter en esta liga a UPyD y a Ezker Batua (IU)). Estos aspiran a controlar Euskadi desde el prisma estatal, y entre ellos dan por bueno el establecimiento de una liga, donde los dos partidos principales de España y el principal de Euskadi juegan a ver quién es capaz de establecer la hegemonía del discurso en estas tierras.

En la otra liga, en clave nacional vasca se encuentra el resto de partidos políticos, (EA, Aralar, Batasuna, “Alternativa Eraikitzen”, y “Alkarbide”), que interiorizan desde su creación como partidos políticos el ámbito nacional vasco como el único, es decir, sólo creen en la existencia de una “liga”, En esta “liga” es evidente que no podemos quitar al PNV, y por tanto seria el único partido político que juega en las dos “ligas”. Aquella teoría del Péndulo Patriótico, cobra significado con estas palabras. Posiblemente esta cohabitación en ambas “ligas” es la que le ha permitido a lo largo de los años permanecer en el poder y ostentar el discurso hegemónico (y si no hubiera sido ilegalizada D3M, el PNV seguiría ostentando el discurso hegemónico en el Parlamento Vasco).

La cuestión es que para EA, Aralar, Batasuna y demás formaciones antes mencionadas, la construcción de Euskal Herria como nación es su leitmotiv único, y por tanto no conciben la estructura de Euskadi dentro de España.

Consigamos abstraernos de la realidad y pensemos por un momento que Euskadi es un Estado independiente. En el momento que eso ocurriese el cleavage de “abertzale” desaparecería y cobraría sentido el cleavage Izquierda/derecha, haciendo que cada partido abertzale ocuparía su lugar en el espectro ideológico.

El PNV sería la derecha del país, lo que hoy puede encarnar con claridad el PP. Alkarbide, y Aralar, si sufre al final su escisión, serian los partidos de centro (PSOE), beligerantes con la derecha y con la izquierda, lo denominado en Europa, partidos bisagra, mientras que EA, Alternativa Eraikitzen, Batasuna y la escisión de Aralar ocuparían el espacio de izquierdas.

La clave de esta exposición está en comprender que existen dos formas muy diferentes de plantear la lucha política. Dos prismas desde los cuales entender el problema vasco y a fin de cuentas, su estructura.

De todas maneras, creo humildemente, que hasta la futurible llegada de la creación de un Estado vasco, muchos de estos partidos deberían juntarse entre ellos a modo de federación (un claro ejemplo lo tenemos en CiU: Convergencia y Unió, dos partidos federados en uno), para luchar con el continuo y incesante empeño de los políticos de acabar con el multipartidismo e implantar un sistema bipolar que haga asegurarse a unos y a otros la alternancia en el poder.

El PSOE y el PP, pertenecientes a la otra “liga”, buscan a través del sistema bipolar no sólo asegurarse el poder, sino acabar con la otra “liga” y desterrar de la discusión política el mero hecho de la creación de un Estado vasco. Dos pájaros de un tiro.

¿Por qué hay tantos partidos políticos en Euskadi?

Xabier López de Armentia
Lectores
lunes, 8 de junio de 2009, 00:50 h (CET)
Cuando comparas Euskadi con España, Portugal o Francia, te das cuenta que el espectro político de Euskadi cuenta con muchos más partidos políticos que sus vecinos. La razón de fenómeno inusual en el seno de la vieja Europa mediterránea tiene su lógica: la cohabitación de dos discursos.

Si nos fijamos, en la actualidad, existen 7 partidos políticos con representación en el Parlamento Vasco (PNV, PSOE, PP, Aralar, EA, Ezker Batua (IU), y UPyD), a los que tendríamos que sumar la presencia de un octavo, Batasuna, ilegalizado por el momento. Si al actual marco de representación consolidada que existe, unimos la escisión surgida del seno de Ezker Batua hace un par de meses, “Alternativa Eraikitzen”, y la reciente escisión de EA, formada bajo el nombre de “Alkarbide”, nos encontramos con un espectro político repleto de formaciones políticas, muchas de ellas pivotando sobre idénticos planteamientos ideológicos. Por si fueran pocos partidos políticos, al igual que pocos los matices, se rumorea que Aralar puede sufrir una escisión en los próximos meses.

Desde el plano ideológico nos encontramos hasta con 6 formaciones que ocupan prácticamente el mismo espacio en el tablero. “Alkarbide”, la escisión de EA aspira a ser un partido meramente institucional, tecnócrata a la izquierda del PNV, que no de izquierdas, además de ser su principal socio en coaliciones electorales futuras.

A su lado, se encuentra “Alternativa Eraikitzen”: un movimiento surgido por la inconformidad de un sector dentro de Ezker Batua, con la gestión y el rumbo del partido en los últimos años, (pactos con los nacionalistas vascos), aunque curiosamente se autodefinen como soberanistas vascos de izquierdas. Una de dos, o estamos ante un nuevo ejercicio de hipocresía barata, o sencillamente están buscando pescar votos en un estanco que no les correspondería.

A la izquierda de estas dos formaciones nos encontramos con EA, un partido, parece ser por fin saneado por dentro y con rumbo fijo hacia la construcción de un polo soberanista y las políticas de izquierdas en clave nacional vasca.

A su lado, pero con mejor coeficiente electoral, se encuentra Aralar. Un partido joven, que goza de un buen momento político, aunque parece ser que con problemas internos, que pueden hacer que la subida vertiginosa de Aralar se convierta en una simple burbuja que el paso de los meses termine desinflando. Se rumorea, que existe una gran desconexión entre Patxi Zabaleta y las bases del partido. Una desconexión originada a partir del, al parecer, deseo manifiesto de Zabaleta de encontrar acomodo en un futurible Gobierno Vasco encabezado por el PNV. Esto supondría renunciar a parte de sus objetivos, aunque no necesariamente dialécticamente hablando.

Si al final, se confirman los rumores de ruptura dentro de Aralar, la situación del mapa político en Euskadi cambiaria sustancialmente, al encontrar un partido más, muy cercano al PNV, tal y como va a ser “Alkarbide”, y su escisión de este (Aralar) mucho más alejada de ese eje y centrada en la independencia del pueblo vasco bajo un régimen político de izquierdas.

A ambos lados de todo este embrollo de siglas y partidos se encuentran expectantes como no, el PNV y Batasuna. Los dos partidos políticos que cierran el espacio abertzale.

A este “coto” abertzale debemos sumar los partidos PSOE, PP, Ezker Batua, y UPyD, para completar el tablero político de Euskadi en lo que a partidos políticos se refiere.

He empezado el artículo lanzando una pregunta. ¿Por qué en Euskadi existen tantos partidos políticos? La respuesta es sencilla, aunque estoy seguro que a más de uno, debido a sus convicciones ideológicos, le costará entenderla, o por lo menos respetarla como argumento válido.

En Euskadi existe un fenómeno bipolar en cuanto a la política se refiere. Simplificando el fenómeno, y llevándolo al terreno coloquial es como un liga de fútbol, mejor dicho, son dos ligas de fútbol completamente diferentes, cuyos resultados no tienen nada que ver la una con la otra.

En una liga, en clave estatal y españolista, juegan 3 partidos políticos, El PSOE, el PP y el PNV (también es necesario meter en esta liga a UPyD y a Ezker Batua (IU)). Estos aspiran a controlar Euskadi desde el prisma estatal, y entre ellos dan por bueno el establecimiento de una liga, donde los dos partidos principales de España y el principal de Euskadi juegan a ver quién es capaz de establecer la hegemonía del discurso en estas tierras.

En la otra liga, en clave nacional vasca se encuentra el resto de partidos políticos, (EA, Aralar, Batasuna, “Alternativa Eraikitzen”, y “Alkarbide”), que interiorizan desde su creación como partidos políticos el ámbito nacional vasco como el único, es decir, sólo creen en la existencia de una “liga”, En esta “liga” es evidente que no podemos quitar al PNV, y por tanto seria el único partido político que juega en las dos “ligas”. Aquella teoría del Péndulo Patriótico, cobra significado con estas palabras. Posiblemente esta cohabitación en ambas “ligas” es la que le ha permitido a lo largo de los años permanecer en el poder y ostentar el discurso hegemónico (y si no hubiera sido ilegalizada D3M, el PNV seguiría ostentando el discurso hegemónico en el Parlamento Vasco).

La cuestión es que para EA, Aralar, Batasuna y demás formaciones antes mencionadas, la construcción de Euskal Herria como nación es su leitmotiv único, y por tanto no conciben la estructura de Euskadi dentro de España.

Consigamos abstraernos de la realidad y pensemos por un momento que Euskadi es un Estado independiente. En el momento que eso ocurriese el cleavage de “abertzale” desaparecería y cobraría sentido el cleavage Izquierda/derecha, haciendo que cada partido abertzale ocuparía su lugar en el espectro ideológico.

El PNV sería la derecha del país, lo que hoy puede encarnar con claridad el PP. Alkarbide, y Aralar, si sufre al final su escisión, serian los partidos de centro (PSOE), beligerantes con la derecha y con la izquierda, lo denominado en Europa, partidos bisagra, mientras que EA, Alternativa Eraikitzen, Batasuna y la escisión de Aralar ocuparían el espacio de izquierdas.

La clave de esta exposición está en comprender que existen dos formas muy diferentes de plantear la lucha política. Dos prismas desde los cuales entender el problema vasco y a fin de cuentas, su estructura.

De todas maneras, creo humildemente, que hasta la futurible llegada de la creación de un Estado vasco, muchos de estos partidos deberían juntarse entre ellos a modo de federación (un claro ejemplo lo tenemos en CiU: Convergencia y Unió, dos partidos federados en uno), para luchar con el continuo y incesante empeño de los políticos de acabar con el multipartidismo e implantar un sistema bipolar que haga asegurarse a unos y a otros la alternancia en el poder.

El PSOE y el PP, pertenecientes a la otra “liga”, buscan a través del sistema bipolar no sólo asegurarse el poder, sino acabar con la otra “liga” y desterrar de la discusión política el mero hecho de la creación de un Estado vasco. Dos pájaros de un tiro.

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