El expresidente de la Generalitat y líder de CDC, Artur Mas, ha interpretado este lunes que el presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, no ha querido recibir al presidente catalán, Carles Puigdemont, por la "presión muy dura" que el Estado ejerce sobre mandatarios internacionales.
En rueda de prensa tras el Comité Ejecutivo de CDC, el presidente del partido ha afirmado: "Utilizan todas las armas que tiene a su alcance para presionar a todo el mundo de mala manera para evitar que los catalanes soberanistas seamos escuchados".
Mas ha expuesto que el Estado ejerce esta presión porque se siente inseguro y es incapaz de ofrecer un proyecto alternativo a los catalanes que sea mejor que el proyecto soberanista, y ha ironizado con que el Gobierno central tiene acostumbrados a los catalanes a ser "el campeón de la buena democracia".
El expresidente catalán ha argumentado que la actitud de Juncker no significa que la UE no quiera escuchar y dialogar sobre las demandas soberanistas, sino que la presión del Estado les obliga a no poder significarse demasiado: "Intentan nadar y guardar la ropa", ha concluido sobre los mandatarios europeos.
También ha explicado que, antes de la irrupción del proceso soberanista, era "relativamente fácil que te recibieran al máximo nivel", y ha recordado que él mismo, en su primer mandato como presidente de la Generalitat, fue recibido por el entonces presidente de la CE José Manuel Durao Barrosso --fue en 2011--.
El expresidente de la Generalitat y líder de CDC, Artur Mas, ha interpretado este lunes que el presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, no ha querido recibir al presidente catalán, Carles Puigdemont, por la "presión muy dura" que el Estado ejerce sobre mandatarios internacionales.
En rueda de prensa tras el Comité Ejecutivo de CDC, el presidente del partido ha afirmado: "Utilizan todas las armas que tiene a su alcance para presionar a todo el mundo de mala manera para evitar que los catalanes soberanistas seamos escuchados".
Mas ha expuesto que el Estado ejerce esta presión porque se siente inseguro y es incapaz de ofrecer un proyecto alternativo a los catalanes que sea mejor que el proyecto soberanista, y ha ironizado con que el Gobierno central tiene acostumbrados a los catalanes a ser "el campeón de la buena democracia".
El expresidente catalán ha argumentado que la actitud de Juncker no significa que la UE no quiera escuchar y dialogar sobre las demandas soberanistas, sino que la presión del Estado les obliga a no poder significarse demasiado: "Intentan nadar y guardar la ropa", ha concluido sobre los mandatarios europeos.
También ha explicado que, antes de la irrupción del proceso soberanista, era "relativamente fácil que te recibieran al máximo nivel", y ha recordado que él mismo, en su primer mandato como presidente de la Generalitat, fue recibido por el entonces presidente de la CE José Manuel Durao Barrosso --fue en 2011--.
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad registraron durante 2023 un total de 24.581 denuncias por desaparición que corresponden a 15.126 personas diferentes, según el balance difundido por el Ministerio del Interior. El titular del departamento, Fernando Grande-Marlaska, ha anunciado que el ministerio va a empezar a prestar atención psicológica gratuita a los familiares de las personas desaparecidas.
Actualmente, cuando despiden a una persona trabajadora de manera improcedente, ya sea porque se carece de una justificación legal o porque no se ajusta a la legislación vigente, ésta recibe una compensación económica que se establece en 33 días de salario por año trabajado con prorrateo mensual para periodos inferiores a un año y hasta un límite de 24 mensualidades. Pero los sindicatos han considerado que esta indemnización es muy baja.
En la actualidad, la evolución de la tecnología y el acceso a internet han abierto un abanico de posibilidades, no sólo para los adultos sino también para los más pequeños. Un smartphone permite realizar cualquier gestión o transacción en apenas unos segundos y, según datos del INE, siete de cada diez niños de entre 10 y 15 años disponen de un teléfono móvil.