"El Yunque del Sol" es una expresión literaria que se refiere al temido desierto de Nefud, en ocasiones también al Ténéré, en el Sahara.
El Nafud es conocido por sus repentinos vientos violentos, que se manifiestan en las grandes dunas en forma de media luna, y constituye una gran depresión oval en nuestro planeta.
Localizado en el norte de Arabia, es atravesado en la ficción cinematográfica por Lawrence de Arabia (el Cnel. T.E. Lawrence), interpretado por Peter O Toole.
En realidad, Lawrence solo solicitó a Auda ibu Tayi un guía para adentrarse en el Nafud, en fechas previas a la batalla de Aqaba (el 6 de julio de 1917, durante la rebelión árabe) Auda se negó, porque no era necesario.A pesar que fue duro su tránsito nunca se adentró en el Nafud, como se muestra en la película Lawrence de Arabia.
Más fiel a la realidad es el sorprendente parecido entre el verdadero Lawrence y Peter O Toole.
Esta semana se cumplieron 94 años de la proclama de la independencia de Siria, un 7 de marzo de 1920, una de las consecuencias de aquella rebelión.
Lo que siguió explica el descalabro en el cual ha caído la región.
Merced a los planes colonialistas y su obsesión por dibujar mapas a su antojo, llevaron a Francia a desplegar ochenta mil soldados franceses y obligar a Faysal a exiliarse, quedando Siria en manos francesas. El dominio francés incluyó al Líbano, pero más fragmentaciones siguieron.
Francia lleva a cabo una planificada fragmentación premeditada, pero la resistencia de los nativos es tan grande que finalmente debe ceder a mantener a Siria unificada.
En la zona británica, las vilayets (provincias) otomanas de Mosul, Bagdad y Basora se unen para formar una entidad nueva llamada Irak, bajo mandato británico, donde vuelve a establecerse un trono para Faysal
Palestina también queda en manos de los ingleses, que tenderán un puente con Iraq a través del corredor que denominarán Transjordania, luego Jordania, donde reinará por disposición de ellos el rey Abd Allah.
Gran parte de lo que será el hoy conflictivo Medio Oriente, fue así una creación de las potencias colonialistas que dibujaron su arbitrario mapa de aquel tiempo, y sentenciaron un trágico destino.
La lección debería haber sido aprendido por las potencias colonialistas, que sin embargo, en forma solapada, siguen incentivando proyectos separatistas que defienden la intangibilidad de las fronteras que trazó el colonialismo.
Ya sea a la hora de reconstruir lo desmembrado por la fuerza, o separar lo que fue unido artificialmente, debería estar siempre en el recuerdo de Occidente el nefasto reparto de Oriente Medio que siguió a la rebelión en el Yunque del Sol.