Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Productividad
Etiquetas | Un lugar llamado desarrollo | Coaching
Las personas en estas empresas son lo que son, no lo que podrían llegar a ser

La cultura de liderazgo en las empresas

|

En cada empresa existe una culura de liderazgo. Esa cultura impregna el clima, la motivación y la sensación de las personas cuando están en el proyecto… y por lo tanto los resultados… Hoy me gustaría contarte algo más sobre esta cultura y cómo condiciona el éxito de una empresa.

Las culturas del liderazgo
Cuando hablé de las tres fases del liderazgo organizacional me refería exáctamente a esto, a la evolución que han tenido las culturas de liderazgo en las empresas, y al tipo de cultura que hoy necesitaríamos para lograr excelentes resultados.

No me extenderé en explicarte estas fases o culturas, porque puedes leer más a fondo sobre ello en el artículo mencionado y también ver el video al final de este post. Pero te quería hablar de las ventajas y desventajas de cada cultura de liderazgo, siendo hoy más sintético y afilado.

Cultura de autoridad
La principal ventaja es que es rápida.

Las desventajas son muchas:

En estas empresas, el talento que se queda, es mediocre o se encuentra secuestrado por una hipoteca y tres hijos que mantener. El resto de personas se van.
Los problemas se esconden debajo de la alfombra y afloran más adelante provocando muchos daños.
En las culturas de autoridad, cualquier intervención de coaching o formación que amplie la conciencia de las personas acabará por hacer que los mejores salgan de la organización, o los que tienen más opciones.
En la cultura de autoridad, lo principal es el miedo. Se dirige en base a impulsos, todo depende de cómo haya venido hoy el jefe.
La desmotivación y desvinculación con el proyecto es visible, y las personas critican a la dirección en cualquier conversación.
Mi teoría es que en pocos años veremos como la administración pública (si se reinventa, claro está) penalizará a estas empresas vía multiples formas. Algunas empresas nos cuestan mucho dinero teniendo en cuenta los daños colaterales de su cultura de autoridad. Bajas laborales, estrés, enfermedades coronarias, etcétera.

Conozco a una empresa de 500 empleados en el que el 33% de la plantilla se medica. Eso dice mucho de cómo es su cultura.

Estos líderes no están preparados para los entornos en los que estamos y estaremos en breve.

Cultura de resultados
La ventaja principal es que es efectiva, especialmente en el medio plazo.
En estas culturas las personas trabajan más o menos felices y satisfechas.
Hay algunas personas que tiran mucho del carro y otras que hacen su trabajo simplemente.
Se pone el énfasis en el resultado, en el “qué”, sin importar tanto el “cómo”.
Tienen procesos, procedimientos y métodos muy efectivos. Son excelentes con los resultados.
Su mirada está puesta en el presente, no tanto en gestionar o liderar el futuro.
Suelen ser esclavos de alguien, generalmente de un gran cliente del que dependen todos sus ingresos. No tienen libertad ni apuestan por un futuro distinto. Tienen que romper la esclavitud de tanta orientación a resultados para empezar a hacer cosas nuevas, a mirar desde otro ángulo.

En estas culturas los que tienen mucho potencial acaban por irse, por una simple razón, la empresa no cumple con sus expectativas de desarrollo.

Las personas en estas empresas son lo que son, no lo que podrían llegar a ser.

Cultura de desarrollo
En estas empresas para tener éxito al liderar tienes que cumplir dos condiciones: Resultados x Desarrollo = Éxito.

Es una cultura que piensa en el largo plazo, en lo que podemos llegar a ser.

En estas empresas se piensa que si las personas son mejores cada día, nos ayudarán a ser mejores, y por lo tanto invertimos en el desarrollo profesional y personal de las personas.

Se invierte mucho en formación, en desarrollo, en ayudar a las personas a ser mejores.

Cuando las personas se van de la organización a hacer otros proyectos personales o profesionales se les aplaude y se les felicita. Es maravilloso ver cómo otros crecen.

No nos preocupa tanto el presente como el futuro.

La desventaja es que es más lenta que el resto de culturas. La autoridad siempre es más rápida que el desarrollo.

La órden siempre es más rápida que la pregunta.

Aunque la segunda sea más efectiva en el largo plazo.

Y mi pregunta para ti hoy es ¿en qué tipo de empresa te gustaría trabajar?

Que tengas un gran día

La cultura de liderazgo en las empresas

Las personas en estas empresas son lo que son, no lo que podrían llegar a ser
César Piqueras
sábado, 19 de marzo de 2016, 12:04 h (CET)
En cada empresa existe una culura de liderazgo. Esa cultura impregna el clima, la motivación y la sensación de las personas cuando están en el proyecto… y por lo tanto los resultados… Hoy me gustaría contarte algo más sobre esta cultura y cómo condiciona el éxito de una empresa.

Las culturas del liderazgo
Cuando hablé de las tres fases del liderazgo organizacional me refería exáctamente a esto, a la evolución que han tenido las culturas de liderazgo en las empresas, y al tipo de cultura que hoy necesitaríamos para lograr excelentes resultados.

No me extenderé en explicarte estas fases o culturas, porque puedes leer más a fondo sobre ello en el artículo mencionado y también ver el video al final de este post. Pero te quería hablar de las ventajas y desventajas de cada cultura de liderazgo, siendo hoy más sintético y afilado.

Cultura de autoridad
La principal ventaja es que es rápida.

Las desventajas son muchas:

En estas empresas, el talento que se queda, es mediocre o se encuentra secuestrado por una hipoteca y tres hijos que mantener. El resto de personas se van.
Los problemas se esconden debajo de la alfombra y afloran más adelante provocando muchos daños.
En las culturas de autoridad, cualquier intervención de coaching o formación que amplie la conciencia de las personas acabará por hacer que los mejores salgan de la organización, o los que tienen más opciones.
En la cultura de autoridad, lo principal es el miedo. Se dirige en base a impulsos, todo depende de cómo haya venido hoy el jefe.
La desmotivación y desvinculación con el proyecto es visible, y las personas critican a la dirección en cualquier conversación.
Mi teoría es que en pocos años veremos como la administración pública (si se reinventa, claro está) penalizará a estas empresas vía multiples formas. Algunas empresas nos cuestan mucho dinero teniendo en cuenta los daños colaterales de su cultura de autoridad. Bajas laborales, estrés, enfermedades coronarias, etcétera.

Conozco a una empresa de 500 empleados en el que el 33% de la plantilla se medica. Eso dice mucho de cómo es su cultura.

Estos líderes no están preparados para los entornos en los que estamos y estaremos en breve.

Cultura de resultados
La ventaja principal es que es efectiva, especialmente en el medio plazo.
En estas culturas las personas trabajan más o menos felices y satisfechas.
Hay algunas personas que tiran mucho del carro y otras que hacen su trabajo simplemente.
Se pone el énfasis en el resultado, en el “qué”, sin importar tanto el “cómo”.
Tienen procesos, procedimientos y métodos muy efectivos. Son excelentes con los resultados.
Su mirada está puesta en el presente, no tanto en gestionar o liderar el futuro.
Suelen ser esclavos de alguien, generalmente de un gran cliente del que dependen todos sus ingresos. No tienen libertad ni apuestan por un futuro distinto. Tienen que romper la esclavitud de tanta orientación a resultados para empezar a hacer cosas nuevas, a mirar desde otro ángulo.

En estas culturas los que tienen mucho potencial acaban por irse, por una simple razón, la empresa no cumple con sus expectativas de desarrollo.

Las personas en estas empresas son lo que son, no lo que podrían llegar a ser.

Cultura de desarrollo
En estas empresas para tener éxito al liderar tienes que cumplir dos condiciones: Resultados x Desarrollo = Éxito.

Es una cultura que piensa en el largo plazo, en lo que podemos llegar a ser.

En estas empresas se piensa que si las personas son mejores cada día, nos ayudarán a ser mejores, y por lo tanto invertimos en el desarrollo profesional y personal de las personas.

Se invierte mucho en formación, en desarrollo, en ayudar a las personas a ser mejores.

Cuando las personas se van de la organización a hacer otros proyectos personales o profesionales se les aplaude y se les felicita. Es maravilloso ver cómo otros crecen.

No nos preocupa tanto el presente como el futuro.

La desventaja es que es más lenta que el resto de culturas. La autoridad siempre es más rápida que el desarrollo.

La órden siempre es más rápida que la pregunta.

Aunque la segunda sea más efectiva en el largo plazo.

Y mi pregunta para ti hoy es ¿en qué tipo de empresa te gustaría trabajar?

Que tengas un gran día

Noticias relacionadas

La decisión que todo estudiante debe tomar a la hora de matricularse en una carrera u otra representa uno de los momentos más importantes en su vida. Un verdadero punto de inflexión que va a determinar cómo será su futuro laboral. Si bien es cierto que los gustos del alumno han de ir por encima de todo, lo más recomendable en este aspecto es apostar por aquellas formaciones con altas perspectivas de empleabilidad. 

Son numerosos los motivos que pueden dar pie a que quiera venderse una empresa. En algunos casos, cuando el propietario del negocio en cuestión llega a una edad considerable, decide ceder el mando a algún familiar de mucha confianza, como podría ser un hijo. Sin embargo, no siempre existe dicha posibilidad por falta de voluntad o de descendencia.

Si estás considerando emprender una reforma en tu hogar pero te encuentras desconcertado por la multitud de decisiones que implica, estás en el lugar adecuado. Aquí te ofrecemos una guía detallada para asegurar que tu proyecto se desenvuelva sin contratiempos y cumpla con tus expectativas en todo momento.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto